Rivelle

 11/11/2012 18:11:09

En el bosque siempre se sentía mucho mas relajado. Alli no habia gente que le mirara con desprecio o miedo, incluso cuando no era más que un niño, ni que le llamara monstruo o lindezas parecidas. Alli solo habia animales, e incluso parecia que estos se iban acostumbrando a supresencia.
Con frecuencia llegaba del bosque manchado de hierba o de tierra, o con pequeños desgarrones en la ropa de trepar a los arboles, pero su tio ya lo habia dejado por imposible. Lo unico que le pedia era que se lavara y zurciera el mismo la ropa. Siempre decia que una era responsable de sus actos y si por hacer el tonto estropeaba la ropa era su deber adecentarla.

Cada vez tenia menos tiempo libre ya que a medida que iba creciendo pasaba mas tienpo en la tienda de su tio ayudandole. Pero sino antes, al menos por las noches siempre habia algo de tiempo para descolgarse desde la ventana al tejado de la casa de al lado y salir a las calles de Neverwinter.

Rivelle

 14/11/2012 12:48:24

El puñetado de Jake "el gordo" le habia hecho ver las estrellas. La cabeza todavia le daba vueltas cuando se levantó.
Paul estaba a su lado mirandole sonriendo. Eso te pasa por ponerte nervioso - le dijo.
¿Que?
Digo que eso te pasa por ponerte nervioso. Eres mucho mas rapido que Paul, pero esta claro que no tan fuerte. No puedes limitarte a intercambiar golpes con él o algun día te hara daño de verdad.
Miro a Paul, un tipo fuerte pero no demasiado grande, al que habia visto sacar de la taberna a tipos el doble de grandes que él. Algunos por las buenas y otros no tanto.
Si quieres yo podría enseñarte a pelear.
Ahora el que sonreía ampliamente era Bulen, mostrando los puntiagudos dientes que habían una vez más provocado una pelea.

No fue la última pelea que perdió, pero si el día en que su suerte en los muelles de Neverwinter empezó a cambiar.

Rivelle

 27/11/2012 21:11:03

Apenas recordaba el tiempo que pasó interno en el orfanato, era muy pequeño cuando su tío lo saco de allí. El fue uno de los pocos afortunados de los que al final un familiar se pudo hacer cargo. Su tío había pasado una larga temporada fuera de la ciudad, pero tan pronto regresó fue a buscarle.
Más tarde cuando creció un poco y le empezó preguntar acerca de su padre la respuesta obtenida era siempre la misma, tu madre era mi hermana y eso es lo único que importa. No por ello dejo de tratar de enterarse por su cuenta, pero todo lo que consiguió averiguar fueron diversos rumores, y ninguno parecía tener mucho fundamento o ninguna forma de demostrarse.
Su tío no tenía hijos. Desde el primer momento le trato como si lo fuera y le educo para que a la larga se hiciera cargo del negocio familiar. Su abuelo había sido comerciante, y su tío y su madre heredaron el negocio, por lo que siempre le decía que era su responsabilidad el continuar la saga.
Para ello desde pequeño le mandaba todos los días a la escuela, para que aprendiera a leer y a escribir, y el mismo a su vez le enseñaba cosas en su casa, o le contaba historias de sus viajes y de los grandes negocios, o no tanto, que había hecho a lo largo de su vida.
No era de los comerciantes mas ricos ni de los mas pobres. Tenia una vida acomodada, pero tampoco es que vivieran en un palacio. A veces hacia grandes negocios y otros no tanto. A su tío no le importaba sacarle hasta la ultima moneda a los mas ricos, pero siempre estaba dispuesto a reducir sus beneficios con los que no lo eran tanto. Para su tío el hacer negocios en si era lo importante, el conseguir llevar una negociación difícil a buen termino era lo que le producía satisfacción, y no tanto el beneficio en si.

En la escuela no tenia demasiados amigos, la mayoría eran hijos de nobles y le miraban por encima del hombro o le trataban con desprecio debido a su origen. Aún así había alguna excepción. Había un par de ellos que en la escuela no le hacian demasiado caso, pero para disimular. Con frecuencia se veían en las calles lejos de ojos curiosos. Los 2 personajes en cuestión eran Martín y Anabel, hermanos e hijos de uno de la casa noble de bastante importancia en Neverwinter.
Muchas veces se juntaba también con sus antiguos compañeros del orfanato. Con algunos de ellos se llevo bien desde el principio, les daba igual que o quien fuera, sino que valoraban como era Bulen, y con otros le llevo tiempo pero al final se hicieron grandes amigos.
Uno de estos era Jake "el gordo". Jake siempre fue un niño grande y con los años se convirtió en un gigante, al menos para los estándares humanos. Era el típico al que todos los niños en el orfanato temían. Las peleas entre Bulen y Jake eran bastante frecuentes, aunque normalmente no demasiado graves. Una de las peores fue en la que se pelearon detrás de la taberna en la que trabajaba Paul, y que le costo a Jake una nariz sangrante y a Bulen un labio partido y un ojo negro durante una semana. Despues de que Paul le empezara a enseñar a pelear hubo otra pelea con Jake en que esta vez Bulen salio ileso y Jake acabo bastante magullado. Desde ese día Jake empezó a tratarle con más respeto. Poco tiempo más tarde Bulen ayudo a Jake a esquivar aun tendero airado que trataba de recuperar un saco de naranjas, y desde ese día fueron grandes amigos.