Ilinoth

01/06/2008 00:42:48

*Bajo la luz de una vela, un bardo anónimo, se esmera por escribir con caligrafía insigne una historia que aún recuerda y resuena en su cabeza.*




Memnom, enclave calishita de comerciantes, ladrones ,mendigos y buscavidas.Aqui empiezan y terminan estos relatos.





Sólo tenía 4 años cuando después de pronunciar unas palabras que ni sabía leer y mover sus pequeñas manos aleatoriamente, hizo estallar de risa a su padre de una forma tan desmesurada, que permaneció horas y horas incapacitado para hacer cualquier cosa; no podía frenar de ningún modo ese contagioso modo de expresar la felicidad ni emprender ningún tipo de acción con resultado fructífero. Con sólo 4 años de edad, había conjurado el encantamiento , Terribles carcajadas de Tasha.
Sortilegio que el mismo Elminster, archiconocido teurgo de Faerun, empleaba entonces para convencer al vigilate arcano Dhaerivus, cuando trataba de acceder con Storm Manodeplata, poetisa del Valle de las Sombras, a la Gran Feria de los Magos. Pero eso es otra historia.

Desde aquello, el padre del pequeño Mathander cogió tanto cariño a su poderoso bástago y lo mimaba de tal forma, que con el tiempo y como sería obvio, ambos acabaron siendo inseparables como uña y carne lo hacen, quizá por amor paternal, o quizá no, en cualquier caso, de algo esta seguro este escriba, y esque, ningún padre hubiese querido tener a una criatura asi en su contra.

Pasaron, años, harptos y dekhanas, y en mes de Mirtul, cuando en los Picos de las Nubes el poder calorífico del sol funde el hielo y el agua inunda parte de las aldeas cercanas, en Memnom, concretamente en el seno familiar de Mathander, ocurrió algo terrible. Un acontencimiento que sacudió los cimientos de su más férreo corazón.

Su padre había sido asesinado.

Varios mendigos a los que vió, aseberaron haber visto a Artemis Entreri con unas espadas cortas enrojecidas en mano. Había pagado gustosamente por sus testimonios a esos muertos de hambre, pero ... quien creería a un vagabundo?

Investigando, decidió recorrer rápidamente Calishman.En un més, había hecho sufiencientes contactos cómo para encontrar un testimonio fiable del paradero de Artemis Entreri.Pronto un comerciante de Puerto Calim, le aseguró haberlo visto con toda seguridad en la Joya de Calimshan.

Y allí se dirigió, en busca de información. Pero...¿ Se atrevería a dirigirse a alguién con tal fama ? Estaba claro que si lo encontraba, una palabra equivocada desencadenaría un final trágico.
Quizá un rayo de esperaza trajera a Calimshan a su archienemigo Drizzt Du' Orden, quien sabe?

Tymora jugaba un rol especial en todos estos acotecimientos.

¿Vengaría a su padre? o ¿rechazaría esa imposible venganza?


Será algo que os contaré en mi próximo relato.

*termina concluyendo el bardo*


//Se aceptan críticas, hacía mucho que no escribia y estoy un poco perdío.
:wink:
Un abrazo.