Azlinraeh

05/07/2005 15:25:20

[i:31091c87e3]La celda estaba húmeda. Sin ventanas, había un clima de opresión irrespirable.
Y en un lado de la celda, en el frío suelo de piedra, estaba tumbada la prisionera. Sus ojos carmesíes carentes de vida miraban el techo, pero no veían. Estaba absorta en sus pensamientos.

No sabía cuanto tiempo había pasado desde su captura. Al principio calculó el tiempo según la frecuencia con que le llevaban algo de comida y bebida, pero pronto se dio cuenta de que los intervalos no eran regulares, por lo que era imposible calcular con certeza el paso de los ciclos de Narbondel.

Pensaba en el castigo que la esperaba, pero no tenía miedo. No era la primera vez que se encontraba en esa situación. Ya fue sometida a constantes torturas en su ciudad natal, Rilauven, por parte de su madre y hermanas. Escapó antes de ser sacrificada, pero de ella ya no quedaba más que un ser incapaz de sentir nada, había muerto interiormente, y solo quedaba una perfecta asesina que solo conseguía sentirse viva cuanto más cerca estaba de su propia muerte.

De vez en cuando pasaba un guarda vigilando las celdas. Era el mismo que le llevaba comida y bebida cada cierto tiempo.

-¿Disfrutando de tu estancia? – preguntó el soldado al verla.

La mujer no se dio por enterada.

-No se que te tendrá preparado la matrona, pero se está tomando su tiempo. No me gustaría estar en tu lugar.
-Dile a tu matrona que no me haga perder el tiempo. Si vais a matarme, hacedlo ya. – replicó la asesina sin mover ni un músculo.
-¡Muestra el debido respeto, perra! Espero que la matrona te haga sufrir mucho antes de matarte, eso quizá te baje los humos. Así no te mostrarás tan insolente.

El soldado esperaba una respuesta, pero la mujer volvió a su estado anterior de total pasividad. El soldado la miró con desprecio, y se giró para volver por donde había venido.
Cuando el soldado había avanzado varios metros, escuchó una voz a sus espaldas.

-Deberíais matarme mientras podeis. Tarde o temprano conseguiré salir, y tu serás el primero a quien mate.

El soldado se giró furioso, aunque inmediatamente soltó una carcajada.

-¿Y qué te hace pensar que podrás escapar? Cuando salgas de ahí, será para afrontar tu merecido castigo.

Ella volvió a su estado de meditación, como si no le hubiese oído.
Cuando el soldado hubo desaparecido por una puerta al fondo del pasillo, la mujer presintió algo extraño. Una de las paredes de la celda parecía derretirse. Al momento, una puerta dimesional se formó en la pared, y de ella surgió un varón drow, con extravagantes ropas y un pintoresco sombrero emplumado. Se quedó mirando a la prisionera con una sonrisa en los labios.
-Jarlaxle. – dijo secamente la mujer.
-¿Sorprendida de verme? – dijo el varón mientras oscilaba el sombrero a modo de saludo.
-No. Sabía que tarde o temprano aparecerías. ¿Para ayudarme o para terminar conmigo?
-Para ayudarte, por supuesto. Que mala imagen tienes de mí… es cierto que dejaste a la mitad el trabajo que te encargué, pero matarte sería malgastar tus innegables habilidades. Ya me contarás como te dejaste atrapar, preciosa.
-Eso no importa. Si has venido a sacarme, hazlo rápido. – dijo ella mientras se disponía a cruzar la puerta dimensional.
-Ah, ah, ah. Así no. Sería demasiado sencillo, y quiero asegurarme de que tus habilidades no se han oxidado. – dijo Jarlaxle mientras se colocaba tapando la puerta.
-Tus jueguecitos son dignos de tu imbecilidad.
-Yo también te quiero, preciosa. Toma, aquí están tus armas. No vuelvas a perderlas. Y esto también.

Jarlaxle le dio sus dos dagas curvadas, una bolsa mágica con sus cosas y un par de llaves.

-Una llave abre esta celda. La otra te servirá con varias puertas de la casa.

La mujer guardó las armas en las vainas a ambos lados de su cintura y se giró para introducir la llave en la cerradura de la puerta de barrotes.

-Si consigues escapar, te estaré esperando en los túneles al oeste de la ciudad. No me decepciones, preciosa. – dijo Jarlaxle mientras le daba una palmada en el trasero.

Ella se giró rápidamente para golpearle, pero ya había desaparecido por la puerta dimensional.
De repente vio abrirse la puerta del fondo del pasillo. Inmediatamente giró la llave en la cerradura y la guardó, pero no abrió la puerta. Luego se quedó apoyada en los barrotes, mirando al guarda que se acercaba.

-Veo que has decidido levantarte. ¿Te estás familiarizando con los barrotes?
-Mírame las caderas.
-¿Cómo? Si piensas que con eso vas a convencerme de que te…

El soldado vio las armas en sus fundas al bajar la mirada. Sorprendido, y antes de que pudiese reaccionar, ella abrió la puerta de un empujón, golpeando con los barrotes en la cara al soldado. Cuando éste recuperó el equilibrio, no vio a nadie delante. Un brazo le agarró por la espalda y una cuchilla apareció en su cuello.

-Lo prometido es deuda. Te dije que me matarais mientras podíais. – dijo mientras le cortaba la garganta.

Sin perder tiempo se dirigió hacia el final del pasillo. La puerta no estaba del todo cerrada, por lo que pudo echar una mirada dentro de la sala de guardia: un guerrero cerca de la puerta, un mago junto a una mesa en el centro de la sala y un ballestero cerca de las escaleras. No había posibilidad de pasar sigilosamente.
Sin pensarlo dos veces, dio un empujón a la puerta y entró en la sala. Los tres drows se giraron de inmediato al oir el sonido de la puerta. Sin perder un instante, la mujer lanzó una daga arrojadiza, que pasó rozando al primer soldado.

-Has fallado, zorra. Prepárate a morir. – dijo el guerrero.

La mujer se limitó a sacar sus dos kukris mientras sonreía burlonamente. En el centro de la sala, el mago se desplomaba con un cuchillo en su garganta, haciendo aspavientos como si tratase de pronunciar alguna palabra mágica.
El tercer drow cargó la ballesta, pero no tenía ángulo de disparo. La mujer luchaba con el otro guerrero de manera que el cuerpo de éste la cubriese del ballestero.
Mientras el tirador buscaba una posición fiable desde la que disparar a la mujer, ésta se medía con el guerrero.

Paró con facilidad varias estocadas, para a continuación desviar con su arma derecha el escudo del guerrero. Con la guardia abierta, lanzó su mano izquierda velozmente, pero el guerrero consiguió parar el golpe con su arma. La asesina esperaba ese movimiento, y de inmediato lanzó una patada que no pudo evitar el varón, que cayó derribado perdiendo su arma y escudo. Con un movimiento veloz, la mujer rodó para evitar el virote que llegaría de inmediato y cayó encima del indefenso guerrero, clavándole una de las hojas en el corazón.
Rápidamente se puso en pie mientras el tirador recargaba la ballesta. De un brinco se colocó encima de la mesa, con una finta asombrosa evitó el segundo virote y desde ahí se impulsó de un salto por encima del único drow que seguía en pie. Realizó a la perfección la pirueta y cayó a la espalda del drow. Antes incluso de que éste se girase, lanzó las dos manos un sendos cortes horizontales en sentido opuesto, degollando totalmente al desgraciado.
Luego se acercó al mago, que seguía debatiéndose en el suelo entre la vida y la muerte. Le arrancó la daga de la garganta, y la sangre comenzó a brotar con profusión. Guardó la daga y dejó ahí al mago mientras se desangraba hasta morir.

Subió las escaleras, llegando al piso principal de la casa. Sin demasiados problemas, consiguió usar las sombras a su favor para avanzar por las estancias de la casa sin que nadie la viese, abriendo algunas puertas con la segunda llave.
Llegó a la salida principal de la casa. Varios soldados y una sacerdotisa patrullaban el hall principal. Cuando estuvieron lo suficientemente juntos, la acechadora convocó un globo de oscuridad sobre ellos y se dirigió a toda prisa hacia la puerta. Llevaba la llave en una mano.

En cuanto reaccionó la sacerdotisa, disipó el globo de oscuridad. Lo único que pudieron ver los soldados era la puerta abierta y nadie más en la sala. Salieron todos rápidamente seguidos por la sacerdotisa en persecución de la evadida. De detrás de una columna surgió una figura, que se apresuró a salir también por la puerta con cautela. Tras ver que los soldados rastreaban el recinto exterior de la casa, salió sin dificultad de la edificación y se dirigió hacia la verja más cercana. Trepó a toda velocidad grácilmente y se perdió en las sombras de la ciudad, de camino hacia los túneles occidentales, donde Jarlaxle estaría esperándola…[/i:31091c87e3]

(Esto es el roleo de la huida de Leyla de la casa Faen)

REO-Lancelius

05/07/2005 15:34:36

// Muy buena huida, sí señor, propia de Leyla,xD

Laertes

06/07/2005 00:10:43

Fabuloso relato chicos *aplaude*//

REO-Gallinuko

06/07/2005 09:41:49

Mu weno ;P//

Statico

06/07/2005 11:09:49

//hmmm.... k raro.. solo veo opinar a drows... por algo sera XD
//bueno pos yo tb me sumo me weno :P

REO-Auron

06/07/2005 13:41:23

// Bueno... será porque algunos de ellos son los únicos que conocen a la protagonista...
Al resto les da un poco igual como los drows nos matamos unos a otros :lol: .

NoRVex

06/07/2005 22:28:00

//Buena historia y buen escape, lástima que ningún DM se animara a dar castigo a Leyla en lugar de ayudar a su escapada...

Muy bien roleado

NoRVex, guardia faen

REO-Lancelius

06/07/2005 22:47:13

//Digo yo que no habrá sido por falta de tiempo. Además, según tengo entendido, ningún DM ha ayudado al escape, que todo lo ha escrito Auron tras muchas semanas de esperar sin usar a Leyla. Azlinraeh símplemente ha dado el visto bueno y lo ha roleado. Supongo que si algún Faen hubiera querido rolear y tuviera un roleo bueno, pues se hubiera hecho (si se ha intentado hacer lo desconozco, es una opinión).

Un saludete.

NoRVex

06/07/2005 23:47:55

//Si se intentó hacer, pero en el tiempo en que Leyla fue capturada no habia DM's disponibles para ello, fuera porque no estaban muy metidos en el tema drow o por falta de tiempo (creo que últimamente han aumentado los DM's pero en ese tiempo eran 4 los que había)... eso unido a que la casa faen practicamente desapareció de golpe incluso antes del "cataclismo" pues... resultó que NoRVex era practicamente el único noble faen que andaba por allí y no he tenido tiempo para jugar desde hace meses ...

Felicito a Auron por su historia y le doy las gracias por haber esperado tanto tiempo a escapar... ha tenido ke ser un coñazo estar esperando tanto a ver ke pasaba...

1Saludo!