lachean

10/02/2008 18:27:24

La señorita nos invita a pasar amablemente al interior del edificio. Su rostro permanece tranquilo pero aun así no nos deja demorar en nuestras acciones. Sabe de la gravedad de nuestra herida.

Coloca sus manos sobre nuestros muñones al tiempo de entonar unos rezos, supongo. Sus manos son cálidas como un fuego en medio de la noche. El dolor comienza a remitir y la sangre se coagula, dando un toque aún más macabro a mis vendajes. La herida deja de sangrar.

- Necesito preparar el ritual. Volveré en unos instantes. Intentad relajarse, ahora estáis en lugar seguro.

Varios caballeros se acercan hasta nosotros, ofreciendo agua y algo de comer, así como mantas para secar nuestras ropas mojadas. Aun estoy algo conmocionado por lo ocurrido: esa extraña explosión que me hizo ver la oscuridad, mi mano cercenada...Parece que estoy viviendo una pesadilla.

La joven vuelve de nuevo. Parece que el ritual o como se llame lo que va a hacer está a punto de iniciarse., ya que varios iniciados traen diversos materiales. También acuden dos caballeros mas, un hombre y una mujer. Parece que son gente importante en este lugar, ya que la señorita les trata con mucho respeto. Aunque menos que con el que ella es tratada por ellos.

Primero intentarán sanar al caballero Reb. Ya lo tengo asumido. Un enano siempre irá en importancia detrás de un tipo alto. Para eso estoy entre ellos, invitado. Reb se coloca en el centro de una especie de estrella formada por la posición de los paladines y clérigos. A partir de aquí todo es demasiado confuso para mí.

Los cánticos resuenan en la sala y según creo entender, canalizan parte del poder del dios al que siguen para curar a los heridos. La calma y la paz se respira en el ambiente. Jamás me había sentido tan bien. Cada clérigo contribuye con sus rezos a este ritual. Pero es esa joven, Lomoniak o algo así se llama, la que guía a sus compañeros.

Las palabras se llenan mis oídos, aturrullándome. Realmente no sé si estoy vivo, muerto, consciente...Me encuentro envuelto en el proceso, formando parte del mismo. Estos caballeros son poderosos...Y tienen el favor de su dios.

Una mano amorfa comienza a formarse como un apéndice en el brazo de Reb. Poco a poco va tomando forma, mientras los cánticos y conjuros inundan todo el espacio. Finalmente el silencio y la joven cae al suelo, agotada. Reb permanece atónito mirando su recién creada mano para al instante correr a ayudar a su benefactora.

Lomoniak se encuentra demasiado débil para intentar repetir el proceso conmigo. Ya lo sospechaba. Cede la responsabilidad a uno de los clérigos presentes, un tal Khilak creo que le llamaron antes. Este tipo según parece tiene los conocimientos necesarios para realizar el ritual, aunque será ayudado como anteriormente por los demás clérigos y paladines.

- “Escucha Clangedin las súplicas de estos hombres a su Dios y concédeme tu favor como tantas veces has hecho.” Es todo lo que pude decir.
Lavaron mi muñón con agua sagrada y comenzó el ritual. Nuevamente la serenidad me embarga y sus rezos se clavan en mi cabeza suavemente. Casi no siento mi cuerpo. La sensación es indescriptible. Varios minutos después al igual que sucediera con Reb una extremidad amorfa comenzó a tomar forma de mano donde antes estaba la mía.

- “Aún deberéis trabajar el nuevo miembro hasta conseguir la movilidad que teníais con el anterior. Nuestro Dios ha escuchado nuestras súplicas y os ha concedido su favor.”

- “No hay manera de expresar mi gratitud con ustedes caballeros. Yo y mi raza estamos en deuda con vosotros.”

Intentamos recordar que fue lo que sucedió en el bosque. Yo no recuerdo nada excepto esa explosión y despertar sin la mano, creo que fue un rayo, ya que había una fuerte tormenta, pero Reb está seguro de que dicha explosión fue provocada por un conjuro de elevado nivel que usan algunos clérigos. Por todos los..!!! ¿Es posible que un clérigo haya sido el responsable de esto? Él no pudo ver nada tampoco, pero por alguna razón sabe de lo que habla. Dice que en alguna ocasión ha visto ese conjuro canalizado sobre seres mortales con idéntico resultado.

Por las barbas de Clangedin juro que si algún ser ha sido el responsable de estas mutilaciones, sea elfo, humano, clérigo, tira luces....sea lo que sea, juro que si lo vuelvo a encontrar dejaré que mi ira me lleve y ni siquiera los lobos podrán comer de sus restos.

//Como no había DM para supervisar la escena hice varias screens que os he enviado a la cuenta de correo. Todo esto queda a la aprobación de la dirección.//