Dilvish

11/06/2008 10:20:54

[b:91c8479cc9][i:91c8479cc9][color=red:91c8479cc9]F[/color:91c8479cc9]uerte es el brazo del rey guerero,
[color=red:91c8479cc9]l[/color:91c8479cc9]as murallas de su fortaleza lo son igual,
[color=red:91c8479cc9]e[/color:91c8479cc9]l cemento es la sangre de hombres y elfos,
[color=red:91c8479cc9]c[/color:91c8479cc9]ien enemigos han encontrado allí el final!

[color=red:91c8479cc9]H[/color:91c8479cc9]éroes y villanos buscarán el tomo,
[color=red:91c8479cc9]a[/color:91c8479cc9]unque las espadas se alzarán a miles,
[color=red:91c8479cc9]n[/color:91c8479cc9]o lo logrará ninguno solo,
[color=red:91c8479cc9]e[/color:91c8479cc9]n la oscuridad solo triunfan los viles!

[color=red:91c8479cc9]G[/color:91c8479cc9]loria y oro para el vencedor del juego,
[color=red:91c8479cc9]r[/color:91c8479cc9]uina y verguenza para el resto,
[color=red:91c8479cc9]a[/color:91c8479cc9]l final, como siempre, vencerá el fuego! [/i:91c8479cc9][/b:91c8479cc9]
_________

[i:91c8479cc9]Oboldo observó el caos que se apoderaba con rapidez de su fortaleza. Sin duda alguno de los necios aventureros había escapado y provocado ese fuego para distraer a sus tropas.

De repente se giró y vió como varios de los humanos y elfos atrapados conjuraban libres de sus ataduras. Un gnomo desapareció de su vista llevandose a dos compañeros con él.

-"¡Desplegaos...!".- gritó. "Buscadlos a todos... en algún lugarrr del castillo han de estarrr, y esta vez... ¡los quierrro muerrrtos!"[/i:91c8479cc9]

//Postead aqui las vivencias de vuestros pjs en la escena de ayer. Gracias a todos por participar.

1saludo

Arxaon

11/06/2008 11:04:43

Dos eran los monjes que habían acudido al monasterio dispuestos a partir hacia Flecha Negra. Decididos, partieron hacia su destino.

No había sido muy complicado sortear a los guardias orcos del camino. Sin embargo, ahora estaban frente a su fortaleza. Y no estaban solos. Frente a la puerta de la fortaleza se encontraban otras personas, e incluso un ilícido. Sin duda, o buscaban lo mismo, o era una increíble coincidencia.

Los monjes treparon la muralla e intentaron evitar el combate. Pero un orco los vio. Wilhelm se giró y junto a Loander consiguió acabar con él.
Demasiado había durado la pelea, pues ya tenían encima a un tropel de orcos.

Wilhelm despertó más tarde. Loander tiraba de su brazo. No había tiempo para situarse rodeado de tantos orcos.

Estuvieron buscando hasta que encontraron una gran puerta. Probablemente, la puerta del castillo del Rey. Se enfrentaron al único orco que la custodiaba, pero pronto llegaron más. Los monjes intentaban esquivar sus ataques, pero un solo golpe bastó a los orcos y su fuerza descomunal para vencer.

Ahora estaban presos en el castillo del Rey orco, rodeados por muchos de sus guardias. Con cada preso que llegaba, se iba algo de esperanza.

Wilhelm se puso a pensar que, frente a un enemigo tan poderoso, deberían haber actuado todos en equipo. Luego podrían decidir entre ellos, de una u otra manera, quién se llevaría lo que andaban buscando. Ahora ya era un poco tarde, pero aún así, unidos, cabía la posibilidad de escapar y quizá de cumplir el objetivo previsto. El monje se lo dijo al resto, en voz baja pero suficiente para que pudiesen escucharlo, pero solo hubo una respuesta y fue esquiva. No estaban dispuestos a trabajar en grupo.

El rey orco se acercó a los presos. Era un orco enorme, fornido y con una gran espada de fuego. Tras mirar a los presos preguntó: "¿Qué hacéis aquí, en mi fortaleza?" Nadie parecía dispuesto a responder. Si nadie tenía otra ocurrencia, diría la verdad. Pero otra persona se adelantó. Quería negociar con el orco a título personal. Sin embargo, Loander dijo: "Buscamos un librito..." La carcajada del orco resonó en la estancia. Después añadió: "Sólo hay un libro en mi fortaleza que valga la pena buscar. ¿Pero qué me impide matar a unos humanos que entran en mi fortaleza por un libro?"
La pregunta quedó sin respuesta. Algunos ya intentaban deshacerse de sus ataduras, aunque poco serviría con la cantidad de orcos que había ante ellos y, además, no tenían sus armas.

De pronto, un orco entró en la sala gritando: "¡Fuego!¡fuego!" Los orcos desviaron la atención. Era una oportunidad única. Había que aprovecharla. Casi todo el mundo tenía las manos libres cuando se hizo la oscuridad en la sala. Caos... eso habría a partir de ahora.

No había tiempo para pensar... ¿el libro o la puerta?

MasojHunett

11/06/2008 12:11:04

[i:73679756fb]Dos horas antes el hombre permanecía sentado de piernas cruzadas en los dormitorios públicos de Puerto Calim.Estaba cubierto por unos ropajes negros,una capa y una capucha.Permanecía pensativo,meditando sobre el porvenir que le aguardaba y como muchas otras veces, intentaba borrar de su cabeza la imágen de un final trajico que sus ojos proyectaban en su pensamiento.

Salió de los dormitorios y se encamino hacia el barco.La noche y la oscuridad que le envolvía le hacian inperceptible en el entorno.
El viaje en barco fue tranquilo,tan solo la brisa marina era lo único que le incomodó durante al travesía.

Una vez llegó al puerto de Puerta de Baldur,fue a reunirse con el resto de su grupo.
Antes de llegar a ellos,se coloco la palestina de color negro cubriendose la nariz y la boca.Acto seguido,saco un recipiente con un pigmento de color negruzco y se lo unto por la parte de los ojos ocultando así pues, sus rasgos faciales.

La espera fue un tanto larga,pero al final,los monjes decidieron salir del monasterio...
Les seguimos y llegamos a la fortaleza.Para nuestra sorpresa un tercer grupo también estaba presente.Nos encaminamos al interior y entonces empezaron a escucharse los gritos y el resonar del metál contra el metál.

Logramos abrirnos paso entre los arqueros,poco después un grupo de guerreros orcos bien fornidos nos hizo replegarnos y optamos por entrar con el conjuro de santuario, el cual nos hacía etereos para los ojos del enemigo,pudiendo pasar sin ser detenidos.

Poco después el hombre se despertó maniatado,rodeado de otros muchos.Estaban capturados...
Logrozó zafarse de sus ataduras y pensaba en la forma de como escapar de ese maldito lugar.[/i:73679756fb]

ArkasLynvail

11/06/2008 13:45:10

[color=red:12784f6769]Buscando el libro, I parte


[i:12784f6769]Then resopló cansado, los conjuros de invisibilidad y visión mágica se agotaban y los monjes tardaban más de lo previsto en salir de su monasterio.Pasaron las horas y por fin dos monjes salieron partiendo hacia el norte, el grupo les siguió a una distancia prudente para que los finos oidos de los monjes no les escucharan.

Aún así, tenían prisa ya que apenas hicieron varias paradas en todo el largo camino hacia el norte.Pronto llegaron a la marca argéntea y subieron por las montañas junto a un caudaloso rio.

Los orcos merodeaban los alrededores, pero el grupo no molestó a nadie, para los orcos no era más que una suave brisa que movía levemente el fuego de sus hogueras.Sin embargo los monjes no fueron tan sigilosos, aún así redujeron a los pocos orcos que se presentaron en su camino. Pronto llegaron a la fortaleza denominada la flecha negra que parecía repleta de orcos armados y bien provistos.
El grupo planeaba como infiltrarse sigilosamente en la fortaleza, cuando otro grupo de aventureros abrió los portones.

De éstos salieron decenas de orcos y todo se volvió un caos, flechas, espadas, caidos...Then no daba para todo, para colmo los orcos arrastraban a los caidos al interior de su fortaleza.
Pasarían al plan B, se adentrarían a la fortaleza en santuario y esperarían oportunidad, los problemas se había duplicado al añadir a la búsqueda del libro el salvar a los cofrades desaparecidos.

Al final solo quedaban Nadie y él mismo, en santuario y observando a la multitud de orcos que vitoreaban a las palabras de un lider, más grande y que portaba un enorme espadón en llamas.
Then hizo un gesto a su acompañante y se deslizó tras las cortinas del palacio, aunque fuera en santuario aún tenía sus costumbres y prefería ser precavido.

Pronto apareció en una de las habitaciones y disipó su santuario mentalmente mientras ponía unas yescas y hacía una hoguera en el suelo. Se percató que estuviera solo y cuando lo hizo fue lanzando muebles, cortinas, colcohnes....todo lo que pudiera en ese fuego que sería aumentado por las trampas sónicas que lo rodeaban.

Leyó un pergamino y el conjuro de santuario volvió junto al rey orco y los presos, entonces el castillo retumbó y un orco vino avisando del fuego. El caos se volvió a hacer pero esta vez lo había provocado él.

Los orcos se dispersaron, los presos se soltaron y en ese momento la oscuridad se hizo en el amplio salón.[/i:12784f6769]

Ilinoth

11/06/2008 16:06:30

[i:6173a048ac]Eran demasiados, demasiados! *Se lamenta exausto, Ilinoth*

Sigui a mi lider con firmeza y paso presto, pero una resplandeciente y aterradora luz cegó momentáneamente mis ojos. Esa luz,... antes de poder vislumbrar aquello que se aproximaba hacia nuestras cabezas observé a mi alrededor.
Todos los mercenarios y buscadores del Gran Tomo, estaban desperdigados y callendo heridos de muerte para cuando pude determinar que era esa luz.
Nubes cegadoras de flechas impregnadas del poder del trueno se dirigían sin demora hacia nosotros; mis conjuros desviaban gran parte de ellas, pero un número elevado de ellas penetraban en las auras de protección.
Rápida e instintívamente me cubrí con mi rodela , colocada en mi férreo brazo izquierdo.

Debilitados pero vivos, muchos seguimos adelante. Perdí a mi lider y en su búsqueda sólo lograba avistar ordas incontables de orcos con unos bíceps hipertrofiados incluso para un cacique o caudillo de esta raza guerrera...,;las espadas que empuñaban brillaban aún mas que las propias flechas que avanzaban con tesón sobre nosotros.
Me encontraba débil y comencé a conjurar sortilegios de protección, sin embargo y en el mismo instante que comencé a conjurar noté un golpe en mi cráneo. No fue mortal pero ese golpe había quebrado todas mis defensas mágicas! Sin ningún tipo de energía mágica no tardé en ser alcanzado por un grupo de orcos mientras escupian gruñidos a la carrera.
Cuando saque la espada, percibí varios golpes, el último de ellos me hizo perder la consciencia.

Despertamos rodeados de orcos.No era el único prisionero.

El Gran Caudillo Orco se acerco a hablar con los prisioneros ,pero una explosión ignea hizo al lider orco percatarse de que algo ocurría.La fortaleza estaba en llamas.

Mientras tanto, comenzamos a desatarnos ,aprobechando la incertidumbre del momento. Uno de los arcanos puedo escapar con dos de sus compañeros mediante el conjuro teletransporte.La sala ardía en llamas y el libro aún permanecía allí. No dejaría a los que me son fieles, sin embargo preparaba el mismo conjuro con el que el gnomo había escapado, no pensaba morir abrasado..., no..[/i:6173a048ac]

Joganth

11/06/2008 20:34:27

[i:6f8edb2208]Bajo su forma humana alternativa, Hermano por fin había logrado deshacerse de sus ataduras.

"Espero que no hayan palos", decía el muy iluso cuando se reunió con el resto. Los cientos de flechas que hacían honor al lugar donde se encontraba lo habían acribillado en el patio. Esto sumado a que no andaba precisamente muy fino esa noche lo condujeron a la jaula donde los que no estaban ya presos no tardarían en llegar.

Sin embargo no estaban todos cuando Oboldo empezó a hablar, lo que se notó cuando los orcos histéricos irrumpieron gritando "¡Fuego, fuego!"

En ese momento, Hermano observó la estancia en busca de ventanales: Una mantícora podría huir por alguno de ellos con no menos de dos o trés compañeros a cuestas....
[/i:6f8edb2208]

anbu

11/06/2008 20:48:44

[i:321385eee9]Si esto empezaba mal desde el principio, el fichaje de ultima hora...vaya fichaje...si es que solo piensa con la... Ese viajecito hasta La Marca, vaya paseo, un paseo con un cara pulpo....agradable...todo el maldito viaje, con la mascarita de los....me tienen frita, todo para llegar a una fortaleza orca y ver como aparecia aun mas gente, el colmo, aqui se ha ido alguien de la lengua, no quiero señalar...pero vamos, se quien es.

Lo mejor es cuadno se ponen a entrar por al puerta, Alegria!...claro qeu si, lo mejor para entrar en una fortaleza enemiga es abrir la puerta y saludar alegremente, asi no se puede infiltar una...cuando trepe ya estaban todos alerta, asi no hay manera, la lluvia de flechas, una marea de flechas, me estaba cansando de pararlas cuando me ordeno que fuera a por ellos y me manda con la otra...ains.

No pensaba trepar mientras un ejercito me disparaba, asi que busque la subida y la encontre, subi y pum, rodeada de orcos, me pongo a repartir porrazos, pero nada que salen mas, y mas, logico!! es un ejercito, ¿Que esperabas Rosa? que solo hubiera unos pocos...¿retirada? pues obvio,

Todos en santuario, los guio, arriba, a la entrada, trampas, por favor...que soy yo, psamos tranquilamente, pero siguen a la nueva y puff..al suelo, luego va el moro y luego Then, revivo a Then y seguimos, a mi me diron un golpe que me dejo a punto de ver a mis padres...pero creo que me salve o me salvaron.

El gran salon, ese orco grandullon hablando con los presos, joder, hay mas que antes ¿Ha venido todo el mundo? ojala los maten a todos, pero Then tiene un plan, se larga y me deja sola aqui...oish...pero si solo queremos el libro...ah miralo, por alli viene, seguro que le ha metido fuego a algo...

Pensamientos de Nadie

anbu

13/06/2008 04:44:21

[i:4873294493]Si, le habia metido fuego a algo....olia a chamuzquina que daba gusto.

Viendo orcos cargando cubetas de aqui para alli, bajamos al sotano, que sotano, inmenso...total que llegamos donde estaban lso presos, Oboldo el rey orco, les propuso un juego, coger el libro e ir nos, ese orco es gilipoyas, es tonto, muy tonto, pero tonto, tonto tonto, creo que es rey por ser el mas subnormal de todos. Fuimos a la biblioteca de la tercera planta seguidos por el rey y su sequito de tontos, Abd habai visto que por ahi habia un portal que llevaba a un sitio donde dos menudos se liaban a tortas con un bicho grande, feo y bestia, vamos un bicho de los de toda la vida, asi que vamos para alla, entramos, Then ve un orco y junto al resto se alnzan a por el a cargarselo, yo no lo vi muy buena idea, recordando al rey orco y su sequito tras de nosotros, pero luego recorde que eran muy tontos. Seguimos y vi a los dos canijines peleandose con el bicho, avise al resto que se entretenia pegandole a otro indefenso orco de por ahi y fuimos a por el bicho, tras un rato el bicho se murio, logico despues de la paliza, asi que Oboldo que se lo estaba pasando en grande el maldito, nos dijo que habia otro bicho mas, su hermano, hermano del bicho, no de Oboldo, asi que otra vez a por el bicho, que se vuelve a morir, Oboldo saca el libro de los..... y lo hecha a volar, yo me lanzo tras el en forma de garrapata y lo tiro al suelo y derrepente dieciochomil manos se precipitan sobre el libro como gaviotas sobre pescado muerto, pero se hace la oscuridad, bueno ya estaba muy oscuro, pero digo aun mas, la nueva coge el librito en la oscuridad y nos vamos, todos para arriba, en forma eterea, de vuelta a casa con el trabajo bien hecho.

Solo me queda hecharle la bronca al inutil de Then...miralo como corre el condenado, tendra ganas de "relacionarse" con su haren...que trasero tiene......¿Eh y el resto?.....Bah que ardan.....¿Que estaba yo pensando?....

Pensamientos de Nadie

MasojHunett

13/06/2008 08:23:35

[i:8743232294]Con la bola puedo ver lo que mi vista no alcanza.Y así fue.Utilice la bola y ví a los dos canijos luchando contra una bestia enorme.Acabamos con una y luego el rey orco nos comunicó que había una segunda,hermana de la bestia anterior.
Conseguímos lo que habíamos venido a hacer.
Y yo hice mi parte del trabajo,por eso estaba allí,para utilizar la bola.Espero mi parte de la recompensa,al fin y al cabo,siempre accedo ante el mejor postor.
[/i:8743232294]

*Abd permanecía tumbado en los dormitorios píublicos,tumbado y mirando al techo.En su boca,una amplisíma sonrisa se dibujaba.....*

radabar

13/06/2008 18:34:04

"En la oscuridad sólo triunfan los viles" -ésos se llevaron la oscuridad consigo-. "Gloria y oro para el vencedor del juego" -quédatelo, vil-. "Ruina y vergüenza para el resto" -¿? Pero si me siento henchido de orgullo..., ver todos esos carroñeros asestando espadazos y abalanzándose sobre un destrozado tomo... Tú sí que me avergüenzas, hombre del cetro de infraoscuridad, el primero en aceptar la propuesta del maestro Wilhelm para trabajar en equipo y decidir después quién se lo quedaba, el primero en reirte silenciosamente de sus palabras, también tú, extraña mujer, atacando a un mediano en la oscuridad, tan hábilmente o mejor que a la luz... y tú, "Rosa", arrastrándote por el suelo cual serpiente y cogiendo el libro...
Quizá Tarilonte se confundiera en una parte del poema, pues yo veo que la gloria, el oro y la vergüenza, tienen el mismo objetivo, los viles ganadores.
Rezagado del grupo y defraudado con éste, cruza un portal. No volvió a verlos, pero algo le decía que a él sí que le veían.

ArkasLynvail

13/06/2008 18:40:56

[i:f0c0390613]Puso las botas sobre la mesa y leyó el pergamino, sonrió al ver lo que extrañamente coincidía el poema con lo que había pasado. Pero después de todo vil, malvado o héroe es solo una percepción.
Para él servía lo tangible, y él podía palpar aquel tomo tan valorado.

Venció el fuego que provocó y en la oscuridad se hicieron con el tomo. Rosa asintió con una media sonrisa en señal de aprovación al que escribiera el poema y después se dirigió a una sala repleta de espejos.


Verían como sacar provecho del tomo.[/i:f0c0390613]