Belorfin

06/11/2006 15:12:27

El dia era especialmente caluroso. Isendel andaba por el oasis donde podia cobijarse en alguna sombra a leer y disfrutar de un mayor frescor. No muy lejos observo a un gnomo, sus colores llamativos hicieron que se fijase en el, sus movimientos... era el! era Livowitz! Llevaba tiempo sin ver a su amigo asi que se levanto y se dirigio hacia el.

Tras una pequeña charla y conocer a Cron, concluyeron que seria mejor ir a la Novena Campana, donde disfrutarian de un ambiente mas distendido y podrian refrescar sus gargantas con alguna bebida. Transcurrido un rato, entre risas, bromas... aparecio ella. Esa maldita niña.

- ¡Vuestras ropas estan rotas! - dijo entre risas.

Al instante sus tunicas parecian rasgadas, la niña no paraba de reir, parecia no querer responder a ninguna pregunta, sin duda no era lo que aparentaba... de pronto, echo a correr diciendo que si querian averiguar lo que sucedia la siguieran. Y la vaya si la siguienron.

Recorrieron todo el desierto, parando para descansar, o fruto de encuentros con otros aventureros, que muchas veces resultaban ser unos entrometidos. Un par de estos aventureros se unieron al grupo, un enano y un humano. La supuesta niña parecia querer ir tras un dragon, los arcanos y sus nuevos socios aceptaron el reto, movidos por la curiosidad y quien sabe si el miedo, ya que la pequeña habia dado muestras de su gran poder.

Aquel humano parecia desenvolverse bien y decidio guiarles, les llevo a traves de un bosque, hasta sus profundidades, y fue alli donde encontraron la gruta. El hombre aseguraba que alli encontrarian lo que buscaban.

Entraron con sumo cuidado, abatiendo a los basiliscos que custodiaban la guarida e intentando no quedar petrificados, hasta que por fin llegaron a una sala mas grande. Alli les esperaba un Dragon Verde, al que abatieron sin problemas. Pero luego... una inmensa sierpe blanca y multitud de lagartos aparecieron de la nada sembrando el terror entre los aventureros, incluso llegaron a dejar fuera de si a algunos de ellos, sin embargo tb consiguieron derrotarla.

El gnomo cogio su sangre, ya que la niña no hacia mas que pedirla.

Entonces paso lo mas extraño, la niña les dijo que para arreglar lo de sus ropas deberian colocarse en un circulo, con la sangre del dragon en medio. Al principio estaban reticentes pero despues y ante la imposibilidad de hacer nada mas, accedieron.

La mocosa lanzo un conjuro, el suelo temblo y ella desaparecio. Las sacudidas se repitieron varias veces. Y luego nada.

Todos se pusieron a buscar por la sala sin encontrar nada. Los compañeros de Isendel se encontraban abatidos y querian descansar sin embargo el enano y el humano comenzaron a tomar una actitud diferente.

Se mostraban nerviosos, agresivos, decian que la pantomima habia tocado a su fin, que el gnomo tenia un objeto y debia darselo, que nadie saldria de alli. Aquel humano se acerco a Isendel amenazante y le pregunto de que bando estaba. El elfo, obviamente no iba a traicionar a su amigo el gnomo Livowitz.

Entonces el humano ataco a Isendel, el enano se lanzo contra el gnomo y contra Cron, en un acto reflejo Isendel conjuro contra el humano dejandolo petrificado, y posteriormete contra el enano hasta abatirlo.

Una vez eliminada la amenaza, Livowitz les revelo el hallazgo, ese extraño libro, un tomo poderoso, que sin duda, habria que investigar...