Andunie

25/08/2010 14:09:11

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El aire cargado con el perfume de las flores de la pradera se mezclaba con el olor a sangre y entrañas de los cuerpos desparramados en ella como si se volcase un cuenco con fruta y esta se desparramara por la mesa sin orden ni control.
Docenas de cuerpos mutilados de mil formas, algunos con las cabezas decapitadas y otros con flechas ensartadas en ellas como aceitunas sin hueso atravesadas por palillos poblaban el lugar.
Jinetes con sus monturas mutiladas descansaban en la hierba para siempre donde la presencia de la Muerte era visible en ese lugar,los muertos no se podian contar,tras esa pradera donde el combate fue uno delos puntos mas sangrientos la rodeaba un mar de cuerpos en igual estado que los de la pradera.

Las voces de los moribundos no molestaban a las aves de carroña ocupadas en el gran festin que les ofrecia el hombre, los ojos faciles de arrancar y sabrosos eran un plato exquisito para el paladar de un ave carroñera junto a las entrañas de facil acceso si el vientre estaba abierto mostrando sus valiosos manjares.
El plato pricipal y de muy dificil acceso eran los sesos que en algunos casos gracias a las armas del hombre que lo desparramaban por el suelo como si fueran migas de pan facilitaban su degustación.
Mientras eso sucedia entre esos despojos humanos se vislumbraba la figura de un hombre portando una armadura y como arma una maza de armas de aspecto nada amigable,
murmurando para si mismo ese hombre se lamentaba del resultado final de la batalla la cual le imposibilitaba realizar su trabajo, tampoco veia sentido resucitar a esos inutiles que habian desperdiciado su vida tan facilmente sin pensar en las conseucencias.

El botin de guerra era cuantioso para el chatarrero o el ladron de armas si estas estaban en buen estado o los rapiñadores de posesiones personales de los caidos.
Esa calaña como gusanos en un cadaver putrefacto se contaban con los dedos porque algunos caian al enfrentarse entre si por el botin.
Todo eso lo veia ese hombre y sonreia al ver la realidad del hombre, un ser corrupto, desleal ante la menor oportunidad,cruel y cobarde.
Que triste destino les deparara el futuro a la humanidad si no saben a que temerle, esas palabras rondaban por su mente mientras atravesaba ese campo de batalla.

Andunie

28/08/2010 12:13:43

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Las pustulas de pus y el olor a carne putrefacta eran el resultado de una herida mal curada sumandolo a una fiebre que estaba devorando la vida de ese soldado durante tres días, cuando una figura de un hombre entro en la tienda donde yacia ese moribundo ya era media noche,las antorchas iluminaban pobremente el interior de la tienda pero eso no le retrocedió y tras murmurar unas palabras extrañas se hizo la luz dentro de la tienda iluminando la camilla y al moribundo.

Tras insepccionar la herida y tomar unas muestras de la infección y guardarla en uno de los bolsillos de su cinturon,de uno de ellos saco un pequeño frasco de color verde junto a unas vendas con su mano derecha desnuda la situo sobre la herida sin tocarla y tras concentrarse varios segundos y murmurando palabras extrañas el olor a carne podrida y las pustulas de pus habian
desaparecido mostrando la carne viva.

Usando el frasco verde en los agujeros y partes sin carne y recitando largas frases de oración y concentrado en ello el ungüento del frasco verde hacia su trabajo mientras los agujeros se rellenaban de carne viva y la carne que faltaba se regeneraba, tras realizar el trabajo y vendar al soldado salió de la tienda y se sento en la tierra apoyado en un barril de agua del cual antes de sentarse usando un cubo alivio su garganta tras el enorme esfuerzo realizado. Tras descansar un rato hasta que el día amaneció se levanto y siguió su camino.

Andunie

28/08/2010 15:53:07

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A la vera del camino habiá un curioso árbol que tenia un peculiar fruto,las gentes del lugar y las que caminaban de paso intentaban evitar pasar cerca de el cuando cogian ese camino no por su belleza sino por dos motivos el primero era ver el árbol y el segundo era oler su fruto. Esos rumores alcanzaron los oidos de un hombre que bebia de una copa un vino suave en una taberna del camino, tras recabar la información necesaria sus botas de cuero y acero se pusieron en camino habia ese famoso árbol.

Tras una jornada a pie siguiendo las indicaciónes recopiladas al anochecer llego al lugar que tantos rumores había creado, como ya era tarde acampo a la vera del camino al lado del árbol y encendio una hoguera con ramas caidas y hierba seca. El fuego fue iluminando cada vez más el lugar al ir consumiendo con avaricia las ramas y la hierba seca como combustible la luz ya era lo suficiente brillante para iluminar el árbol mostrando su fruto
colgado con cuerdas.

No habia distinción de edad o sexo para ese arbol, hombres, mujeres y niños colgados con sogas poblaban las ramas de ese robusto arbol, algunos de ellos demasiado tiempo mostrando sus huesos blancos otros mutilados vilmente posiblemente despues de muertos con suerte, algunos habian sufrido el hambre de las aves de rapiña al faltar uno o dos de los ojos. El fruto que buscaba ese hombre no estaba colgando en las ramas sino en el suelo, eran los fluidos que soltaban los cuerpos en descomposición. Con la ayuda de un frasco fue tomando muestras durante la noche cuando el olor era menos penetrante. Al amanecer y con las suficientes muestras recogidas y etiquetadas y comenzando a calentar el lugar y el olor a apoderarse del lugar se alejo del lugar siguiendo el camino hacia una dirección y destino desconocidos.

Andunie

28/08/2010 16:16:35

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En una tierra seca y inospita existia un pueblo junto al mar, antaño floreciente pero en aquel entonces bajo la maldición de una plaga, esa plaga la sufrian en sus carnes los pobres y desgraciados habitantes del lugar, un día cuando el sol estaba en lo más alto y sus rayos toruraban al ingenuo que caminase bajo el sin la protección de un sombrero apareció del norte un hombre portando una armadura y una maza de armas.

Al aproximarse al lugar sus ojos observaron los cuerpos sin enterrar de las gentes del lugar que estaban apilados como basura en monticulos y al lado de ellos madera apilada para quemar algo,sonrio al ver eso y siguio hasta llegar a las empalizadas que protegian el pueblo frente a un enemigo desconocido o conocido.
Algunas casas parecian abandonadas hace mucho, otras quemadas hasta los cimientos dejando como vestigios las piedras.

Al ir entrando dentro del pueblo de las casas que parecian abandonadas aparecieron rostros que comenzaron a salir de ellas y de las otras casas, cuando el hombre llego a la plaza del pueblo un ejercito caminaba a sus espaldas,sus rotros deformes por la enfermedad le miraban y este sin inmutarse se giro para verlos directamente enfrentandose a la enfermedad misma, de sus brazos y su boca surgieron gestos y palabras que traspasaron los corazones de esas gentes, el discurso duro su tiempo pero dio resultado, esas pobres gentes se arodillaron y comenzaron a rezar y suplicar , mientras que el oro y las joyas llegaban al misterioso hombre este recitaba ceremonias mágicas alzando la maza al cielo y con la otra realizando gestos ceremoniales, la fuerza que emanaba era muy poderosa al canalizar directamente la fuerza de su deidad, las caras y partes del cuerpo deformes de los ciudadanos comenzaron a volver a la normalidad.

Ese recien llegado fue alabado como si de una deidad se tratara pero este ni se inmuto y solo pidio un lugar para descansar ya que tras realizar las ceremonias anteriores estaba exausto y necesitaba reposo. Con una bolsa con una buena cantidad de oro y joyas y completamente descansado abandono el pueblo sin antes hablar a todo el pueblo sobre ciertas cosas que tenian que saber y respetar.