Mazrim

16/01/2008 16:05:37

No encontraba esa maldita cueva. Las noticias de drows en Mir le habian abierto la curiosidad... Si habia drows, tendria que haber una cueva hacia abajo. Y sabia perfectamente lo que encontraria abajo... Adamantina, un metal muy poco común en su zona, pero que podia encontrarse en la Infraoscuridad. Si encontraba una mina, el Gremio se vería muy beneficiado... Y él con el Gremio, por supuesto.

Pero la habian buscado por muchos lugares sin encontrarla. Algo le decia que la cueva estaba en el pantano, un lugar poco explorado debido a los peligrosos lagartos, y un lugar idóneo para un escondrijo poco frecuentado.

Desde luego, nunca se hubiera atrevido a ir solo, era demasiado peligroso y no estaba tan loco como para arriesgar su vida por un metal, ni siquiera uno tan escaso, por eso habia reunido un par de compañeros para la tarea.

Los lagartos eran fuertes, pero poco inteligentes. Eso les convertia en presa facil para sus encantamientos, así podia engañarles y hacerles luchar entre sí, reduciendo los riesgos para su persona. Los más peligrosos eran los magos.

Uno de sus magos habia huido, y cometí el error de subestimarlo. Para más inri ese maldito gnomo... tras un par de combates, se esfumó, y su desaparición dejó libre al lagarto que dominaba, que tras unos segundos de confusión nos atacó sin tregua. Conseguí tumbarlo con mi magia, pero de repente salieron aun más lagartos, más grandes que el anterior. Eran muchos, no le gustaba abandonar a un compañero caido, pero tenia que salir de allí. Tras salir por la cueva, se encontró con varios lagartos más... Era una emboscada!! Seguro que el mago habia dado la voz de alarma... maldito... y el gnomo... Tal vez lo hubieran hecho prisionero.

Estaba solo y no estaba dispuesto a enfrentarse con tantos de ellos a la vez, así que me teleporté de vuelta a la ciudad.

Ese maldito mago... no debí dejarlo escapar. Ahora, los lagartos estarían más alerta, y la adamantina más lejos.

potasa

16/01/2008 16:56:42

[i:eb717ae780]Conocer otra posible entrada al inframundo, era algo que para Arlas no podía dejarse perder. Demasiadas cosas así tiene el gnomo, y muchas veces le enturbian su siempre cientifico juicio.

Todo marchaba bien, avanzan seguros y controlando los movimientos de sus adversarios para así porder vencerles. Sim embargo, el rol de presa cazador cambió inesperada e inconcientemente para el gnomo y sus dos acompañantes.

Con la ayuda del lagarto que había doblegado a su voluntad, parecía posible salir bien parado de aquel combate. Nada mas lejos de la realidad.
Sin saber como, un zumbido hizo perder al gnomo la consciencia de la realidad. Sin duda alguno de esos arcanos había sido capaz de cogerle desprevenido y todo se convirtio en oscuridad.

Se desperto atado frente al antiguo lagarto dominado, el mismo lagarto, pero consciente de que Arlas había hecho desecho en su mente a su voluntad. Evidentemente no le gustaba demasiado.

Al parecer había conseguido atrapar al elfo que les acompañana a Zach y el. Interrogado, el elfo les dijo lo que querian oir y lo dejaron marcharse. Los lagartos ya sabían los nombres y que hacían alli aquellos tres individuos. Arlas sabía que debía huir como fuese.

Intento confundir al lagarto con una dialectica rápida y contradictoria. Con la esperanza de ser capaz de confundirle en algun momento, pero fue en vano. Arlas vio como el lagarto alza su enorme espadon con intencion de partirle por la mitad. Agotó hasta el ultimo segundo para abordarle con la palabra, pero nada. La hoja se descargo ferozmente sobre la espalda del gnomo, justo a la vez que Arlas era capaz de concentrarse y usar su salvadora teleportación. Todo fue muy rápido.

Apareció a las afueras de calim con un terrible corte en la espalda, y apenas era capaz de ponerse en pie por el dolor.

Todo había salido mal, y encontrar la entrada al inframundo se complicaba. Esos lagartos estaban mas que alertados y despues de lo ocurrido una posible tregua y conversación con ellos parecía imposible.
Aún así, seguia vivo.[/i:eb717ae780]

Dilvish

16/01/2008 19:26:35

[i:a4795ec12b]Wyrmnoth recuperó poco a poco el control sobre si mismo.

El gnomo había muerto y su cadáver desaparecido... ¿pues acaso alguien había sobrevivido a un golpe del espadón del enorme cacique?

El líder de los lagartos de la marisma no era especialmente inteligente ni un hábil político y negociador pero era capaz de entender que los humanos del sur no hacían mas que exterminarlos por causas desconocidas para el bárbaro hombre lagarto.

Saliendo de su tienda, llamó a los ancianos de la tribu y a Shusrrynk, el chamán. La situación se hacía insostenible y el consejo de la tribu tendría que debatir toda la noche hasta encontrar la solución que contentase a los espíritus.

El momento de la guerra había llegado.[/i:a4795ec12b]