ArkasLynvail

10/05/2010 19:13:12

[color=darkred:c67df6d6c4][size=22:c67df6d6c4]I. La Señal[/size:c67df6d6c4][/color:c67df6d6c4]



El goteo de la estalacmita daba incesantemente sobre su piel, una y otra vez, con un ritmo perfecto.
El ser que yacía tumbado sobre la fría piedra no parecía molestarle el contínuo goteo, se mantuvo en esa posición como había estado en ella largos años, siglos descansando, con una posición inmutable que solo se rompía cada mucho tiempo para llevar a su boca algo de comer o en repentino ataque de destrucción que acababan sufriendo las criaturas que lo rodeaban.
La criatura hizo crugir los dientes y escupió un trozo de fémur descompuesto. No dedicó ningún segundo a observar los restos humanos que había escupido y que llevaban molestandole algunos meses, recordaba a aquel paladín que se había atrevido a retarlo, y más aún recordaba su sabor.

Se hizo la noche y entre el manto de toneladas de roca que cubría la criatura se filtró una ténue luz que golpeó al dragón y rebotó contra un estraño pedestal. Como un resorte el ojo del ser se abrió automáticamente. Un enorme ojo de color esmeralda con una línea que lo cortaba verticalmente por la mitad, el ojo de un dragón.
Las alas se desplegaron y se levantó pesadamente ayudado de sus portentosos músculos y garras y observó incrédulo como la luz transpasaba un resquicio de las rocas y golpeaba a un pedestal, colocado en una posición estratégica, justo para ese mismo instante.

La risa del dragón hizo retumbar las catacumbas, había llegado el momento que tanto ansiaba. Se giró sobre si mismo y en su paso derribó el pedestal con su larga cola, haciendolo añicos.
Murmuró una palabra mágica y la pared desapareció dando espacio a un enorme salón repleto de joyas, oro y objetos mágicos de gran poder.
El dragón observó con orgullo el tesoro que había recolectado durante miles de años, uno de los más grandes de todo Faerûn, lo miró con cierta tristeza y en ese mismo instante empezó a devorar todo lo que esa sala contenía. Joyas dignas de un rey, miles de monedas de oro, poderosos objetos mágicos, nada escapaba al apetito del dragón, algunos eran incinerados antes de ser devorados pero todo acabó en el estómago de la criatura.
El trago había sido amargo para el dragón, pero necesario. Dió un último vistazo a la gruta que había sido su hogar durante sus últimos años y desapareció sin más.

Había llegado su hora.

gatovengador

10/05/2010 23:32:50

La monje se sacudió la arena y el polvo acumulado durante su carrera desde Calimport mientras atravesaba el pequeño Ducado de Berrion. Con paso firme se dirigió directamente al castillo que lo dominaba. La última vez que había estado allí Earar aun estaba vivo, y ahora no sabía quién gobernaba el lugar tras la muerte de Earar y la desaparición del Duque, pero fuese quién fuese debía prepararse, pues no portaba noticias que pudiesen ser ignoradas.

ArkasLynvail

11/05/2010 09:02:24

[i:ae0570ae2d]Los rumores se corren como la pólvora en el reino de Tezhyr y en todo Amn, rumores que hablan de la muerte de la Gran Llama Voladora; Balagos la Gran Sierpe Roja.
Algunos ya hablan de proclamar fiesta nacional en ambos paises de confirmar el rumor, pero la aparición de dos grandes dragones en las montañas de Estriral hace que pocos se atrevan a desmentir lo dicho.[/i:ae0570ae2d]

gatovengador

15/05/2010 20:01:12

Berrion, Arion y Weldazh habían sido avisados y estaban tomando medidas. Zanjando esa tarea la monje se encamino hacia las montañas, había cosas que era mejor ver en persona.

coki1306

16/05/2010 01:46:57

Era un día como otro cualquiera, tranquilo como ningún otro. Terminé de realizar mis últimas plegarias a Corellon, tras lo cual esuché una voz en común.
[i:97d9839418]
(¿Será la voz que oigo la de Dylan?… sí, tiene que ser él…)[/i:97d9839418]

Como sospechaba, bajo la cuesta que custodian los guardias élficos estaba Dylan, curiosamente hablando con Alure , la cual aun no sabe hablar el comun correctamente. Iban a encaminarse al sur, por lo que les seguí… Dylan creía que ibamos de caza mientras que la elfa pensaba que ibamos a ayudarla a encontrar a una loba que andaba buscando. Tras entender el malentendido y explicarles a cada uno lo ocurrido, seguimos con lo que se había convertido en un paseo…

Nos encontrabamos en el camino que sirve de unión entre mir y el camino de comercio cuando encontramos a un hombre vestido completamente oscuro, que vestía una armadura pesada, era irreconocible dado que llevaba un yelmo. Poco duró la intriga causada por el hombre, dado que avistamos a unos quinientos metros un enorme ser volando hacia nosotros..Nada más verlo creímos que lo más conveniente sería escapar… sin embargo el hombre seguía tranquilo su camino…

Se trataba de un dragón azul, el más grande que Celdur pudiera haber visto en su vida de viajero. El dragón estaba a unos cuantos metros y ya había perdido de vista a Dylan y Alure, sin embargo seguía con la vista al misterioso hombre. Tras intentar llamar la atención del dragón para evitar que siguiese al caballero de ropas oscuras y ver el peligro, escapé hacia el bosque. Tras informar a la guardia sobre la posición del dragón y sus dimensiones volví al mismo lugar, había que comprobar si el dragón había seguido al caballero y si se lo había comido.

Volví al mismo lugar, adentrándome por el camino por el que fue el caballero, camino que dirigía al bosque de mir encontré un rastro de árboles derribados…

(Será mejor ir con cuidado) - Pensaba Celdur antes de conjurar santuario mayor.

Tras seguir el rastro vi al dragón, había destrozado a unos cuantos gigantes sin dificultad alguna… al parecer había perdido ya de vista al caballero. Sin embargo no tardó en avistarme y perseguirme durante varios minutos, en los que tuve que correr tanto como pude. Ya arrinconado y exhausto oía al inmenso dragón hablar en comun:
[i:97d9839418]
Muere elfo![/i:97d9839418]

Milagrosamente pude escapar teleportándome. El dragón se había quedado en mir, camino transitado por múltiples habitantes de Calimport, Weldazh y otras ciudades lejanas. En Weldazh ya tenían noticias, sin embargo en Calimport no se sabía nada, y sus ciudadanos podrían ir al bosque y acabar en el estómago del dragón con facilidad…

(Será mejor avisar en el sur… un tema tan urgente no puede esperar) - pensaba mientras me dirigía a Calimport a paso ligero



Tras unas horas de viaje llegue a Calimport. No tuve que entrar siquiera en la ciudad para encontrar a Isabela y Rodrik, quienes se encargarían de informar sin duda alguna a todo Calimport sobre el peligro.
[i:97d9839418]
¿Un dragón en el bosque de Mir? Se trata de un tema delicado, habrá que prepararse para viajar. [/i:97d9839418]- Decía Isabella con cierta seriedad

Si, será mejor que me cambie - dijo Rodrik

Kerk y Tabris que también estaban por el desierto optaron por acompañarnos. Por lo que los cinco iniciamos un viaje hacia el bosque de mir. Les llevé sin problema hasta el lugar donde me arrinconó el dragón, el rastro que éste había dejado, era enorme… El rastro nos guiaba a un puente, el cual había sido destrozado. Había que cruzar, para lo cual Tabris se transformó en un dragón rojo mediante un conjuro. Gracias a él pudimos atravesar el puente y seguir buscando al dragón… No hubo que esforzarse mucho, dado que al ver al dragón rojo, acabó viniendo con cierta rapidez. Al ver que Tabris volvía a su forma original paró y nos empezó a mirar.


Isabella trató de tranquilizar al dragón el cual argumentaba haber salido de su descanso para cazar.
Tras ver su nivel de hostilidad, y sus faltas de ganas de negociar se empezó a planear la salida. Todos alli podíamos teleportarnos salvo Rodrik…

No tengo ni un solo pergamino de teletransporte - se lamentaba Rodrik

Tras oir las palabras de Rodrik, se nos acercó.

Mi nombre es Altagos… veo mucho objeto mágico entre vosotros, dádmelos o preparaos para morir.

Al acercarse a nosotros empezó el combate. Los arcanos hicieron sus mayores esfuerzos mientras Rodrik daba todos los golpes que podía con toda la fuerza que disponía. Celdur se limitaba a curar heridas y convocar elementales que lucharan, sin duda alguna no estaba preparado como para soportar las sacudidas de un dragón de esas dimensiones y el terreno no permitía buscar la espalda del dragón. Gracias al poder de Rodrik e Isabella el dragón huyo herido, nosotros no estabamos mucho mejor que él, por lo que había que salir del lugar.

El puente había sido destrozado, mediante un hechizo Rodrik se convirtió en una araña… consiguió realizar un puente improvisado… Isabela y Rodrik consiguieron pasar, aunque Kerk casi se mata, resbaló y estuvo a punto de caer por el barranco, estuvo un buen rato colgado bocabajo hasta que Rodrik consiguió sacarle como pudo. Tabris pasó sin dificultades y yo pasé como pude a paso lento y con muchos nervios.

Al lado seguro del camino estaba el hombre de armadura y yelmo oscuros.

(Entonces sigue vivo)

Apenas dijo unas palabras (cuya voz me pareció familiar) y de repente se teleportó al otro lado del puente y desapareció entre las sombras.

Asi terminaba el día en el que conocimos a Altagos

Cormarion

16/05/2010 06:44:00

[i:823ca2658f]Unos elfos de la arboleda habían descubierto ogros muertos en las laderas de las Estriral, atrás habían dejado una granja en llamas pasto ahora de los saqueadores que tuvieron que ser expulsados.

Los campos ardían y poco se podía hacer por ellos. Intentaron contener al menos los fuegos para que no se propagasen a las casas aunque tuvieron que clamar al cielo para que cayera grandes piedras de nieve.

Predecir el clima siempre había interesado al druida así como los cambios de las estaciones, las épocas de lluvias y el buen tiempo para la siembra. Ahora deseaba poder hacer que lloviera en aquella región pero sólo era capaz de clamar al relámpago.

[días después]


Manwe había salido de la arboleda junto con los nuevos miembros de la familia del bosque. Su destino era la espesura del antiguo bosque de Mir. Iría a enseñarles las maravillas que Madre había producido en ese bosque pero secretamente el joven druida quería ver el refugio que Ëdêlgär había construido para Aredhel allí. Quizás podría llevar a Suzette allí y vivir en armonía con el bosque, rodeado de las plantas y de los animales.

Durante su excursión el grupo descubrió grandes pisadas que entraban al bosque de Mir. La alegre elfa les contó que una jornada antes había visto una "lagartijotota" enorme azul como de cincuenta metros.

Eldeth, Alith y Celdur se los encontraron mientras acampaban. Habían sido atacados por ogros y gigantes así que debían mantenerse alerta. Ellos también seguían las huellas del dragón azul. Se internaban en las profundidades del bosque hasta... un puente que estaba medio calcinado.

El puente cruzaba sobre un enorme abismo en el que podría ocultarse esa bestia. O eso o echó a volar, por que allí desaparecían las huellas. [/i:823ca2658f]

gatovengador

18/05/2010 23:10:27

- Creceré y te mataré, a ti y a todos los que amas.

Y con esas ultimas palabras el sangrante dragón elevó vuelo y desapareció por una de las aperturás del techo de la enorme cueva, seguido por la mirada de la monje. Muy a su pesar lo dejo ir, ignorando sus amenazas, su palabra no sería rota, y tenía lo que quería.

Lilian se preparó para salir a la carrera de la cueva. La expedición no había resultado tan limpia como había querido, pensaba mientras comproba el deplorable estado de su tunica, abrasada por ácido y fuego. Al menos tenía la información que quería.

Salió a toda velocidad, pasando entre los sorprendidos dragones a tal velocidad que no pudieron ni reaccionar, dejando tras de si a dos sierpes muertas y la estatua de Balagos, profanada y destruida mediante garras enormes.

La Llama Voladora estaba muerta o no se habrían atrevido a hacer eso a su estatua. ahora debía de ir a informar a sus multiples aliados de su descubrimiento.

ArkasLynvail

18/05/2010 23:59:01

[color=darkblue:d67b10ea24][size=22:d67b10ea24]II. Los Cazadragones[/size:d67b10ea24][/color:d67b10ea24]



- Pequeña criatura, solo ser pequeño bocado para Urkalam - Dijo el ogro acercando su fétido aliento a la cara del niño asustado.

El ogro le golpeó con el dorso de la mano y lo mandó por los aires hasta chocar contra un árbol, hizo un gesto a los ogros más pequeños que estaban junto a él y desenvainó la espada.
Había decidido matar al niño, ya habían comido suficiente por hoy. Los padres del pequeño humano habían sido alimento suficiente por hoy, aunque eso no quitaba que pudiera divertirse un rato.

- Ahora no oir sus gritos.

Urkalam gruñó y se acercó al niño, cogiendo su barbilla con dos de sus enormes dedos, lo sacudió para que despertara.

- No despertar, matar, ser aburrido si no gritar. - Dijo mientras se giraba, para buscar el asentimiento del resto de ogros.

Pero no recibió sonrisas de los otros ogros, uno de ellos tenía el rostro contraido en una mueca de dolor, se llevó lentamente la mano a la garganta, en un agónico y lento movimiento con el fin de tapar la hemorragia que le salía de su herida.
El ogro miró hacia todos los lados asustado y vió pasar un virote volando justo delante de sus ojos, se giró y encontró el proyectil clavado en la frente del gigante.

- ¡Nos atacan! - Gritó alertando al resto de gigantes y alzando su mandoble.

De entre los arbustos y matorrales salieron hombres armados, y empezaron a masacrar a los grupos de ogros, con una velocidad vertiginosa.
Pero Urkalam no solo era grande, también era ágil y diestro con la espada, no en vano era el líder de su tribu. Logró derribar al humano con el que se enfrentaba, sorprendiendolo con un golpe de su pierna en la boca del estómago. Se dispuso a matar al hombre indefenso cuando una voz a su espalda lo distrajo.

- Es muy cobarde atacar a un niño indefenso. - Dijo una voz humana, sorprendentemente grave.

Urklam chilló como respuesta e hizo un barrido horizontal a la vez que se giraba, con la intencíón de cortar la cabeza del hombre.
Pero no sintió el choque de los huesos de su cuello, notó como algo agarraba con firmeza su espada, observó atónito y furioso entonces a su adversario.
Éste tenía cogida la espada con dos dedos, sosteniendola con la palma abierta, mientras con la otra mano fumaba tranquilamente de un largo puro y le miraba sonriente. Era un hombre corpulento aunque no de demasiada altura, con bigote y barba de color cano, uno de sus ojos estaba tapado por un oscuro parche.

- Y tampoco es educado atacar cuando estoy hablando - Continuó y tiró el puro al suelo, mientras aún sostenía la espada con la otra mano.
Pisó el puro, apagándolo y desenvainó su espada en un movimiento fugaz.

El ogro sintió como si el mundo se moviera, el cielo se movía lentamente dando paso al suelo que antes pisaba, observó sus piernas volar delante de él y finalmente, vió como el hombre se encendía otro puro y envainaba su espada mirandole. Aunque ahora tenía un ángulo extraño, todo parecía estar girado en un ángulo extraño, pero tampoco pudo pensar demasiado sobre ello.
Parpadeó y murió.

- Parece que ese era el último - Dijo un joven observando al ogro partido por la mitad, se quitó el yelmo y sacudió su melena.
- Manda a los batidores para peinar toda la zona y librarla de otros indeseables. - Masculló y escupió un trozo de tabaco sobre el fallecido ogro, tras ésto recordó al joven y se giró.

Éste temblaba visiblemente, agazapado junto al tronco del árbol.

Está bien, yo soy Vierkaraag, el capitán de las Espadas de Fuego. Y ya que te he salvado la vida ésta ahora me pertenece.

Rió de buena gana y lo ayudó a incorporarse, el niño pudo observar como el grupo montaba un campamento a una velocidad vertiginosa, armas de asedio, balistas, puestos de vigilancia y alargados punzones.
Observó de nuevo al capitán con los ojos llorosos y éste le miró para sonreir ampliamente y contestarle una única frase antes de mandarle junto a una de las pocas mujeres del lugar:

- Matamos dragones, ¿sabías?

sharkang

19/05/2010 16:52:18

Los rumores del descenso de numerosos dragones desde las cimas heladas a las montañas Estriral habia llegado a oidos del Clan Arhum.

Rugrim Barbahierro, Gror Martillador y Krok Fendetestas discutian que hacer tras oir las palabras de aviso de Lilian Loto Negro, la monje del Puño Cegador.
Tres elfos se encontraban tambien alli, para disgusto de Krok.

Los enanos decidieron ir a echar un vistazo. Los elfos los acompañaron a pesar de los gruñidos de disgusto del orgulloso Krok.

Al llegar a la estribacion de las montañas vieron varios cadaveres de Ogros. Los dragones no debian andar lejos.
El joven enano se preparo para el combate.
- No me separare de mi maestro, si he de morir que sea con el hacha en la mano y de forma epica, para gloria de mi pueblo - Penso krok, aferrando su mediocre hacha de batalla, mientras pensaba si el filo seria capaz de atravesar las duras escamas.

Primero un dragon, luego otro y otro mas. Los enanos avanzaban como un muro incontenible, arrollando a los dragones, guiados por el petreo Rugrim.

- Esos mascaflores y pelafrutas de elfos siempre en la retaguardia con sus lucecitas y sus agujas inutiles - penso Krok lleno de ira, mirandose las heridas.
- Sigamos a pecho descubierto - dijo Gror
- O mejor a barriga descubierta - respondio Krok - Si esas lagartijas quieren ver de que somos capaces que bajen.
- No avanzaremos mas - resolvio Rugrim - No sin saber que nos espera mas adelante.
- Esta bien - respondio Krok a regañadientes - ya les hemos dado un buen aviso.

El grupo volvio sobre sus pasos. Al llegar al camino del comercio, la luna se oscurecio. Un descomunal dragon eclipso el cielo, dando vueltas en circulo y rugiendo, preparandose para el ataque.

- Es azul - dijo un elfo
- Pues si baja lo volveremos morado a golpes en el hocico - respondio Krok en un rugido.

Poco imaginaba el aguerrido enano de la potencia del adversario.

El dragon descendio en picado, lanzando fuego y rayos. Un elfo cayo. El grupo se disperso tratando de evitar el fuego.
El gigante alado se poso cerca del grupo. Altagos dijo llamarse. Poso su garra sobre el elfo caido, mientras los enanos se situaban en formacion. Rugrim en el centro, Gror a su derecha, Krok a su izquierda.

Sin necesidad de hablarse se lanzaron contra la mole coriacea en formacion de flecha, cuya punta era el afamado Rugrim.
Mientras el experimentado enano aguantaba los envites de la bestia los guardias del Clan Arhum le golpeaban en los costados.

Krok sonreia con los ojos inyectados en sangre del esfuerzo cada vez que su pequeña hacha levantaba las escamas de Altagos.

La batalla parecio durar una eternidad, pero gracias a Rugrim y sus musculosas piernas inamovibles, el dragon emprendio la huida.

Aquello habia sido toda una leccion de lo que era un enano defensor, una autentica muralla capaz de contener a aquella criatura veinte veces mayor.

- Algun dia - penso Krok - algun dia sere como el, y mi maestro estara orgulloso de mi.

La mirada de Krok se poso en su maestro Rugrim, viendo en el a los heroes enanos del pasado de los que habia oido hablar en las tabernas que frecuentaba a menudo.

Pensar en tabernas le abrio su voraz sed y se encamino hacia la mina.
- Una cerveza bien fria, mejor un barril entero, eso es lo que necesita el guerrero despues de la batalla - con esta reflexion Krok colgo su hacha del cinturon, oculto por su barriga cervecera.

ArkasLynvail

20/05/2010 11:11:45

[size=20:2f49346504][color=violet:2f49346504]III. El Oculto[/color:2f49346504][/size:2f49346504]

[i:2f49346504]
Bajo las siempre peligrosas arenas del desierto, en unas catacumbas que representaban la historia viviente de la creación y muerte de un imperio, ajeno al tumulto que sacudía al exterior, se encontraba aquella figura solitaria. Una sombra viviente que recorría las galerías y pasadizos que formaban la antigua Memmonar.
Su existencia solo era conocida por unos pocos seres y así seguiría, él, normalmente enfrascado en la investigación ahora se encontraba sumergido en las imágenes que lo ofrecían su bola de cristal, observando el quehacer de los mortales.
No era la añoranza de sus antiguos deseos mortales los que guiaban sus actos, había pasado hace mucho tiempo los límites humanos y estaba por encima de aquellas simples veleidades.
Las cuencas que una vez formaron sus ojos se fijaban ahora en hechos más concretos:

- Una mujer fuerte, llena de ambición y poder.
- Un enorme y brillante portal.
- Uno de los muchos que habían caido bajo la espiral de su red, sirviendole sin saber por qué ni por quien.

La brillante bola de cristal, continuó girando y girando para su dueño, apoyada en el brazo del esquelético trono. Continuó así paciente, pausado, sabiendo que nunca se precipitaría pues su perspectiva del tiempo era tan larga que era practicamente un imposible deducir el fin final de sus acciones, aunque todas ellas tenían un nexo común, su único beneficio.

Y continuó largas horas, sin descansar pues no lo necesitaba. Solo se detuvo cuando uno de sus demacrados sirvientes le trajo un libro que hacía tiempo le había pedido.[/i:2f49346504]

Rugrim

22/05/2010 11:47:49

Laura se aburría y salió a dar un paseo, pero fue corto pues se encontró con el Paladín Penco haciendo cosas raras a Nork. Laura no entendía por que la hirió para luego sanarla.

De pronto un rugido aterrador se oyó en la lejanía y, en pocos sigundos, aterrizó un enorme dragón negro. A pesar de la rapidez, Laura pudo esconderse detras de unos árboles, pero para su desgracia, su caballo se encabrito y la tiró al suelo.

Cuando recobró la consciencia, el ataque del dragón continuaba. Lo único que veía la muchacha era gente correteando de un lado a otro y la cabeza del enorme dragon negro girando y buscandoles. De repente, el dragón olisqueó algo, se dio la vuelta y derribando árboles y piedras, alcanzó al caballo de Laura y lo devoró, no sin antes recibir una coz indolora.

Los soldados de Berrion llegaron, pero aquello fue una carnicería. Al cabo de pocos minutos ya habían caído 8 soldados y el resto estaba moribundo. Tras ver su destrucción anunció ser el asesino de Bálagos y que debía ser temido, Aroaxas, se llamó.



Se pudo salvar a dos soldados. A los otros 6 se les hizo un funeral y Laura se encargó en persona de avisar a las correspondientes familas.

Vampire_mina

22/05/2010 15:06:07



Dijo la mujer tras inspeccionar la cripta, el incendio que habian presenciado unos minutos antes confirmaba sus temores.

La busqueda debia seguir, cogio los pergaminos que le tendieron guardandolos con cuidado, quizas aqui halla una pista.


el dia siguiente lo paso entre libros.

VardaElementari

22/05/2010 15:57:08

Myllerne habia ido a Berrion a denuncuar un intento de robo hacia su persona en las cercanias de berrion y a pedir que juzgaran al culpable en esa ciudad ya que era la jurisdiccion mas proxima, sir Vincent habia accedido a realizar el juicio, a su salida de berrion se encontro con varios amigos y se quedaron charlando, estaban muy cerca de berrion y no esperaban que pasara nada, pero un dragon negro enorme bajaba volando en circulos vertiginosos a gran velocidad acordaron irse antes de que el dragon bajara y realizara un ataque, pero estaba una elfa de apariencia salvaje y que cambiaba de forma y a cada rugido del dragon la elfa de forma muy necia le rugia de vuelta, negandose a partir, si la dejaban sola y a su suerte el dragon seguramente la usaria como parte de su cena, no podian permitirlo, asi que se comenzaron a preparar lo mejor que pudieron para tratar de defender se y a la muy necia elfa/lobo, bajo un dragon que a pesar de todos sus esfuerzos y conjuros estaba como si nada, increiblemente penco no lo tocaba, myllerne y penco trataban de que todos se retiraran, pero pocos les hacian caso cuando comenzaron a haber caidos myllerne se llebava los cuerpos, al final solo nork, penco y myllerne quedaban en pie ante el embate, el dragon con cada ataque les destruia alguna armadura o escudo, era imposible derrotarlo penco caia y myllerne le levantaba, sanaba a los heridos, pero el dragon no les permitia retirarse y no habia alguien mas que les ayudara, si huian berrion estaria en grave peligro, myllerne continuo con su mision curadora pero al final el dragon se canso de ella y la ataco con todo, myllerne resistio lo mas que pudo pero al final estaba a punto de morir, rasgo el velo de la realidad para teleportarse pero el dragon muy rapido para ella asesto el golpe final antes de que el conjuro funcionara, le rompio la armadura y la asesino mientras cruzaba el portal desperto en arion, desnuda y adolorida, delante de ella un clerigo que no conocia y su maestra nyrnael, la cual la habia regresado de la muerte y la habia cubierto con una capa, se vistio rapidamente, se preapararno para regresar, temia por la vida de penco y de los demas, regresaron rapido solo para ver como habia el dragon auroxas realizado una masacre, trataron de regresar a los muertos a la vida, mas no lo lograron con todos, muchos de los caidos habian encontrado su final ante el terrible dragon, myllerne tuvo que aguantar las lagrimas no podia con la culpa de haberse tenido que retirar, hicieron una misa y consagraron lso cuerpos para que no pudieran ser usados como no muertos por algun nigromante de los que rondaban.....

aun quedaba mucho trabajo.....

filoscuro

27/05/2010 18:15:30

Era una noche tranquila, fui a la arena a tomar algo y me encontré con Rodrik, Isa, Abd, Dylan y un Recien llegado.
Estuvimos hablando de nuestras cosas mientras bebiamos tranquilamente una de esas botellas de vino de la bodega de Abd, entre risas contabamos algunas anecdotas, cuando de pronto Dylan se levantó de la mesa y se dirigio a la fuentecilla que hay en la arena cogiendose del estomago, Abd fue detrás él, no tardo en desmayarse por un dolor intenso.
Sabiamos que habia tomado tambien fruta, asi que miramos a ver si estaba en mal estado cuando de pronto, un dolor muy fuerte me sobrevino desde de el estomago, hasta la lengua.

Era un dolor muy intenso, no habia notado nunca un dolor tan fuerte, si Dylan tardó poco en caer desmayado, yo tarde aun menos.

Cuando abrí los ojos, estaba en el templo de Tyr, Isa estaba algo debíl pero bien, Rodrik me miraba preocupado y Abd llevaba a Dylan.
Escuche lo que decian, entendí que estaba con un tono de piel grisaceo y mis ojos estaban inyectados en sangre. Estrias azules cubrian en algunas zonas de mi cuerpo.

Me dejaron, en una de las habitaciones del Templo, al cuidado de los clerigos, mientras buscaban una cura.

El dolor es muy fuerte, me aferro a las sabanas con fuerza, llego incluso a partirme la uña del dedo anular de la mano izquierda.
Mirando a mi Izquierda veo a Dylan, su aspecto es horroroso, casi parece un muerto si no fuera por los gritos agonicos que junto a los mios, hacen que parezca más una cripta de un demiliche que un Templo.

Buscan unos ingredientes, espero ansiosa que llege el momento de mi cura, para poder vengarme de quien me esta haciendo sufrir así.
Un sacerdote me acerca un simbolo sagrado de Tyr y mi dolor se hace mas fuerte, me pego a la pared horrorizada por la locura de lo que siento en mí. Dolor, dolor.... Cada momento es un infierno, cada vez más intenso, no se cuando dejara de dolerme, me pregunto si la muerte es la unica salida, la muerte.
Si la muerte me sobreviniera, espero que sea pronto, prefiero la muerte a esto que estoy sufriendo.

http://img18.imageshack.us/img18/1065/aizhaevenena.jpg

KHEYNAN

27/05/2010 18:22:39

Era una tarde tranquila en Calim, cuando termine de vendre unos objetos en la tienda de Bunus, me encontre con Anneka. Hablando de nuestras cosas decidimos ir a la Arena a tomar algo, Ahzmel e Isa no tardaron en unirse a nosotros aunque Ahz no se quedo mucho tiempo...mientras hablabamos el vino y la fruta no faltaba en la mesa. Anneka se fue a continuar con sus investigaciones, Abd y Rodrik se unieron a la mesa , despues llego Aizha y por ultimo se unio un caballero de Berrion.

Sibila retiro las copas vacias y nos trajo otras con lo mismo que estabamos bebiendo, di un trago a mi copa..bajo quemando por mi garganta, un dolor intenso surgio en mi cuerpo desde el estomago, con mis sentidos aturdidos por el dolor intente levantarme y caminar, desplomandome en el suelo incosciente.

El murmullo de la gente hablando a mi alrrededor, pese a estar incosciente el dolor tan intenso no cesaba , notaba como parte de mi interior moria por momentos, un sudor frio recorria mi cuerpo, la vista se nublaba por la sangre, gritos de agonia salian de mi boca con una fuerza que sonaban a ultratumba.

Todos mis sentidos estaban aturdidos por el dolor, apenas era consciente de lo que me rodeaba, mi mente estaba bloqueada por el dolor tan intenso...con el tiempo pese a que no dejaba de gritar la voz ya no le acompañaba. Isa , Rodrik y Abd nos llevaron a Aizha y a mi al templo donde pasamos los dias esperando una cura.

Al dia siguiente Isa vino a visitarnos , aunque el dolor era insufrible por momentos, escuchaba lo que me decia y los animos para que no nos rindieramos...mi mente solo piensa en vivir para matar al que lo hizo, sus ojos inyectados en sangre rugian de rabia y dolor...una frase de Isa ronda su cabeza: Aguantad la cura esta cerca.

Mientras sus compañeros hacen lo imposible por hayar una cura, los gritos de ultratumba inundan los pasillos del templo dejando helados a los fieles y sacerdotes.

Arxaon

27/05/2010 19:03:01

Isabella le informó de lo ocurrido. Nunca había oído hablar de un veneno de esas características, pero almenos ya sabían los ingredientes que hacían falta para el antídoto. Cogerían bastantes muestras de cada uno para posibles afectados posteriores.

El primer ingrediente era común en pantanos. Sin demora, Isabella y Wilhelm se encaminaron hacia Mir mientras Unelor se quedaba en Calimport para enviar posibles refuerzos.
Las Marismas del Lagarto eran un lugar peligroso, y ambos lo sabían. Por ello la primera opción sería el diálogo.
Los primeros hombres lagarto que vieron, cerca de la entrada al pantano, atacaron a los dos intrusos. Wilhelm e Isabella acabaron con la mayoría, pero la maestra pudo paralizar a uno.
Tras bastante tiempo de negociación, el reptil aceptó el cambio: una ballesta de gran calidad por un ramo de esas flores.
Al salir del pantano encontraron a Unelor con otro hombre. Si el diálogo no hubiese funcionado, habrían sido de gran ayuda.

El segundo ingrediente era un hongo de la infraoscuridad. Esto preocupó al monje. No había lugar que considerara más peligroso.
Por suerte, Azhmel conocía una cala donde, por una suma importante de dinero, los llevarían a Puerto Calavera. El no tener que pasear por los túneles tranquilizó un poco a Wilhelm.
Isabella se encargó de la negociación, mientras todos los demás (esta vez eran un gran grupo) observaban y vigilaban.
Tras hablar con una humana que fue de gran ayuda, acabaron negociando con un drow del mercado. Él podría conseguir esos hongos, pero saldrían caros, sobretodo por las prisas. El drow pidió dos esclavos a cambio de los hongos, y los demás parecía que iban a aceptar. Wilhelm no podía permitir arruinar unas vidas para salvar otras, así que se adelantó y ofreció algunos artilugios mágicos al drow, que acabó aceptando.
En la mirada y sonrisa del drow podía verse que había ganado con el negocio, pero al monje no le importaba. Ya tenían el segundo ingrediente.

ArkasLynvail

30/05/2010 18:28:03

[color=darkblue:b6301b7bf8][size=20:b6301b7bf8]V. Una simple copa de vino[/size:b6301b7bf8][/color:b6301b7bf8]

[i:b6301b7bf8]
La silueta embozada con una larga túnica azabache cruzó las estrechas callejuelas sin ser vista ni oida por ninguno de las muchas personas que las abarrotaban. Eran altas horas de la noche pero aún así se podría decir que las calles estaban bastante vivas, algunos fuegos salpicaban la oscuridad de los callejones, dando calor y cobijo a la multitud que no tenía la suerte de poder dormir bajo un techo.

La silueta flotante no dedicó ningún segundo a observar a los desdichados que pisaban el suelo, no merecían su tiempo. Voló a ras de suelo a una gran velocidad esquivando a la gente, pasando a su lado sin que éstos se percataran de su presencia, todo hasta llegar a uno de los cientos de almacenes que poblaban los muelles de Calimport.
Tan común era que a la silueta embozada le costó unos instantes dar con el almacén exacto, pese que había estado apenas unos días antes allí mismo. Sin embargo, pronto reconoció al guardia de la puerta, ese joven de mente simple y aspecto aún más simple. Éste como era lógico no percibió nada extraño aquella noche, con un conjuro emanado de sus finos labios el cerrojo de la ventana se abrió con sencillez y ésta con él, como si lo hubiera provocado una fina brisa.

Había entrado con tan facilidad en aquel lugar, de manera tan imperceptible para sus pobres guardianes que masculló un improperio porque fuera ella y no otros quienes hubieran hecho aquel acto, algo normal teniendo en cuenta la multitud de sirvientes que poseía.
Se dirigió entonces a una caja exacta y abrió su contenido, numerosas botellas de un vino común y no muy valioso en la región. Sacó un frasco de uno de los pliegues de su túnica y fue echando varias gotas en cada botella hasta que terminó con todas y la cerró dejándola tal y como estaba cuando había llegado.

Concluida su tarea se teleportó dejando allí únicamente su veneno como muda prueba de su estancia.[/i:b6301b7bf8]

MasojHunett

30/05/2010 22:15:04

[i:eabf37874a]El callejón estaba abarrotado de mujeres que miraban a Abd como si no fuera la primera vez que lo veían por ahí.
Las prostitutas sonreían y se acercaban al arcano calishita con el fin de sonsacarle algo más de oro con aquellas falsas sonrisas y aquellos pechos prominentes

Sabía que encontraría a la persona que buscaba en aquel callejón.El callejón de las damas no solo era un lugar donde pasar un buen rato,era también el lugar idóneo para cerrar todo tipo de tratos con gente de todo tipo.

El viejo Gaffar salió de detrás del biombo.Era un anciano,chepado de piel morena y arrugada, pelo canoso y desaliñado.
Salía lentamente subiéndose los pantalones.

[color=yellow:eabf37874a]-¡Hey Abd!.¿Cómo tú por aquí?.Sabes,hay una chica nueva...ha sido como...¿tu sabes de esas tormentas marinas?.
¡¡Un ciclón!![/color:eabf37874a]

El arcano calishita esbozo una corta y leve sonrisa dada la situación que le había llevado a recorrer una vez más esa calle mujeriega.
Abd comentó al anciano los motivos de su visita al callejón de las Damas,el vino que el le suministraba había sido envenenado.

Antes de encaminarse hacia el almacen,Abd de forma instintiva,depredador de mujeres sin igual y a pesar de la gravedad de la situación no pudo resistir la tentación de dar un vistazo a la mujer que había trás el biombo,el famoso "ciclón" del que hablaba Gaffar

[color=blue:eabf37874a](Joder con el abuelo...)[/color:eabf37874a]-Pensó Abd

Entraron al almacen donde Abd registro las cajas de vino que iban destinadas a otras posadas de la ciudad.Por algún motivo que escapaba a su entendimiento,solo la suya era la que estaba envenenada.
Un ciclón esperaba a Abd,pero está vez no se trataba de la misma mujer.
[/i:eabf37874a]

filoscuro

31/05/2010 15:49:07

//.

[quote:f2b742d51b="Jack_Botas"]Hacía días que esperaba junto a la puerta ojival de entrada a la ciudad. El agua se le había vuelto a agotar cuando el Sultán Rodrik volvió con la respuesta a la petición del Fénix. Las vestimentas del de Calim parecían las de alguien que había hecho un largo viaje.

-Veremos a vuestros ciudadanos hoy. Segidme.- dijo el Sultán con elegancia.

Leobald asintió y le siguió en silencio a través de la gran urbe de las arenas, donde la miseria de los callejones y el esplendor de los minaretes convivían bajo las luces del ocaso. Comenzaba a ponerse el sol inclemente del sur. Cruzaron varios barrios en silencio hasta llegar al de La Fe. Se detuvieron junto a uno de los templos y el Sultán le advirtió de que se se guardara de llamar los poderes de Ilmater junto a los convalecientes, pues podría causarles mal dado la naturaleza impía del veneno de que había sido víctimas. El caballero consintió y el Sultán le invitó a entrar.

Dentro un nutrido grupo de aventureros de Calim conversaban a media voz. Miradas torvas se clavaron en el paladín. El caballero saludó a los presentes con cortesía regia. Solo unos pocos contestaron. Dylan, Aiza y el maese Wilhem estaban allí también. Dylan estaba pálido y débil pero podía hablar, no así la mediana Aizha que había de usar una pizarra para comunicarse y tenía la cabeza casi completamente vendada. El caballero no pudo sino apiadarse de ella. Tras comprobar que Dylan y Aiza estaban allí por voluntad propia y que mejoraban favorablemente, convino con el Sultán en aguardar su restablecimiento en la puerta de la ciudad para escoltarlos de vuelta al norte. Leobald abandonó el templo.

Muchos de los aventureros habían salido momentos antes de la sala, ofendidos por la presencia del paladín y su charla con Dylan... la mayoría estaban aun afuera. Uno de ellos era el traidor Tabris. No pronunció palabra y el caballero apenas le dedicó una mirada de soslayo. O había venido aquí por eso. Lo que pasó después... las miradas poco amistosas dieron paso a reproches, en particular de la maga Isabella. Era de esperar. Ya había agradecido al Sultán en privado cuanto habían hecho por los cuidadnos de Arion y en este punto hizo lo mismo con Isabella, pero la maga hacia rato que estaba a la defensiva... Si mano tendida para dar con el culpable fue rechazada.

- ...Como queráis maga Isabella. Lamento que haya de ser así.- dijo el caballero con serenidad. Se despidió de Wilhem y les dejó para desandar lo andado hasta la puerta del oasis.



Contemplando el reflejo de la luna en el oasis el Caballero del Fénix daba vueltas a una pregunta: “¿Orgullo del sur o algo peor?”
Las oraciones al Quebrado le confortaron.[/quote:f2b742d51b]

filoscuro

31/05/2010 16:20:38

[i:543f246ac8]Pasaban los días, el veneno se instalaba cada vez más en Aizha, su piel cuarteada, su piel casi completamente gris, los ojos inyectados en el color carmesí de la sangre... y ahora sus colmillos, habian crecido un poco ¿el veneno la transformaria en vampiresa?. Se sabia que estaba siendo un cambio hacia la no muerte, pero no se esperaba que el final fuese en esa especie.

El dolor que sentia, cada vez era más fuerte, sus convulsiones casi la hacian saltar de la cama y casi caer de esta.
Solo la droga que se la administraba la dejaba calmada, pero no descansaba muy bien.

Una visita más, pero esa visita era por fín, una liberación del veneno. Rodrik, Isa, Abd, Azh y compañía se la llevaron a casa del primero. Allí le administarian el antidoto.

Con las convulsiones y movimientos violentos, Aizha era demasiado inquieta como para administrarselo, Azh trató de aguantar sus movimientos y casi se lleva un bocado, para intentando liberarse. Bulbaiff decidió ayudar para poder administrarle el antidoto sujetandole la boca y con su fuerza y los movimientos de Aizha, se le desencajó la mandíbula.

"Al penetrar el antídoto por su garganta, humo salia de esta, su temperatura subia considerablemente, estaba ardiendo, ardiendo por dentro... El dolor era bastante fuerte, se agarraba y retorcia como si la muerte mas dolorosa le sobreviniera. Una especie de almas o fantasmas salian de su cuerpo y se perdian en el techo.
De pronto cayó inscosciente.

Aizha tuvo una visión, se vió en una cripta similares a las Calimshitas, veia muchos no-muertos mirandola. Avanzaba por un pasadizo al final veia a dos siluetas mirandola, una mujer con una larga túnica negra y la capucha bien ceñida y a su derecha, un vampiro bastante apuesto vestido con un esmoquin oscuro. Ambos la miraban y sonreian."

Al cabo del tiempo, abrio los ojos, algo confusa pero en perfecto estado si no fuera por su mandibula, no podia hablar bien y el dolor era intenso. Pidió a Isa unos pergaminos y plumas para hablar, pero Isa le pidio a Tabris la pizarra que usaba él cuanod no podia hablar.
Escribio lo que vió y preguntó que le habia sucedido.

Por fín estaba recuperada. Y su aspecto volvia a ser el mismo.[/i:543f246ac8]

http://img139.imageshack.us/img139/5686/aizhabien.jpg

KHEYNAN

01/06/2010 22:55:11

Varios dias de dolor y agonia habian pasado ya desde que cayo envenenado en la Arena, el helido aliento de la no muerte lo abrazaba, el veneno estaba cumpliendo su mision.

La luz quemaba mis ojos, las drogas aturdian mis sentidos, el olor de la sangre era cada vez mas intenso, Isa, Azhmel, Ankor, Abd, Bulbaiff, Wilhelm y Rodrik nos trasladaron a la casa de este ultimo, alli nos darian el antidoto.

Un frio sudor bañaba mi rostro, el frio se apoderaba de mi cuerpo, no tardaron en trasladarnos , el dolor recorria mi cuerpo, comezo a moverse con gran violencia no era capaz de controlarlo, una mano me sujeto impidiendo que me moviera, de repente me vi andando por un antiguo cementerio Calinshita, rodeado de esqueletos, zombis y vampiros, y al fondo una enigmatica con un vestido negro y su rostro oculto bajo una capucha me sonreia, al lado de ella un vampiro elegantemente vestido , el tambien me sonreia.

Aprete los dientes con fuerza, pero pese a la rabia que sentia algo me atraia, las manos de Rodrik en su empeño por abrirme la boca me devolvieron a la realidad, cuando lo consiguio Isa me dio el antidoto.

Me quemaba, estaba ardiendo por dentro , el helido aliento de la no muerte luchaba en mi interior, abandonandome al poco tiempo, todo en mi volvia a ser como antes, perdi el conocimiento por el dolor que me produjo, quedando en mi mente grabada la mujer y el vampiro que me sonreian en el cementerio.

Cuando desperte todo estaba confuso, vi a los que me habian traido. El cansancio de estos dias sin dormir por el dolor regreso a mi cuerpo, Rodrik me dejo descansar en una de las habitaciones de su casa.

Varios dias despues desperte, casi recuperado pero aun debil por no haber comido en dias, el fuego de la venganza ardia en sus ojos.....Isa y Rodrik lo calmaron para que no actuara sin pensar , todo se aria pero con calma, primero debian buscar informacion asi lo hizo. Junto Aizha fue a la casa del estudio a buscar informacion sobre la cuarta edad.

filoscuro

01/06/2010 22:55:31

[i:5105d7417e]Pasaron varios dias desde que recuperó de aquel veneno que casi le cuesta su vida.
Estaba confusa, con rabia y ganas de venganza, pero como buena asesina, sabia que las prisas no son buenas.
Se sentó, repasó una y otra vez su visión. No queria perder un detalle de lo visto, ninguno, queria a los responsables de su dolor.

Queria planear bien su venganza.

Se dirigió a la casa del estudio junto con Dylan, querian buscar toda la información posible sobre la 4ª Edad de Calimport durante la Vihad y todo lo referente a Felin Sabán y Sholen Sabán.
Estuvo durante varios dias mirando libros y libros, buscando toda la información que podia, ya sabia algo de una investigación anterior, pero queria más, esta vez era por algo muy personal.
[/i:5105d7417e]

ArkasLynvail

07/06/2010 15:01:37

Recorren rumores por todo Tezhyr de que un grupo de mercenarios llamados "Sables de Fuego" han tomado el monte Zhargalla y derrotado al dragón Altagos y su progenie y que, además, se han instalado allí reclamando el derecho de conquista.

VardaElementari

07/06/2010 21:17:48

los paladines hablaban sobre varios temas incuidas las nuevas fronteras entre Tezhyr y Calimshan cuando los rumores de los viajeros que rondaban el camino del comercio les comentaban sobre unos rumores de que unos mercenarios o un grupo de aventureros (no quedaba muy claro) habian logrado conquistar el monte zaraghalla, se dirigian alli cuando un dragon negro les ataco, Nesharay le abatio sin demasiada dificultad, parecia que los rumores eran ciertos, se dirigieron con prisas al monte, quiza pudieran hablar con los aventureros, tras un camino dificultoso por lso gigantes que ya habian regresado a sus tierras vieron varios cadaveres en el camino, Leobald y myllerne trataban de revisar los cuerpos con al esperanza de poder regresar a la vida a los caidos, tras ver demasiados muertos sin oportunidad de regresarles a la vida los consagraban para que no pudieran ser usados sus cuerpos con fines nigromanticos, lograron regresar a algunos e increiblemente habian sido los cazadragones lso que lograron recuperar al monte zaraghalla, e incluso realizaron una tarea aun mayor, atraparon a Altagos, la sierpe azul, nyrnael se les unio atraida por lso mismos rumores que los otros paladines y lograron entablar una buena relacion con el lider de los cazadragones, y ademas hablaron con Altagos, Leobald estara estacionado en el campamento de los cazadragones junto con nesh mientras que myllerne serviria de enlace con lso demas paladines, habia aun mucho trabajo por realizar.....

Blues

13/06/2010 18:33:14

Tras una conversacion con Isabella,Paskinel decide acercarse al bosque mir,en el camino ve el campamento nuevo de los sables de fuego.Llega a mir y descubre el campamento que la gente de calimport a puesto en el bosque,alli encuentra de nuevo a Isabella y tras examinar el rastro del cuerpo de auroxas parte hacia el monte zaragalla.

Espera a que anochezca y sube al monte pasando entre el campamento de los sables de fuego.Ya en la cima se adentra en la cueva de los dragones,esperando encontrar alli a balagos.
Ningun dragon guardaba la entrada ya y en el interior del puente de lava aviste a un grueso de soldados y magos guardando las entradas a las cuevas.

Viendo que no podria entrar sin ser visto volvio a Mir

ArkasLynvail

18/06/2010 18:08:09

Por todas las tierras de la Intriga - Amn, Tezhyr y Calimshán - tras el calor de una chimenea en una vieja posada, entre los rincones más oscuros de los callejones, de boca en boca pero con cierto deje de temor se murmuran y susurran rumores sobre un ejército que se está preparando en las tierras del este, aunque cualquier dato sobre ello parece una gran incógnita pues nadie parece haber visto nada.

VardaElementari

20/06/2010 18:31:54

tras una investigacion en la cueva de balagos myllerne se dirigio con toda prisa a arion a girar ordenes, tras lo cual se encerro en la biblioteca de Arion a averiguar sobre los dibujos que habia obtenido y sobre maztica.

ArkasLynvail

27/06/2010 00:25:51

[i:e486a22919]En todo Faerûn un eclipse ha sobrecogido los corazones de sus habitantes. Durante unos breves minutos todos se pararon para observar el fenómeno astrológico que duró apenas unos minutos.
Después lo más hablado eran charlas sobre señales, el fin del mundo y de las implicaciones de éste extraño suceso.
También destaca que ha sido una de las noches más propicias en asesinatos de toda la Costa de la Espada.[/i:e486a22919]

Ash

27/06/2010 07:23:46

Esperando al pasado, siguiendo al futuro que le esperaba, pasaba las noches en su tienda, al calor, las llamas danzaban como cada noche,..
Los rugidos, aquella brisa mañanera, el sol, bañando su cobrizos cabellos, esperando una señal, una oportunidad, de devolber la paz a Faerun, a costa de atravesar las mas duras escamas que se han conocido, Tenia dos metas fijas, una, negra como la noche que acompaña el finalizar el dia,...
La otra, es Azul como el mismisimo cielo, que mira fijamente a todo lo que , en la misma tierra , brota con cada amencer.
Sin mas, desenfundo a su "perfora escamas", alertado por la presencia de unos orcos, a los que dio muerte no sin antes rogarles que abandonaran toda violencia,todo mal,,, pero como se sabe, el mal,, al igual que el bien, son temerosos de su ser.
Maztica, aquellas ruinas, cada dia le daban mas quebraderos de cabeza. al mirar las lagrimas de Selune, una vez mas y otra se preguntaba...
El fuego crepitaba una noche mas, las sombras amenazaban con llebarse toda esperanza, el cielo, una mañana ,mas, radiante , apagado , con cada atardecer.
Solo esperaba, el momento, un dia mas...
"si esta es tu gran prueba, la pasare, sin dudar ni un solo instante..."

ArkasLynvail

28/06/2010 13:24:56

[color=brown:2d9feee719][size=22:2d9feee719]VII. Un dragón muerto, un dragón vivo[/size:2d9feee719][/color:2d9feee719]



El grupo de caballeros llegó a la cita puntuales como el Lider de los Sables de Fuego esperaba en ellos.
Liderados por la caballera Myllerne Silverblade, Nesharay y Reb presentaron sus respetos ante el nuevo gobierno que se formaba y le advirtieron del interés y urgencia que representaba el encontrar a Balagos.
El grito de los exploradores rompió su conversación, habían logrado entrar en la cámara principal de la fortaleza.

¿están listos paladines? - Dijo mientras armaba su brazo con un enorme escudo pavés.
- Rezaremos por nuestros hechizos y entraremos con vos capitán - Dijo la paladina.
- Así sea, yo llevaré aun par de hombres conmigo, no entraremos todos por si el techo se derrumbara sobre nosotros.

El grupo asintió y entró en la cámara, el explorador de los sables alumbraba la zona con una antorcha, aunque los conjuros de luz de los caballeros del bien ya eran suficientes para alumbrar la lóbrega estancia.

- Hay un muro delante a unos treinta pies - Dijo el explorador más adelantado.
- Eso no es un muro... - Dijo Nesharay y sus ojos se abrieron de par en par, mientras todos desenvainaban sus armas mágicas.

La luz de las antorchas iluminó el inmenso cadaver del dragón rojo, la enorme sierpe yacía sobre el suelo con aspecto imponente, sin embargo algo raro pasaba.

- No se mueve - dijo Vierkaraag quien también había desenfundado - No respira si lo hiciera todo ésto retumbaría.
- Está muerto - Dijo otro de los caballeros.

La visión del dragón muerto no les quitó el enorme respeto que sentían por aquella criatura que en tanto les superaba, pero si permitió que se acercaran hasta tocar una de sus enormes escamas.

- Y no son muy recientes.

El capitán mandó sigilosamente a sus exploradores que revisaran la estancia en busca del tesoro, mientras los paladines debatían sobre las heridas de la gran sierpe.
[i:2d9feee719]
- Parece que por fin el mundo se ha librado del maldito Balagos, por Tyr. Aunque haya sido demasiado tarde [/i:2d9feee719]- Masculló Reb.
- Investigar sobre sus heridas, yo iré a echar un vistazo por si veo alguna pista - Dijo Myllerne.

Los caballeros anduvieron investigando sobre qué pudo haber matado a la sierpe, mientras Myllerne investigaba el área, parándose cuando dió con un extraño pedestal con símbolos antiguos.
Rápido la atención del grupo se hizo en el pedestal quienes lo investigaron durante largo rato, hasta que nada más sacaron de él, largo rato pasó y preguntas se hicieron pero cuando no hubo más Vierkaraag les acompañó hasta la salida.
[i:2d9feee719]
- Os mandaré lo que requerís como mi última muestra de voluntad, por la vida de mis hombres [/i:2d9feee719]- Dijo Vierkaraag - Apartir de aquí ya no os debo nada más.
- Así sea, estamos agradecidos por su colaboración capitán.

Los gritos de uno de los guardias les sacó nuevamente de la conversación, aunque éstos eran mucho más urgentes que los anteriores.

- ¿Qué pasa? - Dijo Vierkaraag mirando a su soldado.
- ¡Altagos!¡Ha escapado!¡Destrozó la pared y rompió de alguna manera la barrera! - dijo mientras jadeaba.
- ¡Maldición! - gritaron los paladines, quienes sentían que era la historia sin fin.
pero no pudimos alcanzarlo.
- ¡Al norte!Arion, maldición debemos marcharnos Vierkaraag.
[/i:2d9feee719]
Éste asintió y se despidió de ellos, quienes salieron de las montañas a toda prisa, o mágicamente.
Una vez el grupo salió, Vierkaraag sonrió ampliamente.

KHEYNAN

01/07/2010 15:46:04

Era una tarde tranquila en el campamento del bosque Mir, la guardia estaba transcurriendo con normalidad cuando un hombre surguio de la nada rodeado por una extraña aura. Vestia ropas calinshitas y joyas de incalculable valor , este miro al guardia y le pregunto:

- ¿Donde esta la mediana?

- Esta descansando.

Me acerque al hombre con cautela.

- ¿Quien eres ? ¿Quien la busca? Le pregunte.

- Debes impedir que encuentren la tuma. Se limito a contestar, su respuesta me sorprendio.

- ¿Que tumba?

- El tiempo se acaba....La tumba de...

El hombre se desvanecio tal como aparecio ante mi, dejando tras de si multitud de preguntas, me apresure a avisar a Isa que estaba durmiendo en una de las tiendas.

Volvi a mi puesto siempre alerta, aunque mil cosas rondaban mi cabeza , mil dudas sobre la presencia de ese hombre. Aizha se desperto y salio de su tienda acercanse al puesto de guardia mientras se desperezaba. Le conte lo ocurrido y mientras debatiamos a que se debia su presencia un aire gelido recorrio el campamento apagando el fuego que iluminaba el centro del campamento.

Un escalofrio recorrio mi columna cuando al girarme lo vi de nuevo cerca de la hogera, Aizha tambien lo vio , dando un vistazo rapido al campamento me di cuenta de que nadie se habia percatado de la presencia del hombre...

KHEYNAN

01/07/2010 15:57:12

Muchas fueron las preguntas, pocas las respuestas. Por alguna extraña razon solo Aizha y yo podiamos verlo , ni Abd con su conjuro de vision verdadera se percato de su presencia.

Cuando el hombre se desvanecio , Aizha y yo avisamos a Abd de lo ocurrido. Este quedo sorprendido, hablando sacamos en claro que todo esto debe de ser por el veneno que casi nos arrebata la vida aquel dia en la posada.

(De ser asi el tiempo es crucial, debiamos darnos prisa en dar con ella nunca olvidare el rostro de esa mujer en el cementerio)

Desde aquel dia , varias lunas pasaron buscando informacion en la casa de estudio...

KHEYNAN

01/07/2010 19:58:43

Los dias se juntaban con la noche en la casa de estudio, varios libros habia leido ya y apenas habia encontrado alguna pista.

- Necesito despejarme *mientras se desperezaba en la silla *

Llamo al sacerdote encargado de la casa...

- Porfavor no guardes mucho los libros volvere en un rato.

El sacerdote asintio mientras recogia los libros. Al salir se dirigio al Oasis a ver si se encontraba con alguien conocido, alli se encontro con Isa , mientras intentaba explicarle lo ocurrido la gente no paraba de llegar para hablar con ella.

- ( Siempre tan ocupada, luego dice que no la informo...sera mejor que le aga un informe y se lo envie..)

Al dia siguiente me dirigi al bosque donde todo empezo, apenas releve a un soldado de la guardia aparecio Abd y detras de el , volvio aparecer el hombre con un mensaje muy claro...

- No te fies de nadie ,todos buscan sus secretos...ayudame y te dire quien te enveneno.

Mil pensamientos inundaron mi mente...mientras escuchaba los consejos de Abd , su mente estaba en otro sitio.

-( porque yo? sera una trampa como asegura Rodrik? y de ser asi , que quiere de mi?)

Estas preguntas surgian en su cabeza una y otra vez.

-Si quiero averiguarlo sera mejor que siga imvestigando*dijo para si*

Despues de hablar con Abd se dirigio nuevamente a la casa de estudio a seguir investigando.....

KHEYNAN

03/07/2010 10:46:20

Varios dias pasaron en la casa de estudio buscando alguna pista sobre el paradero de la tumba. Solo obtuvo unas pequeñas notas de su esfuerzo

-( cada vez estamos mas cerca, ahora debo encontrar un mapa de la epoca...)Penso mentras recogia los libros.

Tras recogerlo todo se dirigio a la Academia de Guerra en busca de algun mapa.

-(el tiempo juega en nuestra contra y no veo ningun mapa que me sirva..)

Tras buscar solo encontro un mapa actual , que cogio resignado.

-( hayar el sitio en este mapa me va a llevar demasiado tiempo...sera mejor que me ponga cuanto antes...)

Varios dias han pasado y sigue estudiando el mapa...

ojos

03/07/2010 21:22:25

Después de la charla de Isabella, Deivid se dirigió a la biblioteca. Como encargado de la biblioteca y como caso excepcional, sacó de allí los tres libros de astronomía que necesitaba. Después fue a recopilar todos los datos sobre los movimientos recientes y no tan recientes de los astros tomados por los estudiantes de esta materia. Durante todo el día los estuvo repasando e investigando para determinar si el eclipse había sido consecuencia del normal movimiento de los astros o si había algo extraño o no habitual en estos movimientos. No solo se fijó en los movimientos del sol y la luna, pues en la parte de la profecía que le habían relatado, decía algo de una alineación planetaria. Así que también investigó estos movimientos e intentó calcular las predicciones de sus próximos movimientos.

Una vez terminada esta parte de la investigación, cogió el equipo de astronomía del aula de adivinación, con el permiso de la rectora, por supuesto, y fue al desierto. En la noche del desierto las estrellas son mucho mas fácilmente observables que desde la ciudad. Montaron un campamento, y mientras los demás vigilaban y se encargaban de las alimañas nocturnas del desierto, Deivid observaba las estrellas, anotaba sus movimientos y comprobaba si se iban correspondiendo con los calculados...

filoscuro

04/07/2010 23:59:32

Aizha salió de Calimport haria cuestion de casi una dekhana, se instaló en la zona del desierto a unas millas del bosque de Mir, estaba buscando lo que ella conocia por unos libros que habia visto hacia unos meses atras, queria encontrar las ruinas de la mayor ciudad de Shun, Monrativi Teshy Mir.

Despues de más de 5 dias en el desierto sin exito, volvio a Calim, llena de arena y con una idea clara. Encontraria la ciudad.

A su vuelta, Dylan le comentó lo que el habia descubierto en la bibilioteca y se dispuso a ayudarle.

ArkasLynvail

23/07/2010 17:43:16

[i:9afcd26225]Por todo Calimport están apareciendo portales unidos entre si, toda la gente habla sobre ellos apareciendo cientos de rumores.
Algunos hablan de que la época del trastorno de la magia vuelve a ocurrir en los reinos, otros dicen que es cosa de la furia de Memmon y Calim, unos últimos menos preocupados de los motivos cuentan rumores de algunos portales que han conducido a los salones de los Bajás de las cofradías y que quienes los han cruzado han muerto rápidamente por las trampas de éstos.
Algunos cuentan incluso, que algún mago que se teleportó dentro de los límites de la ciudad acabó parando en el palacio del Qysar saltandose todas sus protecciones mágicas, y que como es lógico a los pocos segundos fue ejecutado.

La guardia mientras tanto no ha confirmado ni desmentido estos rumores y por ahora ha prohibido terminantemente cruzar los portales.[/i:9afcd26225]

ArkasLynvail

23/07/2010 21:39:52

[color=darkblue:c1feb16397][size=21:c1feb16397]VIII. Las campanas de la batalla[/size:c1feb16397][/color:c1feb16397]


El cambio de turno en las almenas se sucedió en el instante que sonaron las campanas de la capilla del ducado, como había sido costumbre desde que Lord Vincent se hubiera instalado en el ducado de Berrion.
Era algo completamente practicado en el ducado y se realizaba casi a la perfección haciendo asi imposible una fisura en la vigilancia de las murallas del ducado. El proceso era simple, primero una fase de guardias se marchaban al castillo al menos la mitad del total de las almenas y era sustituido por el siguiente grupo. A los cinco minutos otro grupo sustituía a los que quedaban aún por cambiarse evitando lagunas.

El soldado Jert, situado en una de las dos almenas más altas del ducado oteó el horizonte por primera vez, algo que tendría que hacer durante las próxima ocho horas con apenas un descanso. Junto a él había al menos tres barriles de aceite y dos antorchas en caso de asedio al ducado, también disponía de una potente ballesta para los ataques a distancia que sabía manejar con la precisión de un veterano.
Tras hacer el saludo de rigor al camarada que patrullaba en la almena contigua observó con ceño fruncido como una gran nube negra se acercaba desde el mar hasta el ducado.

- ¡Se acerca una buena tormenta!
- Vaya, la primera tormenta del otoño y me la tengo que tragar yo - Masculló el guardia.
- No te quejes, ahi abajo tras los muros estás mucho más cobijado - Masculló Jert desde las alturas, algo que por supuesto nadie le escuchó.

Con su vista divisó la enorme nube negra que se acercaba hacia el ducado. Por supuesto Jert no era un especialista en meteorología pues de haberlo sabido se hubiera dado cuenta que las nubes estaban demasiado centradas y se acercaban demasiado rápido para ser un hecho natural.
Sintió el gélido tacto del viento soplar contra él y tuvo que agarrarse a la piedra de la atalaya para no caer. Entonces el cielo le deslumbró y de él surcó un enorme rayo que rasgo el aire hasta estrellarse contra el suelo quemando la hierba que había junto a varios huertos.
El corazón de Jert estuvo apunto de dar un vuelco cuando el rayo le precedió la enorme faz de un dragón azul, precedido por su serpeante cuerpo alado. Tal fue la sorpresa que los arqueros solo observaron su majestuoso vuelo boquiabiertos, el tiempo suficiente para verle ocultarse de nuevo en la enorme nube que eclipsaba el cielo de Berrion.

- ¡Dragón! ¡Dad la alarma, un dragón azul nos atacan! - Gritó Jert, y junto a él muchos más guardias.

Las campanas de la iglesia de Berrion resonaron de nuevo, ésta vez junto a las del castillo. Las antorchas de las atalayas se encendieron y todos los soldados que hacía escasos minutos habían bajado a descansar de su larga guardia subieron hasta situarse en la muralla.

- ¡Los cañones! ¡Disparad al dragón con ellos! - Gritó uno de los capitanes.
¡Además con esas nubes no vemos nada!
- ¡Avisad a Lord Vincent!¡Llevad a las mujeres y niños al templo! - Gritaban las órdenes de los sargentos a todos los guardias, que correteaban por la muralla.

Un terrible silencio se hizo durante unos minutos, mientras las órdenes se sucedían, mientras avisaban al duque, mientras los mayores mujeres y niños eran encerrados en el templo, mientras preparaban todo tipo de armas de proyectiles capaces de herir a la sierpe voladora.

Jert fijó su vista de nuevo en las nubes y observó las escamas azules serpentear entre ellas.

- Ahi está, ¡cuidado! - Llegó a chillar, pero un instante después un rayo surcó el cielo e impactó sobre una fila de soldados y armas a distancia, haciendo volar por todos los lados cientos de astillas y trozos humanos.

Jert, apuntó con la ballesta al dragón y disparó algo que hicieron también al menos diez soldados más desde todos los ángulos del ducado. Pero el dragón se enroscó con enorme agilidad y esquivó prácticamente todos los proyectiles y los dos que le impactaron rebotaron por el grueso de sus escamas.
Entonces el soldado se fijó que sobre los lomos del dragón había alguien ¡y cabalgandolo!, nunca había oido sobre un humano o una criatura similar que fuera capaz de sobrevolar a lomos de un dragón, excepto en las leyendas de los libros.
Pero ahora lo tenía delante de él, el dragón iba completamente preparado para servir de montura pues una enorme silla estaba atada a su espalda con unas cintas que rodeaban su abdomen. El caballero que estaba sobre sus lomos vestía una armadura del mismo color que el dragón y un yelmo con una forma extraña que terminaba en dos largos cuernos de marfil.

El dragón se sobrevoló los portones del ducado y el corazón de Jert se derritió cuando su sombrío ocupante fijó sus ojos en él. En un acto de enorme valentía osó alzar la ballesta y disparar sobre el humano que alzó su brazo izquierdo para cubrirse del impacto y logró que el virote rebotara hasta su pierna hiriendolo pero de levedad.

- Maldito necio, pagarás por esto - Dijo el oscuro, mientras arrancaba el virote de su pierna. Mientras tanto Jert colocaba a toda velocidad un segundo virote en la ballesta.
Tensó la cuerda y apuntó, sonrió al ver que el caballero no poseía ningún arma a distancia y que el dragón parecía ocupado lanzando rayos contra los guardias de la entrada.
Se preparó para descargar el gatillo pero entonces sintió sus dedos entumecidos, les gritó mentalmente que dispararan pero éstos no le obedecían, entonces levantó la vista hacia el caballero y lo observó con los dedos de la mano izquierda señalandole hacia él.
Empezó a encontrarse agotado y agarrotado, una voz le decía que no había necesidad de preocuparse que se quedara allí quieto y esperara que todo hubiera acabado que sus esfuerzos no merecían la pena.
Jert meditó sobre ello y su situación y mientras en algún recóndito lugar de su mente gritaba que algo raro pasaba sintió que debía bajar la ballesta y dejar de apuntar a aquel hombre y así lo hizo.
Observó lentamente como su ballesta se había caido sola de sus manos y golpeaba el suelo, entonces una afilada cuchilla salió del suelo y transpasó su gemelo cortandole varios tendones y haciendolo transtabillar, otra afilada cuchilla salió desde pocos centímetros de la anterior y se clavó en su muslo. Esta vez no pudo reprimir un grito de dolor, pero no fue el único porque del suelo que pisaba empezaron a salir más y más agujas cada vez más largas que desgarraban la piel de sus piernas, las caderas y finalmente el tronco.

El caballero bajó la mano en el momento en que el humano caía al suelo muerto y no desvió la mirada cuando las cuchillas aún seguían torturando la piel muerta del guardia.
Entonces un grito llamó la atención del caballero y éste pudo divisar como el duque Vincent corría por las murallas en su dirección, seguido de varios soldados asustados.

¡Fuera de mi ducado te digo!

El caballero cogió las riendas del dragón y tiró hacia arriba en un gesto que significaba que emprendiera el vuelo. Éste hizo rápidamente caso y se alzó sobre los guardias situandose justo en frente del duque de Bérrion.

- ¡Sufrid mi ira Berrion y de quienes se alian con los que osaron creer que nos habían atrapado! - Gritó el caballero mientras alzaba la espada, en señal de ataque.

El dragón no se demoró y abrió sus fauces para descargar un enorme relampago que hizo caer al suelo a varios soldados hasta estrellarse en el escudo del duque Vincent quien apretó los dientes y sonrió al ver que estaba ileso.

- Sois vosotros los que vais a sufrir la ira de Vincent matadragones - Sonrió el duque y alzó la espada encantada en dirección al dragón. Ésta empezó a emitir un fuerte brillo rojizo que se convirtió en un fulgor cegador que hizo recular al dragón. Entonces de la espada salió una enorme llamarada digna de un gran dragón rojo que quemó la cara y el cuerpo del dragón que empezó a patalear en el aire para apagar las llamas.
El rugido del dragón se escuchó en todo el ducado quien marchó aletaando como podía y dejando una cornisa de humo negro a su paso.

El cielo se despejó y Vincent esbozó una gran sonrisa victoriosa ante sus pasmados soldados quienes lo vitorearon por su enorme valentía y gran poder.
Los gritos de Vincent resonaron por el ducado, alentados por los guardias que habían sobrevivido al encuentro, pero entonces un guardia se acercó hasta su duque jadeando y con una mueca que distaba mucho de las de sus victoriosos acompañantes.

Debeis ir a verlo.

Vincent acompañó al guardia hasta los portones del templo que se abrieron de par en par, tanto como los ojos del duque al recibir la impactante noticia.


//Me hubiera gustado realizar esta escena en el servidor, pero me ha sido imposible coincidir con nadie en Berrion. Me gustaría que las personas que habitan en Berrion u ostentan cargos públicos se pusieran en contacto conmigo para que les informara un poco o aclarara sus dudas.
Aparte estos dias que Arxaon va a estar off me encargaré yo del ducado.

ArkasLynvail

17/08/2010 19:59:19

[color=green:b7532c96f7][size=20:b7532c96f7]IX. Las sombras de Mir[/size:b7532c96f7][/color:b7532c96f7]


Las risas y bromas eran la tónica del campamento aquella noche, una más de las muchas que llevaban instalados allí. Éstos soldados habían llegado a conocer y entender los peligros de Bosque Mir y sabía dónde debían y dónde no acercarse.
Y es que bosque Mir es un bosque conocido por los numerosos peligros que contiene en su interior, hombres lagarto, trasgos, gigantes y demás calaña humanoide. Pero como en todos los lugares los mayores peligros son aquellos que la gente no conoce y en ésto bosque mir no era una excepción.

Me debes 5000 monedas Fahal.
Hay alguien allí - Dijo mientras se incorporaba y cambiaba la dirección de su mano del monedero a la cimitarra.

El grupo de guardias se incorporó del suelo y observó la silueta humanoide aún envuelta en sombras que se les acercaba, el soldado de mayor rango se adelantó el resto con gesto altivo.

Esto es un puesto de control calishita, si queréis cruzar debéis identificaros- Dijo el guardia y reculó un poco al ver que aún no distinguía bien su figura entre tanta oscuridad pese a que estuviera tan cerca de él.
- Soy Mankar Ottal y no tenía intención de cruzar - Dijo un segundo antes de que diera un paso más y descubriera su esculpido rostro y un elegante traje muy poco común en el sur de la Costa de la Espada.
- ¿Qué te trae a Mir, Mankar? - Dijo el guardia más confiado pero sin soltar la espada de su empuñadura.
A Mir nada pues vivo aquí desde hace 200 años y a éste campamento en concreto vine por que mis jefes así me lo pidieron.

Los guardias se miraron confusos ante la referencia de edad y uno de ellos desenvainó su enorme falchion.

- Fijaos en sus ojos, son rojos en la noche no es humano. - Dijo el guardia que había desenvainado y ésta sola afirmación hizo que el resto de los guardias desenvainaran también, dos de ellos estaban situados a ambos costados de Mankar con unas enormes balistas apuntándole.
- ¿Qué has venido a hacer aquí y qué eres? - dijo el sargento desde su posición.
Sí sí lo sé es un inconveniente también para mi, pero es trabajo. Y bueno...qué soy es algo que descubriréis dentro de muy poco tiempo.
Justo al terminar esa frase dos virotes cruzaron su cuerpo, cada uno por un lado y lo traspasaron sin hacerlo ningún daño. Mankar se miró el cuerpo y luego a los guardias.
- Vaya, habéis sido más rápidos de lo que esperaba. - Dijo sonriente, sin haber recibido ningún daño.
- ¿De qué se trata esto? le ha dado de lleno - Masculló incrédulo el sargento mientras reculaba tras las empalizadas.
Ese no es el real.

- Tarde... - Susurró al oído de uno de los guardias más retrasados, que dio un respingo justo antes de que fuera impulsado por una fuerza sobrenatural, lanzado por los aires sobrevolando la fogata que habían encendido unas horas antes. El cuerpo del guardia se estrelló contra otros dos haciéndolos caer entre una gran confusión.
Los guardias de las balistas las empezaron a girar con intención de disparar a aquella criatura pero sintieron un fuerte pinchazo en el cuello, todo se ensombreció para ellos y cayeron inconscientes en el suelo.

Los guardias se separaron y levantaron del suelo, pero cuando miraron a su alrededor ya no eran una sola silueta la que buscaban sino al menos una docena y parecían aumentar en número a cada segundo. Los soldados se cuadraron, pegaron espalda con espalda y levantaron sus escudos protectores, rezaron a los dioses pues sabían que ese era su final.

- Siento que ésto tenga que ser así, no tengo otra opción - Dijo Mankar Ottal.
- Calimport nos vengará, esta afrenta no quedará sin castigo - Dijo el guardia apelando al orgullo de su reino.
El otro no hizo más que encogerse de hombros.

El ataque vino en forma de dardos que salvaron sus protecciones y se clavaron en sus rostros o en el cuello, buscando cualquier zona desprotegida. Cuando la encontraron los guardias no tardaron en caer redondos, inconscientes.

Una enjuta figura encapuchada se acercó a Mankar cuando todos los guardias habían caído inconscientes.

- ¿Por qué no los matamos? - dijo la figura sombría.
Esto es lo que más me va a molestar de todo...

Pero se disiparon todas sus dudas cuando los verdaderos colmillos de Mankar aparecieron y se hundieron en el cuello del guardia.

ArkasLynvail

12/09/2010 15:59:11

[i:fb2f060dce]Berrion está en estado de alarma, las puertas se han cerrado y solo dejan pasar a quienes se identifcan previamente, las patrullas se han doblado y han encerrado a los pocos civiles que quedan en el interior del castillo.

Mientras tanto todo aquel que pasa por el camino de comercio puede ver en la noche cientos de puntos luminosos en la montaña de Zhargalla y siluetas aladas en los cielos, mientras escuchan el rumor que produce el ejército al moverse por la montaña.[/i:fb2f060dce]

ArkasLynvail

12/09/2010 21:00:14

El sacerdote estaba ataviado únicamente con una sotana de color carmesí, sentado con las piernas cruzadas y las palmas de las manos boca arriba. Dos sacerdotes, con túnicas de color negro y verde estaban postrados a sus pies, acompañándole en su meditación.
En aquel lugar, el color que portaras era lo más importante, y de entre todos los colores el más poderoso era el rojo.

Abrió los ojos, saliendo del trance que lo había sumido durante casi una semana.
Miró su cuerpo, estaba delgado y enfermizo de los días sin comer y finalmente miró a los sacerdotes que lo acompañaban, que lo miraron con asombro y fascinación.

- Convocad a todos, nos marchamos. - Dijo severamente. Ante la confusa mirada del resto de adeptos.
- ¿Marcharnos, a dónde? - Dijo el de la sotana de color azul, el segundo en rango.
- A un lugar muy lejano a éste, un lugar muy al oeste de estas tierras. Lo llaman la costa de la espada. - Dijo mientras se desvestía sin pudor y ponía sobre él una armadura completa.
- He oído hablar de ese lugar, ¿pero por qué dejamos todo ésto? Nos ha costado muchos siglos mantener nuestra posición - Dijo, cobrando valor el sacerdote.

Una vez se puso la armadura, y se giró mientras caminaba hacia el sacerdote de la túnica azul.

- Vamos por que así nos lo han ordenado...Si mi palabra no es suficiente, déjame mostrarte el poder que se me ha encomendado para ésta tarea. - Dijo amenazante el sacerdote de mayor rango.

Entonces, aferró con su mano el cuello del otro adepto, que intentó deshacerse del apretón que lo mantenía atrapado. Pero su enemigo no aflojó y fue apretando más y más, soltando poco a poco una energía que parecía no tener límite.
El resto de sacerdotes bajó la mirada cuando el cuello del que se había sublevado estalló entre borbotones de sangre.

Tras una larga pausa, el lider cortó el silencio:

Ahora recoged esta basura y llamad al resto de sacerdotes. Decidles que Vierkaraag les convoca.

gatovengador

13/09/2010 12:50:21

El caballero observaba la montaña iluminada. A su alrededor los soldados se preparaban temerosos. Un ataque sólo era una posibilidad, pero no había que descartarla, con lo que se estaban llevando provisiones dentro de las murallas.

La verdad es que el hombre acorazado parecía un remanso de calma entre tanto miedo y nervio, aunque desde su punto de vista el fuese el que más tenía que perder de todo esto. Claro que tambien estaba seguro que era el que más tenía que ganar, y eso le hacía esbozar una sonrisa que procuraba que nadie viese. No sería politicamente correcto.

ArkasLynvail

14/09/2010 19:02:02

El lagarto cruzó el bosque tambaleándose y perdiendo mucha sangre, entró en el pantano y rápidamente le rodearon varios lagartos más grandes y armados.
Le escoltaron hasta su rey, un lagarto ataviado con extravagantes ropas mágicas y dispares que habían arrancado de los imprudentes que entraban en el pantano.
Frente a él el lagarto hizo una reverencia que le hizo gemir de dolor, su rey, se incorporó rápidamente impaciente de recibir las nuevas del campo de batalla.

- ¡Dime, cómo ha ido! - Dijo mientras levantaba su barbilla cogiéndolo con ambos dedos.
- Hemossssss caído mi rey, eran muchossss y sssssobretodo...tenían poderesssssss como los de nuessssstrossss chamanesssss, ¡levantaban a los que caían! - Dijo en lo que parecía una única palabra silbante.
- ¡Muertosss! Traed a lossss chamanesss, les haremossss luchar a essssosss humanosss en nuessstro terreno. - Rugió el rey.

El lagarto hizo un gesto de ir él mismo a avisar a los chamanes, pero la fuerte garra del rey lo mantuvo de rodillas.

- Tú no, tú y el resssto me ha fallado. Al contrario que lossss humanossss quienessss perecen no merecen sssser levantadossss - Según lo dijo, barrió con su espadón en horizontal, cercenando la cabeza del lagarto que cayó al suelo varios segundos antes que el resto de su cuerpo.

Pocas horas después, el viento de bosque mir susurraba unas palabras silbantes, similares a los del cascabel de una serpiente.

Jack_Botas

15/09/2010 15:56:49

*Olía a cera y a legajos viejos en la sala de juicios de Arion. La luz de las velas iluminaba los viejos tomos de archivos en sus estantes y al caballero inclinado sobre la robusta mesa de roble. Leobald garabateaba cifras y anotaciones con una pluma de oca sobre un pergamino. Por fin se irguió en la silla; había acabado de confeccionar su informe sobre el estado del alcázar, los efectivos armados y las provisiones. Dejó la pluma en el tintero y reflexionaba para sí mientras se mesaba el bigote una y otra vez en en un acto mecánico, como siempre que le preocupaba algo.*

(Dos mil almas y quinientas espadas para defenderlas. Eso era todo, muchos de ellos unos muchachos. El Quebrado nos asista si esos Sables de Fuego deciden poner sus ojos en Arion, cosa que si han pactado con los dragones es posible que hagan. La amenaza de Altagos, el viejo azul, estaba ahí.
La Guardia Leal había sido doblada en las almenas, atenta a las alas en el cielo, y los aldeanos llamados intramuros. Exploradores vigilaban regularmente el paso de los Dientecillos en busca de señales de movimiento del ejército de mercenarios. Se habían repartido cuernos de llamada para cada pareja de guardias leales para poder avisar del peligro; Doyne había hecho un buen trabajo, su sonido se oía en todo el ducado.
La reja de las cloacas había sido colocada y dos guardias, relevados cada hora, impedían el paso día y noche en el nivel tres del alcantarillado.
El portón de entrada a la ciudadela era vigilado día y noche, y los viajeros mirados con lupa. Esperaba que fueran medidas suficientes para evitar una invasión por sorpresa.
Si eran asediados aun podrían mantener un cerco algunas semanas, si llegaban las provisiones de Ambar incluso meses. La ciudadela era un baluarte inexpugnable por tierra. No eran necesarios demasiados soldados para defenderla, pero por aire... eso era harina de otro costal. Había revisado personalmente las nuevas balistas y las había mandado cubrir bajo palio para no ser percibidas desde el cielo. La poca munición mágica había sido repartida entre los arqueros.
Solo quedaba vigilar y esperar. La presencia de los Justos en la fortaleza le reconfortaba, no podía pedir mejores aliados si llegaba el conflicto.)

*El Fénix se levantó, despejó el escritorio y se dirigió a maitines como cada amanecer.*

ArkasLynvail

03/10/2010 15:15:54

[i:51632ced51]El aire se cortaba gélido en varios lugares de la costa de la espada, los animales eran más reacios a salir de sus madrigueras de lo normal.

Y es que aunque nadie lo diera por sentado, daba la sensación de que éstas pequeñas batallas que se habían sucedido en numerosos lugares, tendrían un colofón final dentro de muy poco, como la orquesta cuando llega al punto culmen tras irte guiando poco a poco.

Y ésta sensación inquietaba a cualquiera.[/i:51632ced51]

ArkasLynvail

03/10/2010 17:27:59

[i:fc5ea533db]Por todo Tezhyr llegan diversos rumores nada alagüeños, hablan de numerosas revueltas en las ciudades más importantes del Reino de Tezhyr e incluso que el Espolón de Zazes está en llamas por dichas revueltas.
También hablan de un intento de asesinato a la Reina Zaranda Estrella en las Tierra de la Corona, parece que el gobierno de Tezhyr sufre sus primeras convulsiones desde la aclamada llegada de la Reina Zaranda.[/i:fc5ea533db]

ArkasLynvail

04/10/2010 19:14:04

[color=darkblue:cd26686ee0][size=22:cd26686ee0]X. Traiciones en Berrion[/size:cd26686ee0][/color:cd26686ee0]



Su capa carmesí ondeaba con fuerza gracias a la brisa que producía el vuelo del dragón, la capa era el símbolo que lo nombraba como el primero en el rango de todo el ejército y por ello su longitud era casi tan larga como la cola del dragón sobre el que montaba.
Lord Vierkaraag culminaba el avance de las tropas hacia la conquista de Berrion como el fin inexorable en el que hubieran sucumbido todos los protectores de Berrion.

Pero esa noche no había habido combate, al menos no allí, a su llegada le contarían que un grupo reducido había logrado abatir a Auroxas y rescatar a varios de los presos de guerra, el único punto negro de la noche.

Mientras aterrizaba a su última conquista (una más de muchas en su vida) se dedicó a pensar los motivos que le habían llevado a estar donde estaba...

...En el interior del castillo de Berrion, varios meses antes de su conquista por las fuerzas de Tiamat...

- ¿Me estás diciendo que planeas conquistar el sur de Tezhyr? - Dijo Vincent algo asombrado por la afirmación del líder de los Sables de Fuego.
- Así es, Duque Vincent o debería llamaros Duque Inmolatus. - Replicó enigmático el hombre del parche en el ojo.
- ¿Cómo decís? - Dijo extrañado el duque.
- Inmolatus, ¿es que aún no lo sabéis? ¿no conocéis el nombre de la espada con la que matastéis al capitán James? - Preguntó y carcajeo el líder de los mercenarios.
- Explicaos - Vincent se removió furioso en su asiente y agarró con firmeza la empuñadura de su espada.
- Inmolatus, la espada que os fue entregada por el elegido de la madre de los dragones, aquella que os ha precipitado hacia la situación que tenéis actualmente, aquella que ha eliminado a vuestros enemigos confiriendote un nuevo poder y aquel que os habla por las noches y lo hace ahora. - Recitó Vierkaraag seguro de sí mismo.
El duque Vincent se quedó en silencio durante un instante, al menos para Vierkaraag ya que él no podía escuchar la conversación interior que tenía con la espada.
- ¿Quién sois en realidad y cómo sabéis todo esto? - Dijo finalmente.
- Mi nombre es Vierkaraag, vengo de un lugar muy al este de aquí donde el nombre de mi señora es muy conocido y temido en esas tierras, incluso por sus dioses. Ella es quien ha hecho que la espada caiga en tus manos ya que tiene un plan muy importante para vos Duque Vincent.
- ¿Y quién es esa señora de la que habláis? - Dijo el Duque algo más calmado por la conversación con la espada, que lo instaba a escuchar al hombre y a no atacarlo.
Vierkaraag como si hubiera estado esperando la respuesta empezó a desabrocharse el peto de la armadura y finalmente lo descubrió totalmente.
En su torso descubierto se podía ver el dibujo de una sierpe de cinco cabezas, cada una de cinco colores; rojo, negro, azul, blanco y verde.
¿Y cuales son tus planes para Berrion?
- Os necesito como aliado, Berrion es un lugar estratégico y un puesto que me sería muy útil para defender a mi ejército mientras crece en número y poder. Las montañas son débiles a ataques o a incursiones.
- No os cederé Berrion - Dijo muy convencido el duque.
- ¿No preferís ascender de Duque de Tezhyr a Rey? con mi ayuda podréis serlo. Os ayudaré a conocer el poder de vuestra espada, el poder de Inmolatus mi señora puede hacerlo.
- No diré vuestros planes a nadie y os marcharéis de aquí - Dijo Vincent que se mostraba reacio a unirse al sacerdote.
-Puedo hacer que recobréis vuestra confianza, organizaré un ataque y tú expulsarás al dragón azul Altagos, quedarás como un héroe entre los tuyos. A cambio solo pido una cosa.
- ¿Cual?
- A las mujeres jóvenes de tu ducado - Dijo con semblante serio Vierkaraag.
- ¿Qué planeas hacer con ellas? - Preguntó el duque que no pudo disimular su repulsa ante la petición.
- No voy a matarlas, es más cuando no las necesite seguramente las libere. Pero las necesito un tiempo, unos meses para un ritual. Durante el ataque llevaréis a los civiles al templo y nosotros esperaremos allí teleportados mágicamente. - Le contó su plan Vierkaraag mientras Vincent lo escuchaba pensativo.
- Está bien, pero una vez eso os marcharéis. - Dijo firme el duque y Vierkaraag resopló.
- Os perdéis muchas posibilidades Duque Vincent, ya os he contado que sin mi vuestra posición es muy débil. Mis hombres os respetarán por vuestro poder. De todas formas, tomad ésto por si cambiais de idea - Vierkaraag sacó un orbe negro de una bolsa de su cintura y se lo tendió al duque.
- ¿Qué es? - Dijo mientras examinaba el orbe negro con cautela.
- Es un medio para comunicarnos, solo tienes que pronunciar mi nombre y podrás hablar conmigo. Es por si cambias de idea. - Dijo y sonrió de lado ante la mirada desdeñosa del duque. - Sino me requerís para nada es hora de marchar, vuestros hombres se preocuparán de teneros mucho rato a solas conmigo.

Vierkaraag se irguió, colocó el falso parche y encendió su conocido puro para terminar de hacer una amplia reverencia.

- Nos volveremos a ver Duque, y espero que os mostréis más receptivo conmigo. - Tras decir ésto se giró y marchó de la sala del trono.

Sonrió para sus adentros, la semilla estaba puesta. Sabía que Inmolatus había ayudado a ello y que le ayudaría en el futuro, por eso estaba convencido que Vincent sería su aliado en el futuro.


....La noche siguiente al ataque de Berrion, en el campamento improvisado que habían hecho los soldados huídos de Berrion el Duque estaba sólo en su tienda recogiendo sus cosas y embozándose para salir de allí.
Conocía todas las patrullas y sabía por dónde debía salir, además un anillo de invisibilidad debía ayudarle a ello.

Agarró la espada que colgaba de su cintura y sintió como crecían las sensaciones de Inmolatus algo que había aumentado enormemente desde la primera visita de Vierkaraag. Las promesas de gloria eran demasiado alentadoras para él, y la confianza en su espada y poder eran máximas.
Sin más demora salió a pasos sigilosos del campamento y se acercó hasta los portones de su antiguo ducado, los cuales abrió de par en par.

Numerosos guardias se le acercaron con miradas sonrientes y las armas desenfundada, entre la chusma había numerosos bandidos que se habían aliado al ejército de Vierkaraag, inmundicia orca o trasga, y draconianos. Todos ellos lo rodearon y algunos hasta se atrevieron a empujarle.

- Mirad a quién tenemos aquí, parece que después de todo vamos a poder probar la carne del conocido Duque - Dijo un atrevido trasgo con su típica voz chillona.
- Muy valiente o estúpido para venir aquí, ¿qué planeas? - Dijo un draconiano.
- Debe cumplir su parte del trato.
¡Nos pagará mucho oro por tu fea cabeza!
El grupo de soldados del ejército de Vierkaraag empezó a enzarzarse en una discusión sobre quién acabaría con el duque, hasta que finalmente el trasgo que había hablado en primer lugar desenvainó una espada corta y lo atacó directo a la yugular.
El brazo izquierdo de Vincent hizo un barrido horizontal y lo empujó con su antebrazo mandándolo por los aires decenas de metros más allá con una fuerza inhumana.
El resto de soldados lo miraron con gestos de asombro y despejaron sus dudas sobre quién debía matarlo, en ese momento decidieron que sería mejor atacarle todos al unísono.
Pero Vincent ya había desenvainado su espada y ésta brillaba por las intensas llamas que salían de su hoja, las llamas candentes la hacían brillar de tal forma que todos excepto el duque tuvieron que taparse los ojos para no quedarse ciegos.
Se escuchó un enorme rugido similar al de un gran dragón y una bocanada de fuego salió de la espada incinerando al grupo de soldados y quemando el tejado de una de las casas cercanas.

Pocos segundos después, Vincent estaba junto a los cadáveres humeantes de los soldados y miraba desafiante a su alrededor donde el ejército de Vierkaraag empezaba a aglutinarse.

- ¿Quién más quiere probar la furia de Inmolatus? - Rugió el duque con una voz imponente que no era la suya.

De entre la muchedumbre se abrió un pasillo y Vincent agarró firme su espada, dispuesto a luchar hasta la muerte.
De entre la multitud salió una persona alta y fuerte, sus brazos estaban descubiertos y permitían ver su marcada musculatura. Llevaba un peto de armadura y sus piernas y antebrazos estaban cubiertas también por una armadura de color oscuro.
Llevaba una enorme y larguísima capa azul que estaba bordada con un pelaje blanco, pero lo más llamativo era su yelmo con numerosos pequeños cuernos similares a la cabeza de un dragón.

La figura aplaudía lenta y continuamente mientras se acercaba a él.

- ¿Tú eres el siguiente? - Dijo desafiante Vincent, ésta vez sí con su voz.
- Veo que cada vez controlas más la espada Duque Vincent - Dijo el jinete dragón, aunque creía que era lo contrario, que cada vez Inmolatus dominaba más a aquel hombre.
- Me debe su parte del trato por haber hecho que consiguierais el ducado sin luchar.
- Y se te dará tu parte, Duque Inmolatus - Dijo mientras se quitaba el yelmo y descubría el rostro de Vierkaraag antiguo líder de los Sables de Fuego.

- Para ti y para todos nosotros empieza ahora una nueva era.

gatovengador

05/10/2010 21:02:12

Cansancio, era la sensación que el caballero sentía por encima de todas las demás. Había perdido el ducado, el duque y su caballo. Desde que llegó a Berrion las cosas se habían ido torciendo poco a poco hasta llegar al punto en el que estaba ahora, volviendo a Arion. La verdad es que todo era bastante irónico.

Aun así, a pesar de todo el cansancio que sentía aun podía sacar algo de todo esto. Ya se vería en qué quedaba todo.

MasojHunett

06/10/2010 08:43:49

[i:f86a2b6eb0]Los temblores se sucedieron durante varios minutos y un pequeño grupo de personas nos agrupamos en la entrada, alejados de los edificios.

Decían los que iban corriendo de un lado a otro, que la zona del Bazar se había llevado la peor parte y todos los presentes se encaminaron para ver si aquella vez la palabrería de las gentes de Puerto Calim era cierta.

Efectivamente, era el distrito más afectado.La guardia no daba a basto puesto que muchos habían aprovechado el caos que reinaba en el ambiente para saquear y robar.

Allí en un largo túnel que se adentraba bajo tierra estaba el muro de Samesaj.Una parte del muro estaba rota pero todavía resistían las defensas mágicas que lo cubrían.

Unos pocos cruzaron al otro lado y empezaron a recorrer aquellas cámaras y pasillos con esos grabados antiguos,propios de las historias del sur.

Las trampas estaban a la vuelta de cada esquina, en cada pared, en el suelo y en las puerta.
Pero el grupo logró abrirse paso,evitándolas y haciendo frente a enemigos de todo tipo.No solo hubo que usar la fuerza y la magia, sino que también había que agudizar el ingenio.
[/i:f86a2b6eb0]

La cámara se había derrumbado y todos habían conseguido salir.Abd estaba ahora en la sala de adivinación de la Escuela de Magia de Calimport.Permanecía sentado en el suelo con las piernas cruzadas.Con una mano sujetaba la boquilla de la cachimba,mientras que con la otra escribía unas palabras en el pergamino.

[i:f86a2b6eb0][color=darkblue:f86a2b6eb0]"Nada ocurre por casualidad.Todo lo que ocurre tiene su porqué.Tal vez tu cerebro no lo sepa.Puede que jamás lo imagine.Pero tú corazón lo sabe.Tú corazón siempre lo sabe.

Ali Samesaj."[/color:f86a2b6eb0]


[color=blue:f86a2b6eb0](Habrá que saber más sobre esa llave...)[/color:f86a2b6eb0][/i:f86a2b6eb0]

ArkasLynvail

30/10/2010 14:34:00

En multitud de lugares de Tezhyr se pueden ver aldeas ardiendo plagadas de cadáveres, los pocos supervivientes cuentan que los ataques han llegado por dragones y mercenarios que han desvalijado sus pertenencias, y raptado a los hombres más jóvenes.

Esto al igual que ver dragones en el cielo se ha empezado a convertir en algo común en el Reino de Zaranda.

Ash

30/10/2010 22:48:16

Desde su puesto elevado, en las cumbres heladas de los picos nevados Nesh observa lo que sucede en las llanuras, las columnas de humo y su corazon, comenzaron a inquietarle y pensar en lo que debia hacer. . .
[i:4d5e297c6e]
Parece que mi tiempo acaba aqui. . . e de volver con mis hermanos, aunque mi fuerza este mermada, mi Fe aun es fuerte. .
[/i:4d5e297c6e]
Acto seguido recogió su petate, desenterró su enorme bastarda dentada, conseguida para la ocasion, y partió rumbo a su ultimo destino. .

Vitule

02/11/2010 14:49:30

Como venía siendo costumbre en las últimas semanas sus fuertes pisadas y el rechinar de la pesada armadura se hacían oír mientras recorría el distrito de la fe hasta detenerse en la entrada de su destino.

- De nuevo por aquí…-dijo el clérigo supremo de Oghma. Un leve asentimiento fue toda la respuesta que recibió de Bulbaiff.

Las horas pasaban, los pasillos eran recorridos, escritos de diferentes características y formas eran ojeados una y otra vez sin obtener nada que pudiera serle de utilidad.

Quizás mañana haya más suerte…

ArkasLynvail

04/11/2010 00:08:13

[u:b289288bc0]Un cuerpo Desconocido: Parte I


La columna de humo que salpicaba con manchas grises el cielo era la estrella que guiaba el sendero del caballero.
Ese caballero portaba una brillante armadura carmesí que llevaba con tal ligereza que parecía una segunda piel. Su pelo, era totalmente rojizo, como los bendecidos por la diosa Sune. Pero lo que más impactaba de su físico eran sus intensos ojos esmeralda, que provocaban que la gente apartara la vista ante su intenso escrutinio.

El olor a quemado y muerte inundó sus fosas nasales y vigilante desenvainó su cimitarra a la vez que vigilaba los alrededores, presto a cualquier tipo de asalto.
Un sonoro golpetazo a su diestra alertó al caballero y lo puso en retaguardia, pero no fue demasiado tiempo. Pronto descubrió la figura repleta de hollín de un joven ganadero que se había escondido tras los tablones en la refriega.

- ¿Quién eres tú? - Dijo el joven asustado, sus ojos observaban el cielo con temor.
¿qué ha pasado aquí?
- Fue un dragón, un inmenso dragón rojo. Vino, lanzó su terrible aliento y se llevó la mayoría de nuestro ganado. Sólo pudimos observar y escondernos mientras lo hacía.
- Bien, ¿por dónde fue? - Dijo mientras desmontaba de su caballo y asía la empuñadura de su cimitarra.
- ¿Por dónde?¿Pretendéis seguirlo?¿Estáis loco? - Dijo estupefacto el joven.
Dime por donde marchó.
- Eh...por allí - Dijo mientras señalaba confuso la dirección por donde marchó el dragón, y lo miraba con una mezcla de respeto y extrañeza.
- Bien, adiós - Dijo y sin más marchó hacia las montañas.


Un par de horas después el ruido del crujir de huesos y el olor a descomposición se hizo insoportable. Sogalab, siguió avanzando a paso tranquilo y al girar el recodo observó al inmenso dragón rojo, devorar los restos de ganado y cuerpos humanos tomados.

- Me preguntaba quién era tan estúpido de acercarse a las montañas después de que apareciera en la aldea - Dijo el dragón con voz cavernosa.

Sogalab dio un rodeo y observó el lugar donde se había asentado el dragón, había elegido un lugar al aire libre por lo que imaginó que la gran sierpe roja no temía nada que los humanos pudieran llamar.

- ¿Acaso es que no oyes? - Dijo el dragón con tono más molesto y escupió un hueso y se incorporó cuan largo era, con intención de aterrorizarlo con su mera presencia.
- No, no lo estoy Arkhretam Iolubagus - Dijo el humano, observando con fijeza a la criatura totémica.
Tú....¿qué haces aquí?- Dijo con un leve rastro de temor.
- Sabes para qué he venido y eso es todo lo que te importa.
- Ni siquiera me ha seguido hasta mi guarida y mi tesoro...¿tan desperado estás por derrotarme? - Rugió el dragón.
-He venido a por tu cuerpo, lo necesito.
- ¿Mi cuerpo? ¡Me temo que estás más loco de lo que dicen "Rey de los dragones"! - Rugió pronunciando irónicamente el autoproclamado título de Balagos La Llama Imperiosa, y se lanzó al ataque, intentando aprovechar que su rival tenía una forma física débil.

Por todas las montañas y las llanuras se pudo escuchar durante los siguientes largos minutos el rugir de aquellos titanes, enzarzados en su lucha.
Cuando todo acabó, no quedó más rastro de la batalla más que un campo ennegrecido por las llamas.

gatovengador

12/11/2010 22:44:46

El caballero vigilaba, era lo único que parecía hacer ultimamente. La situación parecía haberse estancado y no veía una solución a corto plazo.

Todo parecía indicar que iba a ser otro anodino día de visitas inutiles y tontarías varias cuando algo el llamó la atención en el noroeste, en el cielo. Entrecerro los ojos y trato de enfocar la vista, pero no hizo falta, decenas de siluetas avanzaban por el cielo en su dirección.

-¡Balistas! -gritó de inmediato. Y en el campamento los soldados empezaron a movilizarse y a prepararse.

De poco iba a servir, pensó a medida que se iban definiendo más las figuras. Medio centenar de dragones surcaban el cielo en su direccióon, y a su cabeza un dragón que empequeñecía el sol, acompañado de otra bestia que, aunque pequeña al lado de la primera, era de un tamaño temible.

Al menos ensartarían a alguno, era su consuelo mientras levantaba sus defensas mágicas, y luego se acabaría todo.

Pero para su sorpresa los dragones pasaron de largo, proyectando grandes sombras sobre el campamento. Directos a Mir por lo que el caballero vio.

El caballero sonrió. Esto era lo que había estado esperando.

ArkasLynvail

12/11/2010 23:34:54

[i:e4128d91e7]Los dragones surcaron los cielos, desde Berrion al rio Agis desde el rio Agis a Mir y desde Mir hasta una zona de montañas rocosas situada en el centro del desierto.
Todo había sido demasiado fugaz y como muestra de su paso solo quedaban los rostros atónitos de quienes los habían visto pasar y la multitud de cadáveres que ahora estaba agolpada en las montañas rocosas.[/i:e4128d91e7]

Dragonslav

14/11/2010 16:11:07

[color=darkblue:3064aafefa]La cupula del palacio de Calimport habia caido derribada por el aliento de la gran dragona azul, en la ciudad no se paraba de hablar del hecho. El Qysar estaba ileso gracias a la magia de su Visir y Rodrik ya habia preparado todo para la inminente guerra contra los hombres lagarto y los dragones.
Ya habia vivido otras guerras, innumerables batallas de las que habia salido victorioso, pero esta era especial. Era la primera guerra en la que lideraba el ejercito calishita, su ejercito.
Habia subido la moral de sus mandos en la reunion, estaba satisfecho de haber visto como todos se marchaban con cara de confianza, dejando atras las dudas. Escucho todas las sugerencias que le hacian sus compañeros y amigos, pero no podia arriesgarse a seguir todos sus consejos, la responsabilidad de salvar la ciudad y a sus habitantes recaia en el, un peso enorme sobre sus fuertes hombros.
La mañana llego, las ordenes estaban dadas y solo faltaba que los soldados hicieran su trabajo. Rodrik salio al patio de la Academia de Guerra donde esperaban los guardias formados para la diana matutina.[/color:3064aafefa]

[i:3064aafefa]-Las tropas enemigas que conteniamos en Mir han dado un paso adelante hacia nuestra ciudad y ahora se esconden en el oasis de Dallabad. Sabemos que no son invencibles, pues un puñado de calishitas liderados por la Yuzas Eisa y por mi conseguimos romper sus lineas defensivas hasta el punto de tener que destrozar la via de acceso mas rapida al oasis para contenernos.
Nos temen, saben que sus fuerzas no son infinitas y que se estrellaran contra los muros de Calimport una y otra vez sin abrir brecha ¡Porque la fuerza de nuestras murallas es la fuerza de nuestras almas y mientras nuestro valor no flaquee ningun lagarto pondra un pie en nuestra ciudad! Cada paso que dan les acerca un poco mas a su perdicion y os pregunto ¿Cual es su perdicion? ¡El filo de las cimitarras calishitas!
Sabeis que teneis que hacer y estais preparados para conseguirlo, es solo cuestion de tiempo que prevalezcamos, acabaremos con esos escamosos de la misma forma que hemos acabado con thayinos, demonios y no muertos.
[size=18:3064aafefa]¡Gloria a Calimport! ¡Por el Qysar! ¡Muerte al enemigo![/size:3064aafefa][/i:3064aafefa]
*Al terminar las palabras Rodrik alzo a Qysaghanni en el aire haciendo que los reflejos dorados llegaran a sus tropas.*

[color=darkblue:3064aafefa]Rodrik dedicaba todo el tiempo que le quedaba despues de supervisar y elaborar las defensas de la ciudad a permanecer junto al Qysar, en prevision a cualquier ataque. Ponia en practica toda su disciplina, pues el Qysar no habia dejado que el ataque rompiera su vida diaria, y el palacio le brindaba muchas distracciones. A ninguna de ellas Rodrik sucumbio. El tiempo pasaba y las batallas contra los dragones estaban cada dia mas proximas, pero su confianza no disminuyo un apice.[/color:3064aafefa]

folmalhaut

15/11/2010 00:00:30

Frank llega a Arion. Cansado de cabalgar, deja una nota al guardia de la entrada del Castillo.

-Por favor hagaselo llegar a Leobald cuanto antes. También te daré otro para Nyrnael si es que está aquí.


Las notas dicen lo siguiente.

[i:302ac0acb6]Me manda Jarreth para decirles que pensamos recuperar Berrion en los próximos dias. Tanto él como el resto del pueblo de Berrion, esperan recibir su ayuda para así poder recuperar sus hogares. La situación comienza a ser desesperada y pocas soluciones quedan.

Frank Gascon.
[/i:302ac0acb6]

Dragonslav

25/11/2010 14:10:27

[color=darkblue:94d99cf838]Los lagartos lanzaron su primer ataque, llegaron por el acceso a los suburbios y los sonidos de lucha alertaron a la guardia que fue a avisar a sus lideres. Los dos Yuzas emprendieron camino a la zona de batalla para limpiar el barrio de enemigos. La escaramuza duro horas, pero los hombres y mujeres de Calimport habian conseguido parar a aquellas bestias.
Las negociaciones con el Baja Basadoni no dieron buenos resultados preferian caer a ser ayudados y la guardia no volveria a intervenir en aquel barrio si no era por causa mayor.

Al dia siguiente del ataque un tsunami arraso el puerto y una tormenta comenzo a gestarse en la lejania. Conociendo los antecedentes de control de clima de los hombres lagartos Isabella y Rodrik prepararon un grupo para averiguar mas sobre el suceso y tal vez ponerle fin. Tardaron un poco, pero consiguieron un grupo lo suficiente numeroso para cumplir con la mision. Navegaron en la joya de la Armada Imperial, el gran buque del Qysar, hacia el centro de las nubes negras. Isabella se conectaba con la urdimbre para sentir los tirones de la magia enemiga y gracias a ello el barco llego a las inmediaciones de una isla muy pequeña donde los sacerdotes de Tiamat y los hombres lagarto estaban completando un ritual magico para volver el mar contra Calimport. Sin dudarlo un momento los aventureros y guardias dejaron el barco y tomaron la isla. La contienda fue dura y muchas veces los heroes estuvieron al borde de la muerte, pero no desfallecieron y asi consiguieron la victoria.

En la isla habia un simbolo de poder capaz de potenciar la magia cambiante de clima, que los arcanos transcribieron con precision para volver las armas del enemigo en su contra. Rodrik por su parte corto la cabeza de los sacerdotes de Tiamat para llevarlos hasta Calimport clavando todas las cabezas en picas y dejandolas en la entrada para que los enemigos de Calimport vean que les pasan a quien osa atacar a la Joya del Desierto.[/color:94d99cf838]

folmalhaut

01/12/2010 13:33:03

Frank sentado en la mesa de su habitación pasó a escribir en su diario lo acontecido. Con la intención de que si salía vivo de aquella ciudad tener una gran historia que contar.

[i:e9f661a59f]Aquel día, sonó la alarma, los calishitas, entre los que se encuentra gente muy desdichada, corrían pavorosos poniendose a salvo de lo que se avecinaba. Este humilde servidor de Milil marchó a la entrada, más allá de las murallas donde los edificios dejan paso gradualmente a un gran mar de arena.

Allí se encontraba el grueso de la nobleza y el ejercito de Calimport. Nobles y poderosos guerreros junto con experimentados magos luchaban por defender las murallas de la ciudad de ese oscuro ejercito. Descolgué mi arco, saqué de mi bolsa mágica un carcaj de mis mejores flechas y colaboré con ellos en la batalla. La batalla fue dura y cruel, mas Tempus puede estar tranquilo ya que ganó el ejercito de Calimport con merecimiento y valentía. También ganó el que tenía que hacerlo para no aumentar la desgracia de los pobres ciudadanos de esta ciudad.

Cuando todo pareció haber acabado, lagartos atacaron el bazar y allí sentí el filo ardiente de una gran espada empuñada por un lagarto. Mi estoque me permitió huir y así escribir estas lineas.

Pero lo peor estaba por llegar. Dos grandes dragones, que faltaba si no esto en una lucha contra servidores de la Nemesis de los Dioses, atacaron el Distrito de los muelles. La devastación reinaba en éste, uno de los distritos más pobres de la ciudad. Luchamos todos contra ellos y al fin cayeron al suelo sin vida. Eran uno azul y otro verde, inmensos, más grandes de los que yo había visto nunca, hasta ese día.

Al cabo del rato, algo tapó el sol, miré hacia arriba y se me erizó la piel. Una gran dragona cayó sobre la ciudad y nos dio un ultimatum:

-Dos semanas...


(Continuará...)
[/i:e9f661a59f]

dunkan_cero

01/12/2010 14:14:32

[i:5fec54c416]Estenion se encontraba inmerso en sus negociaciones con el comerciante local a las afueras de la joya del desierto, debatiendo sobre el hecho de la autenticidad de la gema que se presentaba ante el cuando una campana de alarma trono a lo largo y ancho de toda la ciudad proyectandose hasta los confines del desierto.

-Esos dichosos lagartos otra vez- Pensó para si el elfo.

Cogiendo la vaina de su espada y dejando ante el avaro enano la gema salio con premura del local para unirse a la contienda en la medida de los posible.
En el exterior el espectaculo era cuanto menos grotesco, legiones de infanteria resptiliana avanzaban por el paseo de las caravanas rumbo hacia Calimport como un unico muro unanime y letal, mientras tanto las fuerzas aereas, terribles dragones negros y azules, arrojaban su fuego sobre las pobres gentes de la ciudad que aún no habian logrado refugiarse el premeditado ataque.

Estenion girío la cabeza a tiempo para ver como un soldado era carbonizado hasta no dejar mas que unos huesos ennegrecidos en el pavimento por una deflagración draconiana, a su alrededor el caos estaba sembrado, así como los cientos de cuerpos que ya se apilaban entre los cuales se encontraban gentes a las que habia conocido francamente bien.

Un estandarte salía por las puertas del distrito de la magia seguido de cientos de soldados armados y pertrechados listos para entrar en batalla, en su frente estaba el yuzas junto con otro tantos personajes conocidos de la ciudad y magos del reino....El choque fué brutal las fuerzas en cuestion de segundos entraron en un combate cruel y violento, mientras la sangre se derramaba en la calida arena del desierto y las cabezas rodaban como si de melones el bazar se tratasen.

El elfo desenfundo su arco y con dos flechas en la mano derecha se dispuso a lanzarlas, la letal andanada hizo blanco, a pesar de ello las duras escamas del draconiano mas cercano parecieron no inmutarse lo mas minimo, este con una mirada aniquiladora se volvio hacia nuestro protagonista y rapidamente avanzo hacia el, Estenion tirando el arco y desenvainando su espada rapidamente pudo parar el embate... los golpes eran demasiado seguidos la lucha era compleja y a un nivel muy superior al que estenion estaba acostumbrado a luchar, instantes despues el mundo se tiño de negro hacia su alrededor, por la espalda el mango de una espada lo habia golpeado en la cabeza, justo antes de desmayarse pudo ver como la espada del yuzas atravesaba el toraz de su contrincante salvandolo la vida, las fuerzas imperiales avanzaban implacables....[/i:5fec54c416]



[color=red:5fec54c416][/color:5fec54c416][i:5fec54c416]Dos dias después Estenion estaba perfectamente recuperado, habia despertado en el hospital de campaña con un fuerte dolor de cabeza y le habian instado a dejar su lecho a alguien que lo necesitase mas que el no sin antes informarle de la costosa victoria de sus aliados.
Estenion estaba abatido su actuación en la batalla habia sido leve y poco relevante, pero la proxima vez pensaba, sería decisiva.

Estando en la taberna charlando con una serie de comerciantes locales, no volvio a tardar en repetirse el tan odiado tañido de la campana de alarma que desgraciadamente era habitual en estos tiempos en todo el territorio que colindaba a la joya, veloz como un rayo y decidido Estenion se calzo su yelmo, cogió la vaina de su espada y salio presto al combate.

Instantes después estaba formando junto al resto de las fuerzas en el paseo de las caravanas. Un rugido ensordecedor de cientos de pies marchando al unisosno comenzo a palparse en el ambiente, sus finos y agudos oido elficos asi como su vista percibian la llegada en un contingente muy superior al enfrentado en anteriores ocasiones. A su lado un humano con aspecto de haber vivido toda la vida en una granja contraia las musculos faciales en una mueca de vivido terror, la primera linea siempre era la peor, se dijo, una leve ojeada basto para apreciar como los orines de su compañero le corrian por la pierna ante el miedo de una muerte inminente.

Minutos despues un choque de fuerzas tuvo lugar en tierra, los dragones surcaban los cielos a una velocidad pasmosa causando bajas a cientos con cada bocanada de aire ardiente que expulsaban por sus fauces, el combate se desarrollaba con ciertas dificultades para el bando del desierto, los compañeros caian y gemian de dolor a su alrededor mientras el elfo atravesaba cuerpos con implacable efectividad, no sin recibir multitud de cortes y algún flechazo, el ejercito invasor les estaba obligando a retirarse a las puertas, pronto el paseo habría caido.
Así fué como los temores de Estenion se hicieron patentes, a pesar der haber derrotado el terrible espadachin Bulbaif a su lider el ataque era implacable y obligo a los soldados a retirarse a las calles de la ciudad tras perder la entrada, a la vez los ataques se intensificaban en otros puntos de la ciudad.

Las noticias de que un terrible dragon verde y otro azul campaban por los muelles de la ciudad no tardaron en llegar a oidos del escuadron del yuzas del cual Estenion formaba parte ayudando en la medida de los posible, raudos se dirigieron al lugar, efectivamente implacable y terrible un dragón de al menos 20 metros se encontraba en los alrededores del distrito portuario, sus escamas relucian verdes como la esmeralda ante el sol del desierto, sin dudarlo unos intantes el yuzas se lanzo al ataque seguido por sus fieles soldados, trepando por el lomo y alcanzando su cuello tras varios minutos de dura lucha logró alcanzar uno de sus puntos viateles derribandolo herido de muerte ante sus pies, el primero de los lagartos habia caido.

No pasaron ni dos horas antes de que la lucha se desarrollase de forma muy similar consiguiendo abatir a la segunda hembra, durante unos minutos todo parecio en calma, pues las fuerzas invasoras acabaron por retirarse, todos los supervivientes se daban la mano y pequeños golpes de compañerismo en las espaldas habiendo sobrevivido un dia mas a la terrible guerra que asolaba estas tierras, pero su felicidad duraría poco...

Una terrible voz seguida de un estruendo clamaba venganza por la muerte de su hija, una dragona azul de medidas inimaginables aterrizo ante los ahora aterrorizados soldados, esta amenazo a los valientes hombres y mujeres con cobrarse su venganza en un plazo de dos semanas, diciendo ser la verdadera qysara....[/i:5fec54c416]

Vampire_mina

01/12/2010 14:44:02

tal como os dije ayer aqui teneis la informacion historica de quien es Colmillo Afilado. *deja unas cuantas copias a dispocicion de todos*

Iryklathagra es uno de los pocos seres que puede afirmar haber desafiad a los Shoon y haber tenido éxito.

Iryklathagra nació en el año 145 CV en las arenas del Anauroch. Rápidamente, en el año 150 CV, se hizo con diversos objetos y artefactos mágicos que había en la torre de Hilather en el emirato de Torsil que le permitieron conseguir bastante más poder del que un dragón de su edad solía tener.

Poco más se sabe sobre sus primeros años. Iryklathagra no empezaría a ser conocida hasta el año 236 CV cuando se trasladó al Sur. Su primera acción fue hacer un trato con el Qysar Shoon IV.

En el pacto Iryklathagra se comprometía a ayudar al Qysar a luchar contra el dragón plateado Rhimnasarl el Radiante. Rhimnasarl había estado durante mucho tiempo oponiéndose a los planes de los Shoons. Además, Iryklathagra se comprometía a cazar a cualquier otro dragón que entrase en los territorios Shoon a cambio de que la guarida de Rhimnasarl y las riquezas en ella le fuesen entregadas.

Con la ayuda del Qysar y sus tropas Iryklathagra consiguió matar a Rhimnasarl. Sin embargo, el Qysar se dio cuenta de que las riquezas que contenía la guardia de Rhimnasarl eran mucho mayores de las que había previsto y decidió romper el trato con Iryklathagra.

En la lucha que siguió Iryklathagra fue gravemente herida y a duras penas logró sobrevivir. Una vez recuperada volvió a la guarida de Rhimnasarl para ver como todo el tesoro se lo habían llevado las tropas del Qysar. Desde ese momento, juró venganza contra los Shoon.

Mientras, Shoon IV proclamaba por todo el imperio su victoria sobre dos dragones, uno Rhimnasarl y otro, Iryklathagra, que había acudido con la esperanza de deshacerse del Qysar y aprovecharse del debilitado estado de Rhimnasarl para retarlo a un duelo de dragones que hubiese devastado las tierras a su alrededor.

Esta afirmación de Shoon IV provocó que Iryklathagra nunca fuese reconocida como tal de forma oficial por el resto de sucesores del trono de Calimshan. Aceptar que el dragón azul que atacaba el imperio era el mismo al que Shoon había vencido era aceptar una derrota del Imperio y este hecho durante mucho tiempo provocó dudas entre los estudiosos sobre la verdadera identidad del dragón.

La derrota contra Shoon IV provocó que Iryklathagra pasase años preparándose para tomar su venganza. Primero se asentó en las Montañas de la Marcha. Durante nueves años se contentó con ir amasando poco a poco poder. Durante el año 245 CV lanzó diversos ataques sobre las tierras circundantes.

Pero la verdadera leyenda de Iryklathagra se empezó a forjar a partir del año 322 CV cuando, creyendo tener suficiente poder, voló hasta Shoonach y se sentó en la Plaza del Qysar, justo enfrente del Palacio Imperial donde exigió a Shoon VII la devolución del tesoro que consideraba que le habían robado. Tras días de negociación se llegó a un acuerdo por el que Iryklathagra consiguió una parte del tesoro y que Shoon VII se comprometiese a llevarle el resto de él.

Este suceso provocaría las batallas denominadas como las Batallas de Colmillo Afilado en la que el Qysar y el dragón se enfrentarían en 3 batallas de enormes proporciones. Producto de estas batallas, Iryklathagra ganaría el apodo de Colmilo Afilado.

La primera batalla tuvo lugar en el reino de Valashar. Iryklathagra había insistido en que fuese el propio Qysar el que llevase el tesoro de Rhimnasarl a ella. En lugar de entregarle el tesoro, el Necroqysar respondió atacándola con su magia y objetos mágicos.

En esta batalla ninguno de los dos sufrió daños serios, pero al menos cuatro poblados de Valashar fueron destruidos en la batalla. Además, Iryklathagra perdió diversos objetos mágicos ante el Necroqysar, haciendo que éste proclamase su victoria sobre el dragón.

La segunda batalla no sería hasta el año 358 CV mientras el Necroqysar se encontraba visitando el reino de Valashar. Son muchos los que creen que esta visita no era más que un intento por parte del Necroqysar de atraer al dragón a una batalla en la que conseguir eliminarlo.

Pero esta vez Iryklathagra estaba preparada y había conseguido reunir un arsenal mágico de gran importancia. A pesar de la enorme habilidad de Shoon VII y del uso indiscriminado de soldados y campesinos para potenciar su magia el dragón consiguió vencerle, y lo más importante, robarle el Bastón de Shoon, un poderoso artefacto creado por el propio Necroqysar.

La última batalla fue la que ganó definitivamente su apodo a Iryklathagra. En medio de Shoonach ambos rivales se volvieron a ver de nuevo las caras. Esta vez ambos con poderosa magia y artefactos a su disposición destruyeron una parte de la ciudad y cerca de 75.000 esclavos murieron en una lucha en que la ira de ambos rivales fue palpable. A pesar de las heridas graves que sufrieron ambos rivales, Iryklathagra casi arrancó la pierna derecha y el brazo izquierdo al Necroqysar y éste dejó las alas de Iryklathagra trinchadas.

La batalla llegó a su final cuando los soldados del Necroqysar rechazaron al dragón, pero a pesar de que Shoon VII reclamó la victoria mientras el dragón huía, la visión de la capital del Imperio Shoon devastada hicieron que pocos las creyesen.

Shoon VII fingió su muerte en el año 367 CV y le sucedió su hija la Qysara Shaani que hizo frente a Iryklathagra cuando esta volvió a Shoonach en el año 371 CV. En el encuentro que tuvieron ambos, se dice que Iryklathagra derrumbó la cúpula del Palacio del Qysar al escuchar que Shoon VII había muerto.

La Qysara logró pactar con Iryklathagra ofreciéndole diversos objetos mágicos, entre ellos el Anillo de Maestro de Amahl V, el Anillo Espada de Batalla de Akkabar o Kuraltaar el Escudo Demoniaco. Viendo que el Imperio Shoon empezaba a declinar con el mandato de la Qysara solicitó un tributo centenario a los Shoon y a los herederos del trono de Calim mientras se preparaba para aprovechar el caos que provocaría la caída de los Shoon para saquear Shoonach.

No tuvo que esperar mucho, pues en el año 450 CV el Rey Strohm de Tethyr saqueó Shoonach poniendo fin al Imperio Shoon. Durante el cuarto día la Conflagración de Shoonach, el nombre que recibe el enorme incendio provocado por el ejército de Tethyr en Shoonach, Iryklathagra apareció sobre la ciudad y diálogo con el Rey Strohm. Iryklathagra y el rey llevaron a cabo un pacto: la dragona nunca usaría Tethyr como su territorio de caza a cambio de que la dejasen saquear la ciudad sin molestias.

Iryklathagra consiguió numerosos tesoros de la ciudad, entre ellos Ghazir el Filo del Desierto, que había sido creado por medio del conocimiento mágico que Shoon IV había encontrado en la guarida de Rhimnasarl, y diversos objetos procedentes del tesoro del dragón plateado. El único objeto que no pudo conseguir fue el Tomo de Janhyra, o también conocido como el Tomo de los Secretos, que desde entonces ha estado buscándolo.

Después de la destrucción de Shoonach Iryklathagra se retiró a su guarida y permaneció alejada de Calimshan, apareciendo solo una vez cada siglo para cobrar los tributos que los syl-pasha le daban para evitar sus ataques sobre el reino. Poco se sabe de las actividades que llevó a cabo, la única que se sabe con seguridad es que en e año 671 CV se hizo con el Escudo Dentada de AShyk Korort de un chamán gnoll del Shaar.

Iryklathagra se vio afectada como el resto de dragones por la Rabia en el año 1018 CV y se unió a diversos Vuelos de Dragones. Iryklathagra centró su furia sobre la ciudad de Mintarn a la que sometió a diversos ataques, destruyendo sus defensas y flota. Cuando Iryklathagra se retiró a su guarida poco quedaba excepto ruinas de la ciudad.

Esta acción provocó que en Mintarn un grupo de magos, conocidos como los Señores Supremos de Mintarn se hicieran con el poder clamando que ellos tomarían venganza contra el dragón. Durante años fueron recopilando información sobre Iryklathagra pero cuando estaban preparados para luchar contra ella fueron derrotados por los Arpistas y Khelben Arunsun en el año 1128 CV.

Sin embargo, toda la información que habían recopilado no fue en vano. Los Dedos Esqueléticos, un grupo de ladrones bastante conocidos en el Sur, consiguieron hacerse con ella. Fue gracias a esta información que en el año 1162 CV diversos miembros de los Dedos penetraron en la guarida de Iryklathagra con el fin de hacerse con alguno de los legendarios objetos mágicos que se decía que guardaba su guarida.

Su intrusión solo logró despertar a Iryklathagra, que había estado sumida en un largo sueño. Como represalia mato a todos los miembros del grupo. Viendo que la seguridad de su guarida había sido comprometida, decidió trasladarse hacia el norte.

Desde entonces Iryklathagra se mantuvo sumida en una relativa calma, que no rompió más que en pequeñas ocasiones, una de las más notorias el saqueo que llevó a cabo de la ciudad de Otanyn, en el Protectorado Tritón en las Ahlors en el año 1271 CV.

No sería hasta fechas más cercanas que Iryklathagra recuperaría una actividad más constante. En el año 1369 CV atacó una pareja de dragones de bronce y sus crías para saciar su hambre. En el duelo que siguió, mató al padre y a dos de las crías. Una de las crías logró sobrevivir.

En el a ño 1371 volvió a aparecer cuando fue a recibir el tributo del Syl-Pasha de Calimshan. Una enorme caravana de esclavos se dirigió con joyas, oro, obras de arte y objetos mágicos hacia Shoonach donde Iryklathagra devoró a los esclavos y se llevó el tributo.

A pesar de que muchos esperaron que esta fuese su última aparición hasta el siglo siguiente el año de los Dragones Solitarios, 1373 CV, volvió a provocar una actividad frenética de Iryklathagra al igual que al resto de los dragones de Faerun que se vieron presa de la Rabia.

Primero lanzó un ataque sobre la torre occidental de las Torres Gemelas del Eclipse y después se dirigió contra Puerto Calim. Incapaz de destruir el Sabban del Pasha debido a los poderosos conjuros que lo protegían descargó su furia contra la Plaza de la Verdad Divina.

En la lucha que siguió, destruyó el Ídolo de Bhaleros, que desencadenó una antigua profecía, haciendo que un aspecto del propio dios se manifestase junto a un dragón de cobre esclavizado. La feroz lucha que siguió provocó que el Iryklathagra fuese rechazada.


Iryklathagra es un dragón paciente e inteligente. Ha sobrevivido a saber esperar su momento, sin importar el tiempo que requiriese. Buenos ejemplos de ello son sus luchas contra los Shoon. Suele exhibir poca de la arrogancia que muestran los dragones. Eso si, su furia e ira contra aquellos que la enfurecen no tiene parangón.

Pruebas de esta personalidad es el hecho de que suele contratar bardos para difundir noticias de su furia o de sus acciones, siempre desde la óptica que juzga más útil a sus intereses.

Se ve como la Qysara Dragón de los Shoon y cree que es la verdadera sucesora para ejercer el poder pero tiene poca paciencia con el día a día de gobierno, con lo que considera los tributos como una muestra de su poder sobre las regiones de Amn, Tethyr y Calimshan.

Esta actitud hace que rara vez suela cazar en alguno de estos territorios y que suela atacar a cualquier dragón que se aventure en los que considera sus territorios. En Amn el Concilio de los Seis ha puesto freno a las actividades de aventureros contra Iryklathagra al creer que si el dragón abandona la zona su sucesor no puede ser tan benigno.

El único dragón que comparte territorio con Iryklathagra es su hija Araugauthos. Ambas se llevan bien y la hija ayuda a su madre guardando su guarida cuando ésta esta fuera. Por este servicio Araugauthos recibe generosas recompensas de su madre.

ArkasLynvail

01/12/2010 14:54:45

Venidos desde el norte, 100 soldados con el emblema de Arion llegan al rio agis. Provistos de largas picas para atacar a dragones en vuelo y ballestas.

Los soldados enviados por el caballero Leobald se ponen a disposición total de la Capitana Laura Davis.

Dragonslav

01/12/2010 14:59:03

[i:0f233f8bfc]Rodrik hacia tiempo que sentia sobre sus hombros todo el peso del mundo. Como general de las fuerzas de Calimport debia vencer a los lagartos, sin posibilidad de fallo. Segun lo que habian descubierto tiempo atras gracias a la inestimable colaboracion de Isa y sus arcanos, la caida de Calimport podria significar que un avatar de Tiamat entrara en Toril. Era la primera vez en toda su carrera militar que estaba al frente de todo el ejercito en una situacion de guerra real, antes ya habia liderado en varias ocasiones las fuerzas calishitas, pero sintiendo solo la responsabilidad del segundo al mando. No, ahora toda la ciudad dependia de sus decisiones y de su capacidad de combatir y liderar a los suyos.

Esta no es una cuestion de calishitas y norteños, no es tampoco una cuestion entre bien, mal, orden o caos, la moral y la etica deben dejarse a un lado cuando esta en juego la aniquilacion y Rodrik conocia muy bien que el equilibrio existe por la existencia de cada faceta del diamante que es la condicion humana. Otro motivo mas por el que no fallar.

El tiempo se acababa y la resolucion del conflicto llegaria sin apenas tiempo para pensar en como resolver la situacion, entonces comenzo la tormenta.

La horda de lagartos irrumpia por el paseo de las Caravanas, ya conocian nuestras fuerzas y no necesitaban perder el tiempo con los barrios perifericos. Rodrik habia acabado con centenares de lagartos y decenas de dragones, algunos tan grandes como una casa o hechos de girones de carne entrecosidos por la magia de un nigromante, la conclusion era la misma, golpea fuerte y golpea rapido. El grupo lo formaban Isabella y Bulbaiff, los mas experimentados de los presentes, Darrel, Estenion, Dylan, Aizha y algunos voluntarios mas. Bulbaiff rodeo una parte de la fuente central del paseo y Rodrik tomo el camino contrario de manera que ambos soportarian la presion contra los flancos en la batalla. La primera escaramuza fue dura pero los objetivos se cumplieron. Rodrik elimino a uno de los altos sacerdotes de Tiamat y Bulbaiff habia sido capaz de dar cuenta del rey lagarto, pero la presion de la horda les hacia retroceder al oasis, donde los dragones estaban causando problemas.

La siguiente oleada no fue natural, como surgidos del infierno nos atacaron unos caballeros no muertos. Parecian aquellos de Mir con la flor marchita en el peto, pero su poder era inconmensurable. Todos los golpes que hubieran acabado con un hombre, apenas hacian mella en los no muertos. Durante un movimiento calculado el capitan de los muertos vivientes logro llegar al distrito de la magia. Alli los guardias le hicieron detenerse y Rodrik no tardo en llegar y plantarle cara. Al quedar su cuerpo reducido a un amasijo de carne y hueso de ultratumba los restos del ser desaparecieron. ¿Volveria a entrar en esta contienda?

La calma no duro mucho y de nuevo saltaban escaramuzas entre las fuerzas calishitas y la horda tiamatina. El Distrito de la fe y el Gran Bazar fueron limpiados de enemigos sin mayor dificultad y entonces sucedio.

Dos grandes dragones acababan de llegar desde el mar al puerto. Rodrik nunca habia visto nada igual, aquel dragon tenia las escamas tan duras que Qysaghanni apenas podia penetrar y eran necesarios varios tajos en el mismo lugar para alcanzar la carne del dragon. Si dificil era llegar a la carne, resultaba casi imposible llegar a un punto vital de su anatomia. La contienda entre bestia y hombre se prolongo mientras en otros distritos las fuerzas se movilizaban. Bulbaiff e Isabella llegaron, con el resto, en el momento mas propicio. Rodrik habia quedado bajo las patas del dragon y la ayuda de los presentes fue necesaria para que pudiera zafarse de la presa. Aprovechando su situacion ventajosa Rodrik escalo por el lomo del dragon y por fin encontro un lugar en el que clavar su cimitarra y acabar con el dragon.

La otra dragona, hija de Garra Afilada, atacaba el puerto mas lejano. Con todos de nuevo reunidos la batalla no pintaba mejor que el enfrentamiento anterior. La bestia azul era una picadora de carne, sus zarpazos hacian a los mas grandes guerreros caer y en poco tiempo daba cuenta de ellos. La tactica debia cambiar y para alivio de todos Isabella estaba alli con su magia de castigo y proteccion. Cada golpe de la dragona era devuelto por la magia que emanaba de la hechicera y se colaba por entre las escamas guiado por la sangre que habia derramado. Los minutos de lucha fueron agonicos, todos los presentes notaban el cansancio, y el tiempo se alargaba y se alargaba, mientras los calambres del cansancio pugnaban por hacerse sentir. Pero Isa consiguio imponer su magia a la fuerza bruta de la dragona, que una vez muerta atrajo algo mucho peor.

Garra Afilada clamaba venganza por la muerte de su hija y hacia un ultimatum a toda Calimport, en dos semanas debian entregar la ciudad o caer bajo el peso de la horda.[/i:0f233f8bfc]

filoscuro

01/12/2010 18:37:59

[i:7fa9430eba]Para Aizha, luchar contra cualquier tipo de enemigo podia ser algo divertido e incluso un deporte. Pero esta batalla se le quedaba más grande que cualquiera de los trajes de Bulbaiff.

Esos lagartos, podian partila en dos con solo mirarla, ella trataba de ocultarse entre cualquier cosa, pero los ojos reptilianos, la hacian imposible de esconder.

El único objetivo que Aizha tenia, eran los clerigos de Tiamat, a esos podia molestarles incluso matarles, pero siempre con cuidado y siendo la mejor aliada de las sombras. Fue contrá uno de estos que la pequeña mediana, disfrutó, por primera vez y se veia útil contra la horda de enemigos que trataba de destruir la ciudad de las arenas.
Gracias a una varita que le dio el Súltan Rodrik, pudo quitarle sus defensas y acercarse y clavar sus kukris en el higado y la femoral del clarigo, no consigió matarlo a la primer, pero al menos, le hizo heridas muy graves, cuando terminó de conjurar, asestó el ultimo golpe que acabó con su vida, pero el conjuro ya estaba lanzado... y Aizha cayó ante la implosión. Volvió a sentir la muerte en ella, pero se estaba acostumbrando a su abrazo...

De repente, la vida, el aire volvío a sus pequeños pulmones.

Cada vez se hacia más dificil que pudiese ayudar, mira a su alrededor y solo veia piernas de lagartos corriendo de un lado a otro, así que se escondió y fue resucitando a los caidos cuando los lagartos se iban alejando.

El asedio duró bastante tiempo, el distrito de la Fé, el Gran Bazar... todos los barrios tenian algun lagarto destrozandolo todo.

Unos ruidos provinientes de los muelles, no dejaba lugar a dudas de que se trataba de algo más serio.

Al llegar, la pequeña mediana vio tal dragón que se quedó paralizada, horrorizada. Era la primera vez en su vida que se estaba tan quieta durante tanto tiempo.
Eso la superaba y no solo en altura... poco podia hacer contra tal dragon, menos mal que estaban por el lugar gente poderosa como Isabella, Rodrik, Bulbaiff entre otros y acabaron con él.

Cuando todo parecia acabado, otro dragón salio de la zona de las naves y almacenes... otra lucha donde Aizha solo pudo contemplar si se le caian gemas de entre las escamas.
Esta vez, la lucha estubo más reñida, pero cayó derrotado.

Al poco, apareció otro dragón aun más grande, era la madre del dragon que habia sido derrotado... y se lo llevó mientras amenazaba a Calim.[/i:7fa9430eba]

puxe

01/12/2010 19:11:26

[i:84dd62e75b]El tiempo se acababa y el semidragón provisto de su arma y escudo se dispuso a buscarlos.

La llamada de la diosa le habia advertido que debia anticiparse a lo que se avecinaba, y el bajo sus instintos se adentro en lo mas profundo del desierto encontrandose finalmente con sus aliados.

Eran cuatro draconianos, con espada y escudo en mano seguidos de un sumo sacerdote.

Le guiaron hasta su lider, y este no dudo un solo instante en aceptar al recién llegado.

Lo ofrecieron una poción que haría que envejeciese aún más y asi para adquirir mas poderes en nombre de la diosa y portarlos con orgullo...

Su próximo objetivo..., Calimport[/i:84dd62e75b]

puxe

01/12/2010 19:34:01

[i:e9ec922376]Y finalmente llegó, todo estaba relativamente tranquilo, él nunca habia visitado ese lugar, era todo oscuro, pero gracias a su habilidad innata podia verlo todo claramente.

Activo el objeto mágico cerca de la entrada, para dar paso a las huestes..[/i:e9ec922376]

Ertos

02/12/2010 01:26:11

[i:cee2102e52]El clerigo, ataviado con las ropas de los Mercenarios del Cuerno Bramante, subio a una colina, con su libro de Shondakul en mano.

Se descubrio, cogio aire y empezo a dar un discurso inspirador, como los que salen en los libros sobre grandes batallas.

-Escuchadme hermanos-Dijo alzando la voz- El mal acecha nuestras tierras, ensombrece nuestros corazones, llena de duda el pensamiento y acalla el espiritu...¡Más!...- Alzó la diestra, bajo la atenta mirada de Aizha y Lady Jadiva, ambos mercenarios tambien y prosiguio su discurso-...No temais, pues el viento hoy me susurra esperanza, ¡Aliento! a quienes se oponen al degenerado culto de Tiamat. Sentid la caricia de la Mano que Ayuda, pues hoy, se me ha encomendado la tarea de velar por las almas de los aqui presentes. Orad al señor del viento, Orad a Shodankul como yo he hecho ya; presente en los caminos, presente en las ciudades comerciales, presente en los corazones de los valientes, y de los habiles. Shondakul esta hoy con nosotros, y nos dara la victoria!.

Y asi, cerrando el libro de golpe, haciendole desencadenar un oportuno conjuro de Plegaria, dio animos a los Soldados que alli se encontraban.

Tras esto, los tres mercenarios bajaron de la colinita, disponiendose a reunirse con el Capitan Bulbaiff y compañia.

A la mañana siguiente el Clerigo partia camino al castillo Spulltzeer bajo ordenes del capitan Bulbaiff, y acompañado de varios voluntarios Calishitas.[/i:cee2102e52]

puxe

04/12/2010 19:38:39

Se ocultaba en aquel lugar tranquilo pero siniestro, siempre con el escudo en mano por si algún atrevido intentaba atacarlo, aunque el lo dudaba, pues a cada paso que daba intimidaba a cualquier mendigo que hubiese por la zona, y este saltaba suplicandole que no le comiesen, Khelthal aún no le interesaba levantar ninguna sospecha.., y esperaba paciente tomando un vino en un pequeño antro...

gatovengador

13/12/2010 15:27:59

El caballero llegó a su habitación del castillo agotado. Se dejo caer sobre la cama con la armadura puesta, apenas tenía fuerzas para quitársela, ni ganas realmente. Al menos volvía a dormir en su habitación.

Berrion había sido recuperado, Vincent estaba muerto, y el dragón había huido. Ahora bien, por la explosión que oyó en la muralla esta no debía de estar en muy buenas condiciones, y el edificio de la guardia por dónde habían entrado estaría inutilizado por el incendio que los siervos de Tiamat habían provocado para quemarles.

Ahora tenía que volver a levantar las defensas por si deidían volver. Si eran derrotados en el sur no dudaba que lo harían. Tambien tenía que asegurar la espada y el escudo de Vincent y.. ahora que se acordaba, había una última cosa que hacer antes de descansar. Dijo que para cuando Berrion volviese a sus manos, Vincent sería juzgado y crucificado en las puertas del castillo. Lo primero ya era imposible, pero lo segundo no. Al fin y al cabo era un hombre de palabra.

Por el camino cogió a dos guardias, y se fue hacia donde aun yacía el cadáver.

Arxaon

13/12/2010 17:30:28

[i:8c39d3d09b]Amamir esperaba unirse a la contienda para observar la verdadera peligrosidad de ese ejército. Si era una fuerza a considerar avisaría a su pueblo, si no dejaría a los humanos a su suerte. Había otros asuntos que atender.

Lo destinaron a un grupo donde apenas conocía a nadie. Le sonaban un paladín del Fénix y Nyrnael. No conocía nada sobre la estrategia acordada, pero tenía claras sus prioridades. Sin embargo, al traspasar aquel portal se encontró junto al grupo dentro de unos pasillos en la torre. Allí no había escapatoria y su plan era imposible de llevar a cabo. Debería abrirse paso por los pasillos junto al grupo hasta llegar a algún lugar abierto.

Tras muchas dificultades llegaron a una posible salida, pero había sido tapiada y los túneles empezaban a llenarse de humo. Finalmente subieron a lo alto de la torre. Al fin aire libre. Allí pararon cuenta de algunos humanos e incluso de un dragón enorme que acabó huyendo.
Amamir observó alrededor, las murallas tenían cañones y había arqueros humanos en ellas. Abatió a unos cuantos, pues poco podían hacer unos humanos frente a la habilidad de la nobleza élfica. Seguramente facilitaría la entrada del otro grupo y una vía de escape.

Finalmente el grupo voló al patio. Unos transformados, otros llevados por un humano transformado en dragón. Amamir bajó por una cuerda que antes había usado una mediana. Ahora estaba en mejor situación, el campo abierto. Era hora de acabar con algún humano más y, cuando la batalla estuviese decantada, volver a informar. [/i:8c39d3d09b]

ArkasLynvail

13/12/2010 18:27:14

[i:17f70acc3c]La batalla había sido cruenta y dura para todos, pero el objetivo estaba cumplido. La bandera de Tiamat ya no ondeaba en las almenas del ducado de Bérrion.

Las pérdidas habían sido enormes; de 100 soldados que fueron a la batalla sobrevivieron quince, de los trescientos cincuenta soldados refugiados de Berrion solo 110 vieron la luz del amanecer y los veinte soldados del Puño Llameante que habían sobrevivido al devastador final de Puerta de Baldur no llegaron a ver un nuevo día.

El ducado volvía a ser reconquistado, más para muchos no había sido un gran día.[/i:17f70acc3c]

Rugrim

13/12/2010 19:18:47

[i:7317807d2e]Laura estaba agotada tras la batalla. A pesar de que su misión era simplemente distraer, no les quedó más remedio que terminar atacando las murallas. Fue gracias a los soldados enviados de Arion que consiguieron tomarlas.

Para cuando el grupo de Laura consiguió llegar al patio interior, apenas quedaban enemigos, salvo unos pocos soldados de élite que no pudieron hacer gran cosa frente a los poderosos guerreros aliados.

Finalmente, el grupo reunido de nuevo, entró en el castillo en busca del traidor de Vincent. Le encontraron en la sala del trono, junto con ese inmenso dragon azul.

Laura intentó evitar la batalla, pero Vincent no quiso escucharla y se lanzó a por los presentes. Algo golpeo a Laura dejándola inconsciente. Cuando recuperó la consciencia, la mayoría estaban en el suelo y Vincent se paseaba por la sala como si fuera suya, pero una vez más, gracias al inmenso guerrero de los mercenarios y a la paladina Nynrael terminaron por acabar con su vida.

Sin embargo no se había acabado todo, no podía descansar aún. Tenía que hacer una última cosa. Debía volver al campamento y dirigir a los civiles y los milicianos de vuelta a sus hogares.

Finalizado todo el trabajo, Laura se desponía a descansar por fín, cuando se le ocurrió una cosa más. Encendió una vela y se dispusó a escribir una carta.[/i:7317807d2e]

filoscuro

13/12/2010 19:58:41

[i:ddc03df0e8]Aizha llegó pronto al refugio de Berrion para esperar a sus compañeros del Cuerno Brameante.
Alli preguntó a Laura y Jarreth cual era la estrategia decidida para actuar, la contestación de Laura dejó a Aizha entrecerrando los ojos varias veces, si no fuese porque le iban a pagar por ello y habia demasiada guardia delante, la hubiese intentado asesinar allí mismo, pero para eso siempre tendría tiempo más adelante, se relajó distrayendose, para ello se fue a reir del guaridia que custodiaba a Girn, que estaba allí maniatado, por algun altercado con un paladín, según Grin, habia discutido con el paladín, para el paladín, Grin le habia atacado. No sabia porque, Aizha creyó más a Grin que lo que pudo decir un sucio y rebuscado paladín, esa gente, para Aizha no eran más que locos dedicados a una causa, que les hacia paranoicos y eso, seguramente fue lo que le pasó a ese paladín, creyó una discusion verbal con Grin, habia sido un ataque físico.

Al tiempo, despues de la reunión que tuvieron los lideres de cada organización llamarón a los demás que participarian.
La idea era entrar unos por unos portales, que les llevarían al interior de las torres de la guardia, donde Vicent, no sabia que estaban allí. Aizha iría en ese grupo, junto a Bullbaiff, Jarreth, Grin y demás, seguramente el Grandullón como Aizha lo llamaba, queria tenerla cerca para controlarla.
El otro grupo, avanzaria por las murallas tratando de entrar cuando los que usarian el portal, tirasen el muro usando cañones que allí estaban o deberian estar.

Jarreth abrió el portal, pero no funcionó, así que se fueron usando el que Nyrnael abrió, uniendose los dos grupos, el de Nyrnaell y el de Jarreth. Paladines y Cuerno bramante, juntos por los pasillos de la torre de la guardia.

Aquello era una ratonera, pasillos estrechos, un caos, no sabian por donde tenian que ir, además se unian las trampas, donde Bullbaiff le pidió a la mediana que las quitase, mas no esperaba que los paladines, fuesen algo... intuitivos y las saltaran, llenando los pasillos de un ambiente cargado por un veneno y quizás algo de acido, pues las heridas que causaba eran graves. Esto hizo que cayesen todos, todo el grupo, ya que los enemigos aprobecharon que estaban heridos para atacar, la sabiduria de Grin haciendose con el conjuro de santuario, pudo ser la salvación para todos, incluso los paladines, que yacian en el suelo sin vida, pero seguramente, ellos jamás reconocerian que Grin, un clerigo que por el simbolo que sacó en el campamento de Berrion, podria ser de Bein, les salvó la vida y fue quizás tambien, porque no decirlo, la clave para que Berrion fuese reconquistado.
Aizha se percató de ello y ahora veia a Grin con otros ojos, él era el que acababa de salvar a todos, él seguramente sería el que consiguió que los paladines y las gentes de Berrion pudiesen volver a su reino a su castillo, a sus casas y sus calles. Para bien o para mal de Grin, Aizha le miraba con otros ojos.

Siguieron avanzando, despues de acabar con los enemigos que les salian al paso, hasta que vieron que habian tapidado una salida. Fuerón por otro pasillo y llegaron a una puerta, donde detrás habia centenares de arqueros y milicianos con sus alabardas esperandolos.
Retrocedieron un poco, Grin convoco a una súcubo, para al menos tratar de distraer a los guardias mientras huian, Aizha convoco a un diablillo con la misma intención, fue entonces cuando la pequeña mediana se percató de que dentro de las celdas, habia ciudadanos de Berrion encerrados. En un acto de buena intención Aizha empezó a abrir la puerta principal de las celdas para poder abrir las otras 4 para liberarlos, mas, Nyrnael, mató al diablillo de Aizha y a la súcubo de Grin.
Ahora si fue tal la ira de Aizha que al ver que todos iban por otro pasillo sin esperar a que Aizha liberase a los presos, solo estando presentes Grin y Keen, echó aceite en las celdas, cerró con los presos dentro y lanzó una antorcha dentro. Si ella no podia tener un diablillo para que le ayudase, ellos, no tendrian gente rescatada.
Grin advirtió a Keen de que mantuviese la boca cerrada y con una sonrisa malvada Aizha se quedo durante unos segundos viendo como los presos gritaban de terror y se aferraban a las celdas esperando a que algo, que no llegó, los liberase de aquel infierno.

Justamente, los pasillos se estaban llenando de humo pues los milicianos y guardias estaban prendiendo fuego a los pasillos para tratar de matarles ahogandolos. Al fin, encontraron una salida, les llevo a lo alto de la torre, una explanada lo suficientemente amplia para luchar con lo que después seria una batalla impresionante contra un Dragón inmenso,se luchó con gran garra y el dragón al final al verse en muy mala situación, huyó.

Los guerreros que venian del refugio estaban llegando a las murallas, necesitaban tirar el muro o abrir las puertas para que pasasen.

La mediana bajó invisible y en santuario al patio usando una cuerda y con la sujeccion de algo más duro que un muro, Bullbaiff.
Una vez abajo, trató de llegar a la puerta, pero los conjuros se vieron mermados, fallaron en el momento en el que se acercaba a la puerta, quizás una zona de disipación. La mediana corrió para salvarse y ganar tiempo, se escondió en las sombras y entró en la herreria, donde encontró a un hechicero de Tiamat, gracias a un antiguo pergamino que le regaló Abd, consiguió que la mano forzuda de Bidgy, lo dejase en el suelo, el tiempo suficiente para que la velocidad de la mediana y sus kukris, lo dejaran con todas las arterias principales del cuerpo cortadas.
Trató de salir, pero, un guardia la vió y entró en la herreria de nuevo, la mediana se escondió de nuevo en las sombras y esperó a que el guardia estuviese más distraido, pues estaba demasiado en alerta como para acercase y hacerle alguna herida mortal, en ese momento entró Grin y los demás.

Aizha estaba agotada, su cuerpo tan pequeño no estaba preparado para ese tipo de combates tan directos, mas despues de haber estado dia y medio dentro del castillo del liche para conseguir la mascará que tenia el liche. Así que se quedó recuperandose en la herrería.[/i:ddc03df0e8]

gatovengador

13/12/2010 23:33:34

Tras dejar a Celdur y a Laura, el caballero se fue directo a por su caballo. Salió a galope tendido del Ducado, dejando atrás la puerta derruida sobre la que se veía el cuerpo inerte y desnudo de Vincent, crucificado sobre los restos de esta. A su lado un cartel ponía: "Este es el precio de la traición a Berrion".

Dirigió su caballo al sur. Aun le quedaba otra palabra por cumplir.

_Kaworu_

14/12/2010 00:21:02

[i:5de0701099]El pequeño pseudodragón regresó a su amo claramente fatigado. Sin duda habia demostrado ser un superviviente nato dados sus escasas fuerzas y recursos.
[/i:5de0701099]
- "Increible,me has sorprendido pequeña lagartija. No pense que fueras a sobrevivir hasta el final e incluso mas que tu supuesto amo."

[i:5de0701099]El familiar se dejó caer en los brazos del hechicero purpura y esbozo una sonrisa al recordar lo que vivió a través de los ojos de aquel pequeño dragon y murmuró una palabras, haciendo evaluación final de lo ocurrido.
[/i:5de0701099]
- "Inmolatus, una espada maldita, Vincent poseido... Bueno, tomaron la ciudad sin mi ayuda, eso esta bien miau..."

[i:5de0701099]El jóven hizo un gesto y desconvocó al pequeño mensajero y regresó sonriente al lugar que él llamaba casa. Poco antes de llegar, se paró y suspiró.
[/i:5de0701099]

-"Vaya Isa, contigo nunca me aburría, mira que acabar los dos asi..."

sharkang

14/12/2010 17:45:31

Llego el dia. Gran parte del ejercito que ocupaba Berrion habia partido hacia el Sur. El campamento del rio Agis rezumaba actividad frenetica.

El plan se definio con presteza.
Laura y el Puño Llameante harian de señuelo.
Mientras dos grupos, uno comandado por Jarreth y el otro por Nyrnael, usarian los marcadores que les llevarian al interior de Berrion. A la posada y a la Torre de la Guardia.

Nyrnael repaso mentalmente su mision. Una vez dentro debia tomar la Torre, desmantelar los cañones que amenazaban el avance de Laura y a ser posible usarlos para abrir brecha en la muralla y dejar paso franco.

La Paladin se movia nerviosa. Pronto se abriria el portal. Pero le preocupaba aun mas ese clerigo del que conocia su negro corazon. No era momento para preguntas, pero no entendia porque iria en el grupo de Jarreth.

Todo se torcio con rapidez. El protal de Laura se abrio, mientras el de Jarreth fallo. No habia tiempo para echarse atras.

- Rapido todos al portal, no hay otra opcion! - grito Nyrnael lanzandose al portal sin demora.

Estaban dentro de la torre de guardia. Debian actuar con rapidez aprovechando la maniobra de distraccion lanzada por Laura.
Pero las fuerzas de Tiamat eran temibles. El gigante Bulbaiff, Sir Leobald y Nyrnael trataron de reducir a los oponentes, pero no tardaron en caer ante la superioridad enemiga.
Largo tiempo yacieron los dos paladines inconscientes, pues no todos los componentes del grupo lamentarian la muerte de los servidores de la Triada. Por fortuna para ellos, no todos pensaban asi.

La conquista de la Torre fue lenta y dificil pero al final pudieron hacerse con el control. Sin embargo los enemigos bloquearon las salidas. Estaban encerrados.

Trataron de encontrar una salida al patio sin exito.
Hallaron a varios prisioneros, pero no estarian mas seguros fuera de sus celdas, por lo que Nyrnael prefirio no liberarlos en ese momento.
No obstante algo llamo la atencion de la Paladin. Una sucubo y un diablillo habian sido convocados por la mediana Aizha y el clerigo Grinhewm. Nyrnael los exhorto a desconvocarlos varias veces. Ante la no respuesta de ambos. Nyrnael acabo con los seres traidos de otro plano. Aizha monto en colera gritando que quemaria vivos a los prisoneros por lo que habia hecho Nyrnael. Mientras Nyrnael corria buscando una salida. Ya habria tiempo de liberarlos y de pedir explicaciones a la insolente mediana.

Desde las almenas de la torre el grupo tenia una posicion de ventaja y acabaron con varios grupos de arqueros y soldados de Tiamat.
La ventaja duro poco cuando Altagos cayo sobre ellos. Su tamaño era descomunal. Aun asi no se amedrentaron. La Paladin ofrecia su escudo aguantando las embestidas del dragon y hundia el Corazon el Justo en las escamas de la bestia, mientras el enorme guerrero Bulbaiff asestaba tremendos mandobles. Leobald ayudaba a Nyrnael sanandola y protegiendola, tomando incluso el relevo cuando la Paladin flaqueaba.

Ante la tactica solidaria del grupo, el dragon huyo con solo un hilo de vida, elevandose en el ultimo momento.

Debian salir de alli. Jarreth se transformo en un dragon para asombro de todos. Subieron sobre su lomo. Grinhewm trato de hacer caer a Nyrnael, que aguanto el empellon. No contento con ello se dedico a insultarla tanto a ela como a Tyr al que servia. No era momento de pedir desagravio, tiempo habria para ello.

Una vez en el patio los enemigos los rodearon. Grupos de guardias negros, milicianos y sacerdotes de Tiamat cargaron contra el mermado grupo. Eran demasiados, sin embargo vendieron cara su piel y pocos servidores del mal quedaron en pie. Todos los componentes del grupo asaltante cayeron excepto el clerigo oscuro Girnhewm que se hallaba protegido por un santuario.
Por fortuna, el grupo de Laura llego en ese preciso momento. Quizas fue la salvacion para los Paladines, pues sus cuerpos sin vida yacian entre pilas de cadaveres y parte del grupo no parecia muy interesado en que sus cuerpos fueran encontrados y devueltos a la vida.

Todos estaban exhaustos al limite de sus fuerzas y recursos. No quedaban pergaminos, pocimas ni musculo. El patio estaba tomado, pero en el castillo esperaban los malnacidos que estaban detras de aquella masacre.

Al llegar al salon del trono Vincent les estaba esperando con el enorme dragon azul Altagos. El traidor y asesino Vincent no escucho a Laura, ni la oferta de Nyrnael de que se entregara para tener un juicio justo. Mando a la bestia contra el grupo, mientras el aprovechaba para atacar por la espalda y derribar a varios. Todos fueron cayendo y aunque Nyrnael uso un santuario para revivirlos, de poco sirvio. Trataron una vez mas de vencerle, pero Vincent obtenia un poder sin limites de la espada a la que llamaba Inmolatus.

Jarreth se habia escondido en una de las salas adyacentes y eso llevo a Vincent a cometer un error, tratando de buscarlo sin preocuparse de lo que dejaba atras. Bulbaiff y Nyrnael habian quedado en la sala del trono, con un minimo hilo de vida. La lenta regeneracion que le proporcionaba su equipo devolvio a la vida a la servidora del Justo.

Observo Nyrnael desde detras de unas cortinas esperando el momento oportuno. Vincent habia usado mucho poder y este no podia ser infinito. Miro hacia Bulbaiff y ambos se lanzaron en un ultimo intento desesperado. La enorme corpulencia del guerrero arrincono a Vincent contra el trono, asestandole terribles mandobles mientras la espada sagrada de la Paladin heria al traidor y disipaba sus efectos magicos.

Un ultimo golpe del gigante guerrero hizo caer pesadamente a Vincent. Su cuerpo sin vida solto la espada maldita.

Bulbaiff tomo la espada, pero Nyrnael le exhorto a dejarla.

- Sueltala, no queremos que te conviertas en el nuevo Vincent. esa espada es peligrosa.

Nyrnael tomo la espada, sin tocarla, envolviendola en una capa, asi como el escudo del traidor. Debian ser analizados y destruidos.

El pensamiento de nyrnael volvia ahora hacia los caidos. El olor a sangre se extendia por el Ducado y una pesada carga se posaba sobre los hombros de Nyrnael.

Mal momento eligio el clerigo de Bane para insultar de nuevo a la Paladin y su hermano de fe Leobald. Ya habia aguantado demasiado.

- Basta! - grito Nyrnael, mientras Grinhewm se dirigia hacia la salida. - Desenvainad!
Viendo que el clerigo llevaba la espada en ristre y el escudo empuñado, se planto delante de el. Esta vez no vacilo ni profirio una nueva advertencia. Las palabras no habian surtido efecto.
Nyrnael golpeo con violencia. Grinhewm encajo el primer golpe y se dirigio a la salida. No iba a irse esta vez. Nyrnael volvio a golpear dejando al clerigo inconsciente.

Tras negociar con Jarreth, acordaron dejarlo en las celdas de Berrion hasta que se celebrara juicio. Lo mismo se haria con la espada y escudo malditos. Sir Leobald se quedaria custodiando al preso y los objetos.

Nyrnael estaba cansada y esta vez no era solo fisicamente. Con los ojos nublados por las lagrimas penso en Jeanna, Nesharay, Penco, Myllerne, Reb, Lomoniak, Althiem, Drazhen...
Los pensamientos oscuros se despejaron un tanto cuando cruzo su mirada llorosa con la de Leobald y vio en los ojos del Paladin algo que siempre la reconfortaba: fe.

Se seco los ojos con el guantelete y subio de nuevo a la torre. Habia que liberar a los prisioneros. Quizas ellos pudiesen echar luz sobre lo acontecido entre aquellos muros. De camino a la torre, paso junto al cadaver del comandante de los Guardias Negros. De un certero tajo desprendio su cabeza del cuello y guardo la cabeza en su mochila.

Dragonslav

27/12/2010 13:39:02

Los astros de 5 colores se alinearon el dia en que Calimport y el resto de Faerun se jugaban todo a una carta, que la pequeña mediana Aizha pudiera robar la llave que redirigia el Portal de la Luna acompañada por Isabella. El resto de los alli reunidos debian parar al ejercito tiamatino, una horda compuesta por semidragones, hombres lagarto y muertos vivientes a la que acompañaban Colmillo Afilado, los dragones mas grandes de la Costa de la Espada y sus crias guardianas.

Rodrik estaba entre aquellos que debian proteger Calimport, su unico consuelo era contar con Sherin y Rick, parte de su nueva familia calishita un hombre y una mujer en los que podia confiar para que no le dejaran morir, pues sabia que era inevitable caer en el combate.

Junto a Rodrik habia viejos conocidos, Bulbaiff, Darrel, Davida y Keen, todos ellos del Cuerno Bramante, Sir Jarreth, posiblemente el siguiente noble de Berrion, el Musar Maza, de la Guardia Divina, Marduk, de la Escuela de Magia, y gente a la que no conocia, uno de ellos resulto ser Tabris Haydee.

El combate fue duro, se cumplieron ciertos objetivos y los distritos de Palacio y de los Muelles no sufrieron envites por parte de las hordas. Otros factores fueron de la peor forma posible, la mascara que debia crear el panico entre los dragones solo funcionaba a corta distancia y contra los dragones mas pequeños que huian para atacar en otro lado, agravando el problema al multiplicar los focos de contienda. Rodrik penso en el credito y el tiempo gastado en conseguir la mascara y lo futil que habia sido su busqueda.

La batalla se alargaba y los minutos parecian horas, la alineacion planetaria parecia que nunca acabaria. No entrare en detalles de lo agotador y frustrante que resulto, para todos los alli reunidos, la lucha con los grandes dragones. La intervencion de un dragon dorado disfrazado de petimetre solo encendio la ira en el corazon del Sabalad, ¿Por que demonios no combatian en tierra donde podrian rematar a la bestia con la ayuda del dragon? Como siempre los acontecimientos arrastraban a quienes participaban en ellos sin la mas minima compasion.

Al despuntar el alba las calles de Calimport estaban cubiertas por centenares, puede que miles, de cadaveres y muchas estructuras habian caido a causa del ataque de los dragones mas pequeños.
Rodrik habia conseguido aguantarse en el lomo de Colmillo Afilado mientras alzaba el vuelo y huia, busco un lugar donde rematar a la bestia escamosa pero era imposible. No podia dejarla escapar, la dragona debia caer y por ello en un acto casi suicida se arrojo de un salto del lomo de la criatura y le desgarro completamente un ala. Para su sorpresa aquella cosa descomunal seguia volando sin una membrana que sustentara una de sus alas.

El guerrero calishita dio gracias a los dioses por haber hecho la arena mas blanda que la tierra, rodo por una duna al tocar el suelo y la unica consecuencia de la caida fueron un par de fracturas menores en una de sus piernas. Se reunio con el grupo que seguia desde tierra a la dragona y comenzaron su busqueda. No habia ni rastro de ella, Colmillo Afilado habia escapado y un sentimiento de vacio y futilidad se arraigaron en la mente de Rodrik.
Aparecieron entonces Aizha e Isabella, habian conseguido sus objetivos y tambien habian acometido terribles batallas. Las palabras de animo y las felicitaciones no alejaban las sombras de la mente de Rodrik, puede que Calimport hubiera salido mucho mejor parada de lo que todos esperaban y la amenaza a corto plazo de los planes de Balagos o Colmillo Afilado habia sido neutralizada. Pero una cosa estaba clara para el defensor de Calimport, habia tenido la vida de esa dragona en sus manos e incomprensiblemente ambos seguian con vida.

gatovengador

27/12/2010 14:32:48

El caballero apareció con un destello de luz en sus habitaciones del castillo. Se sentó en la cama y lentamente se empezó a quitar la armadura, mellada y ensuciada. Su palabra habia sido cumplida, había defendido la ciudad del desierto y las hordas habían sido repelidas. No sabía si el sultán había sobrevivido, si había conseguido matar a la sierpe, o si esta le había devorado, pero en el fondo poco le importaba. Los planes de una enemiga de su señor habían sido frustrados, eso era lo que contaba.

Se tumbo en la cama y durmió, profundamente y sin sueños. Cuando despertase tenía un ducado que arreglar.

_Kaworu_

27/12/2010 16:16:06

Lo que había sido en principio una visita de incognito a Caliport para ver como estaban sus antiguos compañeros, acabó terminando en la batalla final contra los dragones y petardos de Tiamat.

"Vamonos antes de que empiecen con las preguntas, las manos verdes y los conjuros de dominacion..." [i:26cf581f38]pensó el hechicero mientras se alejaba del grupo.
Y así, del mismo modo que llegó, él se marchó sin hacer ruido y con disimulo, aprovechando que el grupo celebraba haber recuperado aquella llave lunatica y su merecida victoria.

En cualquier caso las huestes majaderas habian retrocedido y solo quedaba con vida esa dragona sobrealimentada con complejo de Qysara...

Había sido divertido, por algo le encantaba meterse en lios ,quizas regresaría para acabar el trabajo... pero habia que descansar y debía verla no fuera que estuviese preocupada..(que probablemente ni le hubiera echado en falta esos dos días)[/i:26cf581f38]

filoscuro

27/12/2010 18:01:32

Hay dias que al levantarte, sabes que va a ser un buen o un mal día, esa era la sensación que tenia Aizha.

Como cada mañana, después de levantarse, se dió un buen baño. En aquella bañera de mármol negro, unos pensamientos recorrian la cabeza de la mediana, sabía que el día de los astros estaba próximo. Isabella, le comentó que ese día ella tendría una parte crucial en la resolución de los acontecimientos. Mas para ella, solo sería una prueba de su capacidad. En ningún momento, pensó que haría despues de conseguir su objetivo. Lo unicó que pensaba era en los beneficios que conseguiría si lo hacia a la perfección.

Durante toda la mañana, se entrenó por el camino de Thezyr, robando monedas a viandantes, a mercaderes o aventureros, cualquiera que pudiese ser objetivo de un hurto, lo sufría.

Al mediodía se refugió en su casa, como siempre, tenia las ventanas atrancadas por dentro, en su casa, no se conocía la luz de la mañana, siempre estaba a oscuras y esta vez tenía un motivo más que el simple echo de evitar que le entraran. Queria acostumbrarse a la oscuridad que tendría en Muzhad, donde debía robar aquella llave que Sogalab llevaría junto a él.

Al atardecer marcó el pergamino de palabra de regreso en la casa de Isabella del distrito del palacio, según le comentó, era el sitio más seguro para refugiarse. La gente se reunía en el oasis, esperando que llegara el momento, allí conocío a un hombre de pelo canoso, Pyrit. Quien más adelante, sus palabras, darian a la mediana la fuerza de voluntad que le faltaba.
El ejercito se estaba acercando y partío junto a la hechicera al Muzhad.

La oscuridad cubria aquel lugar bajo Calimport, los ojos de la mediana acostumbrada a la oscuridad, no era suficiente para poder ver lo que ella pretendia.

Pasó el tiempo y Sogalab no aparecía, Aizha estaba nerviosa, habia estado entrenando bajo oscuridad y en los caminos, no queria fallar, por primera vez desde que empezó el asedio se sentía útil, sabía perfectamente que no podia luchar contra esos seres, su tamaño y su entrenamiento eran nulos contra ellos, pero hacer algo que es ¿innato en los medianos? eso si que podia hacerlo. Claro que sí.

Sogalab aparecío, frente al templo donde el portal le esperaba, Isabella, hizó un gesto a Aizha y está sin pensarlo, usó un pergamino para parar el tiempo, lo suficiente para registrar rápidamente a Sogalab, sin exito, su corazón le dió un vuelco y palpitaba de tal manera que parecia que iba a explotarle.

Sogalab, la miró y la aprisionó con una de esas manos, pero para su sorpresa, no la mató, queria hablar. Pero le latía tanto el corazón que escuchaba sus latidos y no a Sogalab. Isabella, hablaba con él, el conjuró expiró e Isabella le lanzó el mismo a él, Aizha aprobechó para buscar la llave, la notó, en su bolsillo derecho, ahí estaba la llave, pero el conjuro se evaporó, así que se echo hacia atrás, detrás de él esperando una oportunidad para poder actuar.

Isabella volvió a hablar, la mediana no entendia porque no atacaba y las mataba. En un momento de descuido, volvío a lanzar el pergamino de parar el tiempo... metió la mano en su bolsillo, cogió la llave y rápidamente se teleportó.

Aparecío en la casa de Isabella, rápidamente, sigió el consejo de Isabella y volvió a hacer otra marca, esta vez fuera de la casa, por si aparecía alli, poder salir e ir al palacio.

Tenia la llave aferrada contra su pecho y una espada en la otra, estaba muy nerviosa, no sabía que iba a hacer no le dijeron que tenia que hacer con la llave. Así que esperó a ver que pasaba.

Escuchaba las batallas en las calles de Calimport, gente gritando, sonidos de espadas y de rugidos de dragón.
Escondida en la casa, sin apenas moverse, sus nervios eran enormes, estaban causandole secuelas, escuchaba cosas que no existian, se alarmaba con cualquier sombra de la estancia.

De pronto una voz en su mente, era de la hechicera...

"Aizha, ven vamos a darle la llave a Sogalab, tiene sentido lo que me ha contado."

La mediana se quedó dudando, ¿porque iba de pronto a quererle dar la llave a ese ser? seguramente estaria hechizada o amenazada por él. Trató de no hacer caso.
Al poco, esos sonidos que escuchaba en su mente, parecia que ahora si eran reales, llamaban a la puerta.

No abrío y se escondío mejor, escuchó como se forzaba la cerradura y unos pasos de botas pesadas se podian escuchar pasillo adelante, muy cerca, escuchó una puerta y la segunda, era donde estaba ella.
No quiso ni ver quien era, se guardó la llave colgada en su cuello y el intruso, habló.

Su voz le sonaba, la habia escuchado antes... era el hombre de pelo canoso.

En su charla, aquel hombre, dijo cosas que la mediana entendió como si de un dragon se tratase aquel hombre, y le dijó que su señor no podia meterse directamente en el asunto, confió en que la mediana, haria lo correcto y que su valentía era indiscutible. Despues se fué.

Aizha se levantó de su escondite y salío raudaz al Muzhad.

En las alcantarillas se topó con Isabella, a la que le contó lo que pretendia Balagos, queria matar a Tiamat, para así ascender a Deidad.

Después el plan fue el siguiente, trataria Aizha de distraer a Balagos mientras que Isabella usaria la llave para dirigir el portal. Un plan algo suicida para la mediana, pero... ¿acaso los medianos no les gusta jugarsela en estas cosas?

Dentro del templo, vió a Sogalab, le preguntó por Isabella y que no le daría la llave hasta verla. De nuevo, Sogalab, le lanzó una de esas manos y la ató, sacandola fuera del templo, a sabiendas que la mediana le dijo que habia escondido la llave.
Sogalab, pidió a la mediana que le llevase a la llave y esta obedecío, le entretuvo dando vueltas por el Muzhad, alegando que con tanta oscuridad, se desorientaba. Cuando se percató que Sogalab ya empezaba a cansarse y que Isabella estaria dentro del templo, le dijó en que casa estaria la llave.

La casa, derrumbada, bajo los escombros estaba la llave y tratando de mantener el tipo, no dejó de mirar a los escombros para que no se le notara mucho su nerviosismo. Sogalab, desató a la mediana para que cogiese la llave, está vio una oportunidad de ganar mucho más tiempo y empezó a quitar piedrecitas pequeñas de los escombros, alegando que si quitaba unas cualquiera se derrumbaria y así perderian la llave. Sogalab, se impacientaba.

Al final, en la conversación que mantenian, a la mediana, se le escapó un comentario sobre lo de que queria ser Dios. Esto lo alarmó, preguntandole por la hechicera, la mediana negó todo conocimiento de donde se encontraba.

Sogalab, clavó su espada en su abdomen. Mientras Aizha se miraba la herida y la sangre de su cuerpo brotar, supo que al menos moriria habiendo consegido su objetivo, cayó al suelo y perdió la vida, junto a aquella casa.


Abrió los ojos y se vió en una escoba volando junto con Isabella... ¿como habia llegado allí? Estaba en el templo de los vampiros, allí estaba Soglab, y tres hombres más discutian entre ellos y uno lanzó una varita contra Sogalab y desapareció.

Empezó lo que seria una batalla entre los miembros de Tiamat y los vampiros, mientras que uno de los vampiros usaba la llave, que al parecer le dió Isabella.

Aizha ayudó lanzando con su arco flechas mortiferas a los puntos vitales de uno de los hechiceros de Tiamat. Por suerte, tenia defensas contra magia, no contra flechas.

No duró mucho el combate, por suerte.

Como recompensa, la vampiresa ofreció a Isabella, a Deivid, algunos dedos de este y la posibilidad de ver el portal.
Isabella pidió a la vampiresa que la mediana tambien lo viera, ya que sin ella, no podian haberlo conseguido, y así fue, consiguió ver el famoso portal de marmol verde.


Aizha, se sentía como una heroina, queria una estatua de ella en Calim.

ArkasLynvail

04/01/2011 22:45:22

[color=darkblue:f0b4d06a74][size=24:f0b4d06a74]Capítulo final. El vuelo de una dragona[/size:f0b4d06a74][/color:f0b4d06a74]


[i:f0b4d06a74]
Con el ala desgarrada la dragona aleteo con fuerzas con la esperanza de alargar la caída lo suficiente para activar la magia del colgante que tenía aferrado en una de sus garras.
Hacía mucho tiempo, Shun VII ya la había debilitado sus alas enormemente hacía siglos y por supuesto como dragona milenaria no iba a abandonar el placer y comodidad que le proporcionaba el elevarse por encima de los suelos.

Entre su única ala y la magia del colgante avanzó hasta Dallabad, algo que hubiera podido hacer planeando de haber tenido las dos alas utilizables. Colmillo Afilado escondió su forma reptiliana entre las rocas mientras su cuerpo empezaba a reducirse y a sus escapas desaparecer. En cuestión de segundos su forma, pasó de un enorme y gigante dragón a una bella mujer de finas sedas azules.
Como muda muestra de la batalla había en su fina piel pequeños cortes y sus ropas estaban desgarradas, pero esto a ella no le importó, se adentró en las profundas cuevas que hacía tiempo habían sido habitadas por los beduinos del desierto y se paró en seco, justo delante del lago que había en aquella cueva. Metió con delicadeza su pie derecho y lo precedió todo el cuerpo, hasta quedar sumergida totalmente, no la preocupaba ese estado entre su magia y sus aptitudes físicas podría aguantar horas allí sino días y pronto sus heridas cicatrizarían en cuanto sus objetos mágicos volvieran a recargarse.
Pero no olvidaría ninguna herida, ninguna cicatriz y ninguna cara de aquellos que habían participado en su derrota.

Esperó, paciente en las profundidades del lago hasta que todo hubiera pasado, entonces buscaría una nueva guarida. Este pensamiento volvió a irritarla, y las aguas del lago se agitaron temblorosas[/i:f0b4d06a74]

ArkasLynvail

04/01/2011 23:20:03

[size=24:2407bcb1fe][color=darkblue:2407bcb1fe]Epílogo. El Oculto [/color:2407bcb1fe][/size:2407bcb1fe]



La brillante bola de cristal, continuó girando y girando para su dueño, impulsado por los débiles movimientos de una mano esquelética.
Entonces unos pasos que se repetían de pared en pared por las amplias galerías de aquellas antiquísimas ruinas le anunciaban la llegada de sus invitados.

La femenina silueta caminaba por el empedrado suelo con aire despreocupado, todo lo que su mente era capaz de esforzarse en aparentar pues, en su fuero interno temía más el encuentro con aquella criatura que su reciente enfrentamiento con una gran sierpe roja.
Levantó la mirada hacia la esfera brillante, y entrecerró sus ojos carmesíes discerniendo el bulto sombrío que rodeaba aquella esfera cristalina.

La criatura que estaba sobre ella no era más que un amasijo de huesos viejos, de color amarillento y desgastado, sobre esos huesos colgaban numerosas hileras de telas rajadas y desgastadas que antiguamente pertenecieron a la corte de un poderoso imperio. Y no pudo más que aclararse el nudo de la garganta que le surgió cuando sus ojos se cruzaron con aquellas cuencas vacías que se perdían en el interior de la calavera.

Una voz que no procedía de ninguna garganta, carne o músculo resonó en su cabeza fuerte, autoritaria y seca. La voz vino acompañada por un cúmulo de movimientos en los huesos que reposaban sobre el trono de las ruinas.
Estos se movieron al unísono, recomponiéndose y ajustándose con milimétrico control hasta que el cuerpo se erguía en su asiento y observaba a la vampira con unas cuencas que ahora irradiaban una luz esmeralda desde su interior.

[color=darkblue:2407bcb1fe]- Shyressa...has venido, al fin has venido. ¿Pero cómo iba a ser sino? - Divagó aquella voz que venía de ningún sitio y de todos a la vez, que hablaba a la vampira con excesiva cercanía.
- Por supuesto mi señor, os he traído la llave como os prometí - Dijo mientras avanzaba cogiéndose la falda del vestido con una mano y le entregaba una vieja llave con la otra.

Shyressa se paralizó cuando los esqueléticos dedos de su amo rozaron su mano para alcanzar la llave. Cuando pudo levantar la vista vio al liche observando la llave como si de una bella joya se tratase.

[color=darkblue:2407bcb1fe]- ¿Y activaste el portal? - Dijo finalmente, aún mirando la llave que tenía entre sus marchitas manos.
- Así es, hice exactamente lo que me pidió y como me pidió. Supo deducir muy bien qué haría esa mujer y esos hombres - Alagó al liche, que no hizo ningún gesto ante su comentario.
[color=darkblue:2407bcb1fe]- ¿Estaba cuando activaste el portal?
- No, no estaba. Nadie excepto yo vio nada más.
[color=darkblue:2407bcb1fe]Y para que veas que sé recompensar los buenos trabajos aquí tienes lo que anhelabas.

El liche desenrolló un colgante haciéndolo colgar por una de sus finas muñecas y tendió el brazo hacia la vampira quien abrió de par en par sus ojos al verlo.

[color=darkblue:2407bcb1fe]- Con esto, no debería ser demasiado difícil volver a estar con ese amado tuyo.

La vampira cogió rápidamente el colgante y lo estrechó en su puño, mientras entrecerraba los ojos por el tono del liche.

[color=darkblue:2407bcb1fe]- Ahora márchate, he de atender muchas otras cosas, como este presente que me has traído.

La vampira escuchó esas palabras como las más agradables que había pronunciado esa carcasa de muerte y giró sobre sus talones, con intención de alargar la distancia que les separaba uno del otro y mientras sonreía ante la posibilidad que se le había abierto en su camino.

Atrás, el liche continuaba girando la bola de cristal, divagando sobre su próxima tarea y las piezas que formarían el puzzle esta vez.