IRyD

03/06/2008 15:55:08

[i:17170ac4ec]La patrulla drow, compuesta por miembros de la casa Agrach Dyrr, acompañados por drows mercenarios, y guiada por la sacerdotisa Ynrae'Mallyn, partieron de Menzoberranzan con un objetivo claro: descubrir la causa de la desaparición de la magia.

Con los pocos datos que disponían el punto de inicio era sencillo, la cueva de los cangrejos, donde tuvo lugar el primer encuentro con duergars afectado por este mal. Al no encontrar aqui nada, el siguiente paso fueron las minas duergar. Tras acabar con una escasa oposición por parte de los enanos grises, se percataron que todos presentaban estraños sintomas. Confusión, enajenación, hemorragias, alienación y ausencia de sensibilidad. Al final de las minas, encontraron la primera pista. Consiguieron capturar a un enano vivo. Sus palabras eran confusas, pero sacaron algo en claro, esos estupidos enanos habían desenterrado Algo. Con la información aportada por el enano Ym'Ulversil dilucidó que detrás de esto podrían estar devoradores de intelecto.

Avanzaron más por el interior de las minas, hasta llegar a una galeria. Exploraron la sala, y repararon en una vieja vagoneta. Al parecer tapaba un agujero escavado por los enanos. Tras retirar la vagoneta entre todos, el agujero quedo al descubierto, inmediatamente, un intenso malestar sacudió a los lanzadores de conjuros, que cayeron desmayados, quedando solo en pie los guerreros. Pasadas unas horas recobraron el conocimiento y vieron que del agujero había emergido un portal mágico.

Tras acceder al portal sintieron una abrumadora sensación de caida, y aparecierón en otras galerias, cubiertas por un espeso musgo y una gran humedad en el ambiente. La sacerdotisa ordenó avanzar en el nuevo emplazamiento. Al abrir una de las puertas que allí se encontraban un grupo de necrofagos atacón al grupo, siendo elimininados sin problemas. Después de esto, sucedio lo inesperado, una patrulla drow, los cuales presentaban los mismo sintomas que los duergars les atacó.
Al registrar sus cadaveres encontraron unas insignias que ninguno de ellos conocían, pero una cosa estaba clara, no eran de ninguna casa de menzoberranzan. La sacerdotisa ordenó que todas las insignias le fueran entregadas, pero no fue asi, uno de los mercenarios guardó una de ellas sin que los miembros de la casa dyrr se percataran de ello. Ante la sorpresa de todos, la sacerdotisa tomo una de las insignias y la puso debajo de su armadura, en el pecho, junto a la piel, y siguieron avanzando...[/i:17170ac4ec]

//Bueno espero que parezca bien y que sirvan para los que se han perdido algo. Lo hemos hecho juntos Sniich (Aunbryn) y yo, IRyD (Ym'Ulversil).

gatovengador

03/06/2008 16:16:59

//Yo he colgando lo mismo en el tablón de la infra. Si creeis conveniente o moved esos aquí o estos allí. Sorry por las barras.

DDE

03/06/2008 16:54:46

[i:b95c065b9e]La patrulla siguió avanzando por las galerías, de nuevo otra inesperada sorpresa. De detrás de una veta surgió una figura oscura. Tras observarla detenidamente vieron que se trataba de otro drow en muy mal estado. Le dieron una poción para intentar estabilizarlo y comenzó el intento de interrogatorio. Entre balbuceos y estertores (y no sin dificultad) reveló una información sumamente inquietante. Al final sacaron en claro lo siguiente: Se trataba del archimago de la casa Faen tabblar (casa caída en desgracia y olvidada, solo recordada por los miembros mas veteranos de la expedición) y había sido enviado con una patrulla hacía tres siglos. Buscaban las pieles de la serpiente dorada que habita en el centro del mundo, pues el poder que otorgan es enorme y aquel que las posea podría provocar la extinción de la magia. También habló de los phaerim, seres creados por unos rivvin, que tenían relación con esto.

Esta información desconcertó sumamente al grupo, salvo a los dos mercenarios, que parecían comprender mejor lo que ocurría. Mientras hablaba con el grupo les guió hasta un extraño portal, junto al cual finalmente expiro. Este estaba surcado por muescas, unas trescientas, una por año. Y en el cadáver un gran hallazgo, el libro del mago, donde encontraron cinco extraños mapas, de los cuales hicieron copias Ym Ulversil y Vinduil. Según dijo este último los mapas representaban diferentes áreas que se encontraban por debajo de menzoberranzan. Hecho esto atravesaron el portal; la única salida posible, y de nuevo aquella sensación de caída.

Aparecieron esta vez en una pequeña sala de piedra negra, completamente cubierta de un oscuro y espeso polvo, con solo una aparente salida, sellada por un muro de piedra. Ym examinó el muro, percatándose que no era más que una ilusión, concentrándose unos instantes avanzó decidido hacia el muro, que atravesó sin resistencia. Regreso entonces a la sala e insto al grupo a que lo siguiera. La sacerdotisa envió a los exploradores a reconocer la sala, y tras cotejar la zona con sus mapas descubrieron que coincidía con uno de ellos. Unos pasos más y un pequeño ser cuadrúpedo les atacó, no fue un reto. Poco después llegaron a una gran caverna con un oscuro lago, donde encontraron a un rivvin humano atemorizado. Huyó e intentaron capturarlo, pero murió desangrado por las heridas que le inflingieron. Al examinarlo descubrieron un tatuaje que solo Vinduil reconoció, al parecer se trataba de un guardia de aguas profundas. Con esta nueva información la sacerdotisa pidió al mercenario que les guiara en la dirección de esa ciudad, tomaron la salida norte y al doblar un recodo experimentaron de nuevo esa sensación de caída.

Mareados y confusos aparecieron en una amplia caverna cuyo techo estaba oculto por niebla. En esta zona todos los lanzadores de conjuros se sintieron fortalecidos y el grupo se percato que en esta zona había una mínima presencia de magia.
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// Este también lo hemos hecho juntos pero no revueltos IRyD (Ym) y yo; Sniich (Aunbryn), para recordar mejor las cosas e intentar ser mas fieles a lo que paso.