Mazrim

22/11/2007 18:14:29

Todos los comienzos eran duros, pero la paciencia era algo que nunca se le acababa. Aprender de alguien más joven podia resultar humillante para algunos... pero no para él. El conocimiento era más importante que todo lo demás, eso lo tenía claro.

Su nuevo maestro era muy diferente del anterior. Cuando comenzó a estudiar el Arte, lo hizo con un hombre mayor, experimentado, paciente y diligente. Aprendió mucho de los conocimientos y las virtudes de su maestro, creando una base teórica sólida y fuerte, así como un caracter decidido, emprendedor y conservador; pero su muerte repentina y el dolor de su pérdida le llevó a abandonar sus estudios y su ciudad natal durante años.

Pero ahora tenia una nueva meta, y necesitaba recuperar el tiempo perdido. Su nuevo maestro habia resultado un joven vivaz, elocuente, ambicioso y poco prudente, amante de las aventuras y los riesgos. Era justo lo que estaba buscando.

Si, los comienzos eran duros, y él era muy paciente... pero ya habia perdido mucho tiempo.

ramonet85

26/11/2007 22:11:19

Extrañado.

Asi se sentia, tras estudiar detenidamente la fisionomia de aquel hombre (siendo generoso, pues "anciano" seria mas fiel cronologicamente hablando) entrado en años que le proponia algo que rompia los moldes de su existencia; acostumbrado a vivir en soledad, su contacto fisico con otros se resumia a su familiar y a algun apreton de manos, exceptuando algun arrebato carnal que satisfacia en alguna humeda alcoba del burdel...

Aquel hombre le proponia algo que implicaba el mantener una constante presencia cercana a el, y algo mas inquietante, que consistia en el vinculo emocional (cosa que habia tratado desesperadamente de evitar durante estos años) que deberia entablar con él. ¿ Maestro ? Jamas podria haber imaginado que en el rigido y estratificado sistema de clases imperante en Calim él, un joven aprendiz, pudiese enseñar a alguien... ¡ Y mas si ese alguien resultaba ser casi el triple de longevo !

Un nuevo brillo lustraba su mirada. Ya no era aquel moreno zagal que correteaba por las abarrotadas callejuelas calishitas, levantando arena y causando el caos con sus recien aprendidas dotes arcanas. Era hora de canalizar toda esa energia inherente a la juventud y ese impetu caracteristico, virtud y defecto a la vez.

Tal vez no fuese mala idea aceptarle como aprendiz. "Mas sabe el elfo por viejo, que por elfo", o algo asi decia mi tia.
Creo que esta relacion va a ser fructifera, queda mucho por aprender y mucho trecho por andar.

Mazrim

29/11/2007 15:27:26

El duro e intensivo entrenamiento estaba dando sus frutos. Los conocimientos, largo tiempo olvidados por el dolor y la pena, volvian a él rápidamente ante las constantes situaciones de peligro. Su mente se afilaba y perfilaba tras analizar cada combate y cada viaje, buscando errores en sus actos, combinaciones de conjuros más eficientes y formas de protección más poderosas. Eidolon habia sido un gran maestro en este aspecto, su juventud y su ambición habian contagiado estos viejos huesos a seguir y proseguir en su cometido.

Habia recuperado mucho tiempo, es cierto, sin embargo ahora necesitaba otros conocimientos que Eidolon ya no podia otorgarle. Las aventuras y los viajes le habian ayudado, pero ahora su nuevo destino se encontraba en la propia ciudad. Sus armas ahora eran la paciencia y la inteligencia para recomponer los secretos que su antiguo maestro antaño le enseñó, y estos secretos eran una parte imprescindible en su plan.

Eidolon también tendría su momento. Encajaba en uno de los perfiles casi a la perfeccion. Su ayuda no quedaría en saco roto.

Mazrim

30/11/2007 15:15:30

Ya tenia a varios candidatos válidos para formar el gremio. Un sastre, un herrero y dos imbuidores, ademas de él mismo. Era un comienzo, pero la ciudad necesitaba más herreros, pues sus obras eran las más consumidas. Estaba dando los primeros pasos hacia su segundo objetivo, los próximos dias y semanas serian muy importantes, para él y para el Gremio. Debia trabajar duro, y en muchos frentes.