Annazar

04/11/2005 11:59:04

Sin poder hacer nada, sentia la sangre aflorando a su rostro, inmovil y aterrado, el drow contemplaba la muerte con forma de mujer frente a sus ojos. La habia imaginado de muchas formas, la espada sangrienta de un mercenario, las garras de un oseogarfio, pero nunca con esa intimidante belleza. Su cuerpo se negaba a obedecerle, mas a su mirada afloraron unos sentimientos tan intensos que la sacerdotisa no tuvo inconvenientes para desentrañar. Un latigazo no fue bastante para contener la ira del joven drow. Ni dos.

La sangre teñia de rubi las baldosas blancas en torno a su padre, la crueldad de la mujer no conocia limites, manteniendolo atrapado en su hechizo lo golpeaba una y otra vez con ese latigo que parecia estar vivo sin esperar respuesta alguna. El crio no pudo contener el llanto, impotente veia como esa despiadada mujer mataba a su unico ser amado. Pero la ira reflejada en el rostro de su padre le hizo recuperar el aplomo, temia la represala de ambos, y por alguna razon comprendio que mostar su debilidad no le serviria mas que para morir.

El miedo lo mantenia con fuerzas, pues de otro modo no hubiese podido soportar esa horrible muestra de poder, mas este se transformo en panico cuando la sacerdotisa se giro hacia el y lo traspaso con su turbia mirada. Sin dejar de sonreir, la mujer advirtio al prisionero que su hijo pagaria su traicion si se negaba a colaborar. La daga solo tuvo que arañar la piel del crio para traspasarle su veneno, calido y lacerante, recorria el cuerpo de Annazar mientras ella observaba espectante a su padre. La ira cedio a la sumision, sellando asi el destino de ambos.


Jamas lograre alejar de mi memoria ese dia, los recuerdos han quedado grabados como un hierro candente, y han condicionado toda mi vida. Aquella noble, cuyo nombre debo mantener oculto por razones obvias, mato a mi padre. Segun me contaron los demas esclavos, habia sido un guerrero demasiado avispado para su rango, y por eso fue ejecutado. A mi me enviaron a los barracones para trabajar como esclavo, pues sobrevivi al veneno y eso les hizo pensar que era apto para tales tareas.
Aprendi a temer a las Hijas de Lolzh, y a esperar su recompensa.

Aqui abajo la vida es tan retorcida que a veces no puedo contener una sonrisa. Aun bajo los efectos del veneno consegui escuchar el secreto que mi padre revelo a la noble Hija, y tras la desaparicion de su casa soy el unico que lo conserva.

Ha pasado mucho tiempo, he obtenido mi libertad gracias a las guerras encubiertas entre casas, y he dedicado todos mis esfuerzos a seguir el camino de mi padre. La espada es lo mio. Tras algun esfuerzo soy miembro de la Melee-Magthere, y he sido admitido en la Noble Tercera Casa Oblodra. Y ahora guardo esperanzas, ya que se que Ella no ha muerto con su casa.